Alemania y el 'efecto rejuvenecedor' de las rotaciones ante Hungría

El equipo alemán antes de arrancar la Eurocopa frente a Escocia, el 14 de junio en Múnich (Fabrice COFFRINI)
El equipo alemán antes de arrancar la Eurocopa frente a Escocia, el 14 de junio en Múnich (Fabrice COFFRINI)

Desde que tomara decisiones radicales en marzo, el seleccionador alemán Julian Nagelsmann tiene un once con los papeles bien definidos, secundado por un grupo de suplentes que mantiene una competencia sana. Su segunda prueba en la Eurocopa será ante Hungría el miércoles (16h00 GMT) en Stuttgart.

En la demostración de fuerza ante Escocia (5-1) en el partido de apertura de la competición, Nagelsmann tuvo margen para repartir minutos. Dejó en el banquillo tras el descanso a Robert Andrich, escolta de Toni Kroos en el centro del campo, después de que recibiera una amarilla.

A la hora de juego decidió economizar a la sensación Florian Wirtz para dar carrete a Leroy Sané, sin rodaje tras una pubalgia que le ha impedido tener continuidad desde marzo.

Al final del partido dio un respiro al ídolo recuperado Kroos y entró en juego Emre Can, repescado para la Eurocopa en el último minuto y que se dio el lujo de marcar el quinto de la noche.

"Es bastante infrecuente que los once que juegan el primer partido sean los mismos en todo el torneo. He demostrado que no necesito mucho tiempo cuando entro en un partido", dijo Niclas Füllkrug.

El delantero del Borussia Dortmund ha sido titular toda la temporada, pero en la selección parte como suplente de Kai Havertz, lo que no le impidió marcar un golazo, el cuarto de la cuenta alemana ante Escocia, cuando llevaba cinco minutos en la cancha.

- Dificultades en los últimos años -

"Necesitamos a cada jugador", explicó el arquero Manuel Neuer el lunes en conferencia de prensa. Can confirmó que existe "una muy buena energía en el seno del equipo", añadiendo que todo el mundo tiene "hambre".

"Cuando estamos en el banquillo siempre hay ganas de jugar", continuó.

La profundidad de banquillo se revela decisiva para el segundo partido ante Hungría, que llegaba con altas expectativas, pero se llevó un jarro de agua fría ante Suiza (3-1) en Colonia.

Alemania juega ante Hungría con la lección aprendida. Hace tres años en Múnich, en partido de la Eurocopa-2021, empató 2-2 tras ir por debajo dos veces y en la Liga de Naciones 2022-23 igualó fuera (1-1) y perdió en casa (1-0).

"Es un equipo muy experimentado que juega muy bien y tiene determinación. He entrenado a algunos de sus jugadores, sé de lo que son capaces", señaló Nagelsmann.

El equipo germano quiere seguir inflando la euforia que comienza a soplar en el país (22,5 millones de telespectadores contra Escocia), en el que algunos aficionados lucen ya banderas nacionales en los coches.

"No quiero apretar el freno, es a lo que toda la Alemania del fútbol aspiraba desde hace mucho tiempo", avisó Kroos, el líder del nuevo cuento de hadas del fútbol germano.

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