Qué les cuentan los noticieros a los rusos: el relato de los planes de Occidente para dominarlos

Pantallas de televisión muestran un discurso del presidente ruso Vladimir Putin en una tienda de Moscú
Pantallas de televisión muestran un discurso del presidente ruso Vladimir Putin en una tienda de Moscú - Créditos: @Getty

NUEVA YORK.- Vesti Nedeli, el resumen semanal de noticias insignia de la televisión controlada por el Kremlin, hizo hace poco tiempo un largo repaso de las potencias de Occidente que fueron a invadir Rusia y se volvieron con la cola entre las piernas: Suecia en el siglo XVIII, Francia en el XIX y Alemania en el XX.

En determinado momento, el conductor del programa, Dimitri Kiseliov, dijo que los enemigos de Rusia ahora quieren revertir aquellas derrotas, y culpó a Occidente de la guerra que Rusia provocó en Ucrania. El objetivo de liquidar a Rusia “lleva siglos y no se ha modificado”, dijo Kiseliov. “Nosotros estamos a la defensiva”.

La aplicación del periódico del gobierno ruso aparece en la pantalla de un iPhone mostrando al presidente ruso Vladimir Putin durante su discurso en el Kremlin en Moscú, Rusia, el martes 22 de febrero de 2022.
La aplicación del periódico del gobierno ruso aparece en la pantalla de un iPhone mostrando al presidente ruso Vladimir Putin durante su discurso en el Kremlin en Moscú, Rusia, el martes 22 de febrero de 2022. - Créditos: @ (AP Photo/Alexander Zemlianichenko Jr)

En los seis meses que lleva la invasión a Ucrania, el énfasis de los medios estatales rusos en su cobertura de la guerra fue virando. Ya no se hacen predicciones sobre ofensivas relámpago para borrar a Ucrania del mapa, y se habla menos de ser recibidos como liberadores que vienen a “desnazificar” y desmilitarizar Ucrania, aunque la etiqueta de “fascista” se sigue aplicando libremente y sin tapujos.

Ahora, la versión del Kremlin —la única que reciben la mayoría de los rusos, ya que afirmar lo contrario es ilegal— es que Ucrania es el campo de batalla de una guerra civilizacional más amplia librada en contra de Rusia.

Las noticias ahora hablan menos de Ucrania que de “frenar los planes de Occidente para tomar el control de la Madre Rusia”, dice Stanislav Kucher, veterano conductor de la televisión rusa y actual consultor de un proyecto para que los rusos tengan acceso a medios de noticias proscriptos por el Kremlin. Dentro de esa configuración, Estados Unidos es el principal adversario, con Europa y la OTAN como sus lacayos.

Vladimir Soloviov, un popular anfitrión de programas de entrevistas y máximo aplaudidor del gobierno del presidente Putin, dijo este mes que “Rusia fue invitada a la mesa de la sociedad occidental, pero no como comensal, sino como postre.”

En los medios de comunicación estatales, Rusia es presentada como un pilar de los valores tradicionales y destinada a prevalecer sobre esa ciénaga moral que es Occidente. También tienen una fijación cotidiana con los temas LGBTQ+: mirar un rato de televisión rusa es llevarse la impresión de que el decadente mundo occidental es manejado por los homosexuales. Pero a pesar de toda esa consternación y ese horror, los medios de noticias no se privan de difundir golosamente imágenes escabrosas de la vida gay.

La dimensión del escalofriante número de bajas rusas en Ucrania sigue totalmente velado en los medios de prensa: según ellos, solo las tropas ucranianas sufren enormes pérdidas diariamente. Y el sufrimiento de los civiles ucranianos está totalmente invisibilizado. A veces hacen algún informe emotivo sobre la muerte de algún soldado ruso en particular, pero las reacciones no siempre son las que el Kremlin habría deseado.

Un reciente informe sobre el sargento primero Aleksei Malov, de 32 años, comandante de un tanque ruso que murió en batalla, no mencionaba la causa de su muerte, sino que ponía el foco en cómo habían gastado sus padres la compensación monetaria que el gobierno les había dado por la muerte de su hijo.

Los habitantes de las regiones de Donetsk y Luhansk, el territorio controlado por los gobiernos separatistas prorrusos en el este de Ucrania, observan el discurso del presidente ruso Vladimir Putin en su lugar temporal en la región de Rostov del Don, Rusia, el lunes 21 de febrero de 2022.
Los habitantes de las regiones de Donetsk y Luhansk, el territorio controlado por los gobiernos separatistas prorrusos en el este de Ucrania, observan el discurso del presidente ruso Vladimir Putin en su lugar temporal en la región de Rostov del Don, Rusia, el lunes 21 de febrero de 2022. - Créditos: @(AP Photo/Denis Kaminev, Archivo)

“Compramos un auto nuevo en memoria de nuestro hijo”, decía el padre, y agregaba qué estrenaron para ir a visitar la tumba de su hijo en el cementerio de su pueblo.

