Bélgica pasa a octavos con el mínimo esfuerzo, Ucrania queda eliminada

Kevin De Bruyne durante el empate de Bélgica ante Ucrania, que clasificó a los belgas para octavos de final de la Eurocopa-2024. En Stuttgart (Alemania), el 26 de junio de 2024 (Fabrice COFFRINI)
Kevin De Bruyne durante el empate de Bélgica ante Ucrania, que clasificó a los belgas para octavos de final de la Eurocopa-2024. En Stuttgart (Alemania), el 26 de junio de 2024 (Fabrice COFFRINI)

Vestida como Tintín pero sin aventurarse demasiado, Bélgica aseguró el miércoles en Stuttgart el pase a octavos como segunda del igualado Grupo E, luego de un empate 0-0 contra Ucrania, que queda eliminada de la Eurocopa-2024.

Los 'Diablos Rojos' se medirán en octavos de final a Francia el próximo lunes 1 de julio en Düsseldorf (16h00 GMT).

"No seremos favoritos contra Francia, pero sabemos que durante un torneo tienes que jugar a tu mejor nivel", declaró Kevin de Bruyne, elegido Jugador del Partido por la UEFA.

Tras la tercera y última jornada, los cuatro equipos de la llave terminaron empatados a cuatro puntos pero el mayor número de goles marcados dejó a Rumania como líder y a Bélgica como segunda.

Eslovaquia, con peor diferencia de goles que los belgas, aseguró el pase desde la tercera posición y Ucrania, a pesar de contar con 4 puntos, queda eliminada como cuarta clasificada.

La diferencia de goles que arrastraban desde la derrota por 3-0 contra Rumania en la primera jornada terminó siendo letal para las opciones de los ucranianos.

Enfrente, lejos de celebrar el resultado los aficionados belgas abuchearon con fuerza a sus jugadores tras el pitido final, descontentos por el juego de los hombres de Domenico Tedesco.

"Estoy sorprendido, porque para nosotros era realmente importante clasificarnos", valoró el seleccionador sobre la reacción de la afición, asegurando haber "intentado todo para ganar".

- "La paz tiene un precio" -

Sin Mykhaylo Mudryk, Andriy Lunin ni Oleksandr Zinchenko en el once de partida, los once titulares ucranianos saltaron al césped con una bandera de su país sobre los hombros, que mantuvieron durante los himnos. Un gesto en recuerdo a la invasión de Rusia que han realizado también en sus dos últimos partidos.

En el minuto 6 de partido, el fondo de aficionados ucranianos desplegó una lona con el rostro de un soldado ucraniano, compuesto con el retrato de otros 182 hinchas de clubes ucranianos fallecidos durante la guerra.

"La paz tiene un precio. Desde febrero de 2022, miles de aficionados del fútbol han muerto durante la guerra", se leía en una pancarta que acompañaba al retrato de Nazariy Hryntsevich, fallecido en el frente el pasado mes de mayo a los 21 años.

El mismo fondo del estadio volvió a tener protagonismo minutos más tarde pero por otro motivo, cuando De Bruyne (33) se quejó al árbitro de un puntero láser apuntando su rostro, en un libre directo con el que buscó sorprender.

La situación volvió a repetirse (41) y la organización tuvo que recordar por megafonía la prohibición de utilizar este tipo de objeto.

- Conformismo y poca agresividad

Con una segunda equipación con colores y estética en homenaje a Tintín, los belgas no demostraron el sentido de la aventura del emblemático personaje de cómic de Hergé. Cayeron en el conformismo, mostrando poca agresividad y sin efectividad.

Más allá del intento del capitán belga, la primera parte tuvo llegadas al área para ambos equipos pero sin que estas terminasen en disparos a portería.

Sí lo hizo Romelu Lukaku, criticado por la falta de precisión a lo largo del torneo, y que no pudo resolver un cara a cara atajado por Anatoliy Trubin (7).

Volvió a intentarlo en la segunda mitad, aunque de nuevo el guardameta ucraniano le ganó el duelo (65). Trubin, con los guantes de Ucrania desde que Lunin quedara señalado por la goleada contra Rumania, salvó también un gol de Yannick Carrasco (73).

Más tímidamente, tras haber estado concentrada en un plan ultradefensivo, Ucrania buscó el gol en los minutos finales, con un disparo al lateral de la red de Artem Dovbyk (75) y con un intento directo desde el saque de esquina de Ruslan Malinovskyi, despejado por Koen Casteels (83).

"Creo que todo el mundo vio que intentábamos ganar el partido. Jugábamos contra uno de los mejores equipos, así que fue muy difícil", valoró el seleccionador Serhiy Rebrov.

El empate dejó desolados a los ucranianos, pero en el lado belga las caras también eran largas por el juego plano antes de un primer desafío a vida o muerte contra la temible Francia.

dam/dr