Balón de Oro 2023: Aitana Bonmatí, la chica que tiene una biblioteca en su casa y ahora es la Mejor Jugadora del mundo

Aitana Bonmati posa con el Balón de Oro a la Mejor Futbolista de la temporada, según France Football
Aitana Bonmati posa con el Balón de Oro a la Mejor Futbolista de la temporada, según France Football - Créditos: @FRANCK FIFE

A Aitana Bonmatí la insultaban. Cuando era pequeña, ser mujer y tener ganas de jugar a la pelota no eran compatibles. Entonces, los varones (de todas las edades) apelaban a la falta de respeto para amedrentarla. Así funcionaban las cosas a comienzos de siglo. Algo menos de dos décadas más tarde todo cambió. En su vida en la de millones de vidas de otras nenas. Y entonces, aquella coraza que se ponía para que las agresiones verbales (y las patadas) la hieran lo menos posible le dio paso a la sonrisa y la alegría de ser elegida para recibir el Balón de Oro 2023 a la mejor futbolista del mundo.

Mi infancia no fue fácil porque yo era la única niña en un mundo de hombres, y las peleas, los insultos que recibía creo que me los guardaba, no era capaz de sacarlos y simplemente me ponía una coraza”, le confesó hace unos días al diario español El País. Algo de eso anticipó en su libro Unidas somos más fuertes, escrito en 2022, donde reconoció que de pequeña era “fría y dura”.

Nacida en Sant Pere de Ribes (un municipio de la comarca del Garraf, en la provincia de Barcelona, donde viven algo más de 30.000 personas), es sin duda una de las jugadoras que más representa el estilo de la selección española que se proclamó campeona del mundo.

Como todas las chicas de su generación, Aitana comenzó jugando con varones. Primero en el CD Ribes y más tarde en el CF Cubelles, donde fue la única mujer. Su talento encandiló a Barcelona, que no dudó en ficharla en 2012, y desde entonces creció de la mano de una institución que apuesta firme y poderosamente por el fútbol femenino. No es casualidad que, en la gala del Balón de Oro, la entidad catalana recibiera el premio al mejor club de fútbol femenino de la temporada.

La española Aitana Bonmatí sostiene el trofeo de mejor jugadora del Mundial femenino 2023 tras la victoria ante Inglaterra en la final
La española Aitana Bonmatí sostiene el trofeo de mejor jugadora del Mundial femenino 2023 tras la victoria ante Inglaterra en la final - Créditos: @Rick Rycroft

Se da una curiosidad. Mientras Pep Guardiola le regaló uno de los elogios más lindos (el entrenador español la bautizó “La Iniesta de las mujeres”), ella, en su niñez, tenía como referencia futbolística a Xavi Hernández. Sin duda, aquel equipo blaugrana y su generación dorada dejó una huella en los que crecieron viéndolos como si fueran superhéroes.

Cuando se enfocó en el fútbol, su crecimiento fue inmediato y avasallante. Pronto estuvo en la órbita de la selección nacional, formando parte de una gran generación donde también sobresale Patri Guijarro y comenzó a poblar sus vitrinas en categorías inferiores con los títulos continentales con la Sub-17 (2015) y la Sub-19 (2017) y el subcampeonato mundial Sub-20 en 2018, en una final ante Japón que se perdió por haber sido expulsada en las semifinales. Además, fue subcampeona mundial y europea Sub-17 en 2014.

En Barcelona pronto se hizo indiscutible formando un mediocampo de ensueño con Guijarro y Alexia Putellas, ganadora del Balón de Oro en 2021 y 2022. Aitana fue clave para la conquista de la primera Liga de Campeones de la historia del club y del fútbol femenino nacional en 2021. En la goleada 4-0 a Chelsea, en la final, marcó y fue elegida mejor jugadora del partido.

Aitana, figura de la selección española campeona del Mundial femenino
Aitana, figura de la selección española campeona del Mundial femenino - Créditos: @Sebastián Domenech

Bonmatí tuvo una temporada de ensueño. Guió a La Roja a su primera copa del mundo, siendo el termómetro del equipo que por entonces conducía Jorge Vilda. Pero también resultó clave en su club, asumiendo mucho más protagonismo ante la ausencia por grave lesión de Putellas (a mediados de 2022 se rompió el ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda).