El informe fue difundido en “Vesti Nedeli” y causó conmoción. Los opositores a la guerra lo defenestraron, calificándolo de propaganda torpe y desalmada, mientras que sus partidarios lo elogiaron por mostrar el apoyo de los rusos comunes a la guerra, a pesar del precio que les toca pagar.

La televisión estatal ha minimizado la recuperación de las fuerzas ucranianas en la estratégica y simbólicamente importante península de Crimea, pero las imágenes de los estallidos del fuego antiaéreo en la región que circularon por las redes sociales le meten presión al Kremlin para que pase a la acción. La realidad visceral de la guerra, especialmente el hecho de que el territorio anexado no es inmune, llegó finalmente a los rusos comunes por esos ataques ucranianos sobre Crimea, pero también por lo que según los investigadores fue un asesinato político premeditado en Moscú.

Daria Dugina, de 29 años, hija de un famoso nacionalista ruso y ella misma un “halcón”, fue asesinada el sábado por la noche con una bomba en su auto, un hecho que los medios de prensa atribuyen a Ucrania y sus socios occidentales.

Citando al novelista conservador y veterano de guerra de Ucrania, Zakhar Prilepin, la cadena de televisión estatal rusa RT dijo que Occidente había “acostumbrado” a Ucrania a realizar ese tipo de atentados. Durante toda la semana, los comentaristas políticos de varios programas se volcaron a las redes sociales para reclamarle al Kremlin más dureza con Ucrania.

Sin embargo, las señales del costo de la guerra siguen siendo la excepción, ya que los noticieros y los programas de entrevistas han derivado hacia una infinidad de temas económicos y sociales para recalcar que Rusia está atrapada en un amplio conflicto con Occidente, señala Francis Scarr, que monitorea diariamente la televisión rusa para la BBC.

Los medios de comunicación oficiales insisten que la guerra se prolonga por culpa de las armas enviadas por Occidente, pero por otro lado dicen que esas armas no sirven para nada.

Los informes rara vez habla del padecimiento de Rusia por las sanciones occidentales: por el contrario, dicen que perjudican mucho más a Occidente.

La gente ondea banderas nacionales rusas celebrando el reconocimiento de la independencia en el centro de Donetsk, el territorio controlado por los militantes prorrusos, en el este de Ucrania, a última hora del lunes 21 de febrero de 2022.
La gente ondea banderas nacionales rusas celebrando el reconocimiento de la independencia en el centro de Donetsk, el territorio controlado por los militantes prorrusos, en el este de Ucrania, a última hora del lunes 21 de febrero de 2022. - Créditos: @(AP Photo/Alexei Alexandrov, File)

Los asuntos internos pasan a un segundo plano frente a los temas del exterior. El 9 de agosto, el ataque ucraniano causó explosiones en una base aérea rusa en Crimea, donde murió al menos una persona y quedaron inutilizados ocho aviones de combate.

Sin embargo, en los programas del prime time ruso se la pasaron discutiendo sobre el allanamiento del FBI a la mansión de Donald Trump en Mar-a-Lago.

Según los analistas, el histórico manual de propaganda de los rusos se mantiene mayormente intacto, aunque los detalles cambian con el tiempo. Durante la era soviética, por ejemplo, el discurso estándar era las potencias occidentales estaban empeñadas en perjudicar a Rusia—algo a menudo cierto— y al mismo tiempo se afirmaba que esas potencias se estaban desmoronando.

El gobierno atribuye la actual hostilidad norteamericana y europea “a que Rusia se está fortaleciendo, y por eso Occidente quiere interponerse en su camino”, dice Led Gudkov, del Centro Levada, una encuestadora rusa independiente, y agrega que es parte de una línea retórica más general de “mentiras flagrantes y demagogia”.

Los informes de los medios sobre la situación en el este de Ucrania inevitablemente muestran que la vida bajo el control ruso mejora constantemente. Cuando los presentadores de noticias pasan a un informe en vivo desde el frente, la pregunta más frecuente es “¿Qué éxitos tienen para informarnos hoy?” señaló Scarr, que monitorea la televisión rusa para la BBC.

“Automáticamente, dan vuelta la cosa: solo se habla de los éxitos rusos y del fracaso de los ucranianos”.

Traducción de Jaime Arrambide

Por Neil MacFarquhar