La Defensoría del Pueblo de Bolivia condena el linchamiento de tres personas a manos de una turba
LA PAZ, Bolivia (AP) — Al menos tres hombres fueron linchados hasta la muerte el miércoles en Bolivia por una turba de vecinos el miércoles, tras ser acusados de secuestro, un hecho que está en investigación y que fue condenado por la Defensoría del Pueblo.
El subcomandante de la policía en la región central de Cochabamba, Jaime España, informó que en una primera instancia se tiene el informe de “tres decesos” y que una comisión policial y del Ministerio Publico está investigando el caso.
Los tres hombres, según las autoridades policiales, fueron detenidos por intento de secuestro y, una vez en dependencias policiales, fueron abordados por un grupo de personas que los golpearon y lincharon.
La policía aún no dio a conocer sus identidades.
En los medios de comunicación se difundieron imágenes que la mañana del miércoles los tres varones fueron golpeados y el automóvil que intentaron vender fue quemado en la localidad de Ivirgarzama, a unos 130 kilómetros al este de La Paz.
“El vehículo era de los tres que han fallecido... Se va a pedir un informe de autopsia médico legal de las tres personas, en principio, podemos indicar que ellos tenían múltiples heridas, múltiples contusiones y quemaduras en el cuerpo”, agregó el subcomandante España.
Los vecinos denunciaron que los fallecidos intentaron secuestrar a una persona.
Horas antes, el comandante de la policía, Freddy Medinaceli, reportó ante la prensa local que los varones fueron detenidos en una primera instancia y que un grupo de vecinos los sacaron de las celdas policiales.
“Estaban siendo sometidos a algún tipo de medidas comunitarias por parte de la población”, agregó.
La Defensoría del Pueblo ha condenado fuertemente los hechos de violencia y ha solicitado que se indaguen las muertes. También hizo “un llamado a la unidad y la responsabilidad colectiva para construir una sociedad más justa y segura para todas las personas”.
En Bolivia, los linchamientos han ocurrido en otras ocasiones en poblaciones rurales apartadas o en barriadas ante la falta de policías y altos niveles de inseguridad.