Cuestionado por “antivacunas”, Robert Kennedy Jr. habló de la eficacia de la inoculación tras una segunda muerte por sarampión en EE.UU.
WASHINGTON.- Mientras que el brote de sarampión en el sur de Estados Unidos se descontrola -con casi 500 casos solo en Texas-, el secretario de Salud de Estados Unidos, Robert Kennedy Jr., viajó al estado sureño luego de que se conociera la noticia del segundo fallecimiento de un menor de edad por cuadros relacionadas a este virus y resaltó la importancia de la vacunación como forma de prevención.
“La forma más eficaz de prevenir la propagación del sarampión es la vacuna MMR. Hablé con el gobernador [Greg] Abbott y le ofrecí el apoyo continuo del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS). A petición suya, redistribuimos equipos de los CDC a Texas. Seguiremos el ejemplo de Texas y ofreceremos recursos similares a otras jurisdicciones afectadas", dijo en una publicación en X.
Esta decisión del Secretario generó sorpresa debido a que Kennedy es un reconocido activista antivacunas desde antes de ocupar el cargo en la administración trumpista.
I came to Gaines County, Texas, today to comfort the Hildebrand family after the loss of their 8-year-old daughter Daisy. I got to know the family of 6-year-old Kayley Fehr after she passed away in February. I also developed bonds with and deep affection for other members of…
— Secretary Kennedy (@SecKennedy) April 6, 2025
“Estoy aquí para apoyar a los funcionarios de salud de Texas y para aprender cómo nuestras agencias del HHS pueden colaborar mejor con ellos para controlar el brote de sarampión, que hasta el día de hoy tiene 642 casos confirmados en 22 estados, 499 de ellos en Texas”, agregó en su posteo.
Y siguió: “A principios de marzo, desplegué un equipo de los CDC (Centro de Prevención de las Enfermedades, según sus siglas en inglés) para reforzar la capacidad de respuesta local y estatal en varias regiones de Texas, abastecer a farmacias y clínicas administradas por Texas con las vacunas MMR necesarias, así como otros medicamentos y suministros médicos”.
El hombre de 71 años -sobrino del expresidente John F. Kennedy- pasó gran parte de las últimas dos décadas dedicándose a promover teorías de conspiración que vinculan las vacunas infantiles con el autismo. También dijo que las vacunas que se aplicaron contra el Covid-19 fueron las “más mortales” jamás creadas y puso en duda que los gérmenes causen enfermedades infecciosas.
Ante las críticas que recibió por estas cuestiones, el funcionario negó la etiqueta de “antivacunas”, señaló que “todos sus hijos están vacunados” pero afirmó que planteó “preguntas incómodas” sobre las vacunaciones . “Creo que las vacunas desempeñan una función crítica en la atención sanitaria”, dijo Kennedy hace pocos meses ante la Comisión de Finanzas del Senado cuando asumió su cargo en la Secretaría de Salud.
El brote en Estados Unidos
El país del norte se enfrenta a la tercera muerte conocida relacionada con el sarampión vinculada a este brote. Dos fueron los menores en edad escolar en Texas y la otra un adulto en Nuevo México, ninguno de los cuales estaba vacunado.
El segundo menor -que falleció este jueves- no tenía condiciones de salud subyacentes y murió por “insuficiencia pulmonar por sarampión”, según indicó el Departamento de Servicios de Salud del Estado de Texas en un comunicado de prensa. Aaron Davis, portavoz del Sistema de Salud UMC en Lubbock, Texas, comentó que el niño “recibía tratamiento por complicaciones del sarampión mientras estaba hospitalizado”.
Según lo que informaron las autoridades hasta el momento, el brote en el oeste de Texas se extendió a Nuevo México, Oklahoma y Kansas y contagió a casi 570 personas. La Organización Mundial de la Salud (OMS) también informó de casos relacionados en México.
La vacuna contra el sarampión, las paperas y la rubéola se utilizó de manera segura durante más de 60 años y tiene una efectividad del 97% en el combate contra el sarampión después de dos dosis. Se recomienda la primera dosis para niños de 12 a 15 meses, y la segunda para edades de cuatro a seis años. El sarampión es un virus respiratorio que puede sobrevivir en el aire hasta dos horas, por lo que se cree que nueve de cada 10 personas susceptibles pueden contraerlo si están expuestas.
Agencia AP