Hace apenas un año terminó quinta en la votación del Balón de Oro y el The Best de la FIFA 2022. Pero en este 2023 enhebró todo: campeona de la Champions League con Barcelona, campeona del mundo con el seleccionado de España, Mejor Jugadora de Europa para la UEFA y Balón de Oro. Solo su compañera Alexia Putellas había logrado tanto en una sola temporada.

En su playlist nunca faltan Ed Sheeran y Coldplay, aunque fiel a sus orígenes catalanes sigue a los alegres The Tyets y a los rumberos de La Pegatina. Lejos de la prejuiciosa idea de que los futbolistas leen poco, ella disfruta muchísimo de la lectura. Le apasiona todo lo relacionado con la Segunda Guerra Mundial y uno de sus libros favoritos es Si esto es un hombre, de Primo Levi, en donde narra su cautiverio en Auschwitz.

También le da espacio a lo vinculado al deporte. La gala del Balón de Oro en París la encontró en medio de Open, la apasionante biografía de Andre Agassi. Tantos años jugando al tenis y odiándolo. ¿Cómo es posible?”, le comentó a Pablo De Llano Neira en una reciente entrevista para el diario El País de España. Nada es casualidad: sus padres son profesores de Lengua y Literatura Catalana. Gracias a ellos, la casa de Aitana parece una biblioteca.

Aitana Bonmatí exhibe su Balón de Oro a la mejor futbolista del mundo 2023
Aitana Bonmatí exhibe su Balón de Oro a la mejor futbolista del mundo 2023 - Créditos: @Michel Euler

Coqueta, le gusta maquillarse y arreglarse para ocasiones especiales, como fue la noche de ayer en París. Aunque prefiere verse lo más natural posible. Tiene una contextura física standard, pero es puro músculo. Pura fibra. Pura conducta. El descanso y la nutrición no se negocian.

Su profesionalismo le permitió establecer marcas poco frecuentes para la alta competencia, siempre cercana a la posibilidad de lesiones: según datos de FIFPro, la organización que nuclea a los futbolistas, desde julio de 2018 es la jugadora que, a nivel internacional, disputó más partidos (242), 140 de ellos consecutivos.

En esa reciente entrevista con El País dejó varias frases que la representan. “Si el talento no va acompañado de disciplina, no llegas a ser una top mundial”, sentenció. “Sufro porque siempre quiero más”, agregó. Y aunque en su libro fue demasiado dura y reconoció: “No me permito fallar”, el paso de los años le permitió repensar esa afirmación: “Entendí que una no es perfecta y que el error a veces es el que te hace mejorar”.

Aitana sabe que lo que haga y lo que diga forma parte de su profesionalismo. Es por eso que no se leen declaraciones suyas fuera de lugar, y hasta cuida la indumentaria que le proponen para cada entrevista. “Estoy muy orgullosa. Ha sido un año excepcional en lo deportivo. El fútbol es un deporte colectivo, tengo que dar las gracias a mis compañeras y entrenadores”, declaró Bonmatí en el escenario del teatro del Chatelet, tras recibir el trofeo de manos del número uno del tenis masculino mundial, el serbio Novak Djokovic.

La jugadora catalana admitió estar “un poco nerviosa” y que había tenido problemas para dormir en los últimos días porque estar en la gala y poder ganar era ya “todo un sueño”. Aitana quiso además aprovechar su discurso tras recibir el trofeo para desear “un mundo más justo y más igual”.

Muchísimo más fuerte había sido su discurso a fines de agosto, cuando la UEFA la premió como mejor futbolista de la temporada europea, en medio de caso Rubiales y todo lo que generó el beso del exmandamás de la Real Federación Español de Fútbol a Jenni Hermoso, instantes después de ganar el Mundial.

La campeona fue contundente: “No están siendo momentos buenos para el fútbol español. No se ha celebrado el Mundial como debería ser y no me gustaría dejar pasar la página”. Y luego, amplió: “Como sociedad, no debemos permitir que haya abusos de poder en las relaciones laborales y faltas de respeto. Estoy con mis compañeras y con Jenni Hermoso”. Acto seguido, agregó: “A todas las mujeres que sufren lo mismo que Jenni, estamos con vosotras”. El aplauso fue ensordecedor.

Aitana Bonmatí es una justa merecedora del Balón de Oro. Y aunque ya cumplió el sueño de ser futbolista, se siente una abanderada de las próximas generaciones. Porque gracias a ella, y a otras miles de pioneras más que no aceptaron un no, las que ahora son niñas, ya pueden jugar a la pelota con otras niñas. Sin que eso sea un pecado ni un motivo para que las insulten o agredan.