Crisis sanitaria: paros durante tres días amenazan la normal atención en las clínicas privadas

Carteles con consignas enmarcan la protesta en las clínicas privadas
Carteles con consignas enmarcan la protesta en las clínicas privadas - Créditos: @Alejandro Guyot

“Tengo 14 años de enfermera, cuatro hijos, pago $300.000 de alquiler y gano $500.000. Hace ya varios meses que tengo que pedir adelantos para llegar a fin de mes”, lamentaba Alicia Nierenberger, en la puerta de la Clínica Bazterrica, sobre la calle Juncal, en Palermo. Esa institución, al igual que muchas otras privadas de todo el país, amanecieron esta mañana tapizadas de banderas y pegatinas con consignas que exigen un aumento salarial.

Los trabajadores de la sanidad –enfermeros, técnicos de laboratorio, radiólogos, camilleros, mucamas; empleados de lavadero, mantenimiento y administrativos– convocaron a una medida de fuerza que comenzó hoy y continuará al menos hasta viernes de esta semana. La modalidad de la protesta consta en realizar cortes de dos horas en la atención en este jornada, tres mañana y cuatro el viernes.

Si bien la idea es cumplir ese tiempo de paro por turno (mañana, tarde y noche), los horarios cambiarán según cada institución. También variará el impacto de la medida en la atención a los pacientes: hay clínicas donde el servicio se ve fuertemente limitado, mientras que en otros centros de salud todo continúa con cierta normalidad. Por eso, es recomendable, en caso de tener una consulta reservado o un estudio de laboratorio programado, llamar a la clínica antes de ir. Cabe aclarar que las guardias y las áreas de internación siguen funcionando, aunque en algunos casos con personal acotado.

Banderas y pegatinas en uno de los sanatorios afectados
Banderas y pegatinas en uno de los sanatorios afectados - Créditos: @Alejandro Guyot

En la Clínica Bazterrica, Marcelo Vergara, camillero, explicó a LA NACION que hoy pararon de 10 a 12. Mañana se prevé que se extienda hasta las 13 y el viernes, a las 14. Él gana $500.000 al mes por una jornada de siete horas diarias.

“Yo no tuve problema para realizarme el estudio que tenía programado, pero adentro la clínica está muy tranquila”, relataba la paciente María, de 65 años, que fue a la Bazterrica esta mañana.

A pocas cuadras de ahí, en la sede de Cemic situada en Las Heras al 2900, Julio Salinas, que forma parte del equipo del área de Alimentación, describió a este medio que hoy se empezaron a tomar muestras de laboratorio a partir de las 9. Mañana recibirán pacientes de demanda espontánea en esa área desde las 10 y el viernes, a partir de las 11.

“Tuve que esperar un poco más de lo esperado para sacarme sangre, pero lo logré”, dijo Roberto Novaro, de 44 años, que fue a Cemic para la extracción.

En cuanto al Sanatorio de los Arcos, que funciona en Juan B. Justo 909, si bien había personal que adhirió a la protesta, todos los turnos y la demanda espontánea fluían con normalidad. Sin embargo, el hall central estaba repleto de carteles y casi a oscuras.

Trabajadores del Otamendi, movilizados
Trabajadores del Otamendi, movilizados - Créditos: @Alejandro Guyot

En el Sanatorio de la Trinidad, en Cerviño 4720, la escena era similar. Todos los vidrios que dan a la calle tenían consignas en contra de la empresa propietaria y banderas colgadas con frases en línea con el reclamo salarial.

“Nosotros unificamos los turnos y paramos de 12 a 16. En el horario del paro, bajamos los turnos programados para consultorios externos, la empresa debería avisarle a los pacientes. En cuanto a los estudios de laboratorio, funcionan con normalidad hasta las 11.30″, detallaba Andrea Ariza, que hace 15 años trabaja allí como enfermera.

El conflicto

En medio del conflicto, la Secretaría de Trabajo citó “con carácter urgente” a una audiencia para mañana a la representación gremial –encabezada por Héctor Daer- y a las cinco cámaras empresarias que intervienen en las paritarias de este sector.

El sindicato señala a “los empresarios de la salud” como responsables de “los problemas que puedan ocasionarse en la atención de los pacientes”. La medida de fuerza se desarrolla como parte la crisis que afecta a todo el sistema sanitario, en este caso, del subsector privado.

Los trabajadores de la sanidad reclaman mejoras salariales
Los trabajadores de la sanidad reclaman mejoras salariales - Créditos: @Alejandro Guyot

Según el índice de costos elaborado por la Asociación de Clínicas, Sanatorios y Hospitales Privados de la República Argentina junto con la Cámara de Entidades de Diagnóstico y Tratamiento Ambulatorio (Adecra+Cedim), en 2023 los costos de dar servicios subieron un 213,1%, mientras que los aranceles cobrados por las prepagas –que subieron sus cuotas 137,5% entre enero y diciembre, según lo que les permitió la regulación entonces vigente– aumentaron un 118%.

“El nivel de adhesión de la protesta de sanidad contra los prestadores institucionales es variable. No es lo mismo en la Capital que en el interior del país. Cuando el Gobierno les permitió a las prepagas aumentar las cuotas, las empresas negociaron de manera individual con sus prestadores y no trasladaron la totalidad del aumento. Ahora vemos un congelamiento de las cuotas hacia adelante y creemos que eso nos va a complicar aún más el panorama”, dijo a LA NACION Jorge Cherro, presidente de Adecra, una de las entidades que es parte de las negociaciones salariales.

Y agregó: “Hoy un médico puede cobrar de $4000 a $9000 la consulta. Eso es muy poco y por eso también muchos se van de las cartillas. Vemos un éxodo de médicos porque en sus consultorios privados pueden cobrar $20.000 o $30.000 una consulta. El sistema está frente a un verdadero colapso. Hay muchas clínicas que están cerrando”.

El plan de lucha empezó hoy y seguirá mañana y pasado
El plan de lucha empezó hoy y seguirá mañana y pasado - Créditos: @Alejandro Guyot

Las cuestiones a resolver en el sistema sanitario son muchas. Otro ejemplo, también vinculado a lo económico, es que hace ya más de dos décadas que, por la declaración de la emergencia sanitaria, los prestadores pueden no pagar impuestos sin sufrir ejecuciones de la AFIP. Ese estado de emergencia cesó, en lo que a la normativa se refiere, al iniciarse 2024 y, por ahora, el organismo de recaudación mantiene formalmente postergado para después del 31 de julio “el inicio de los juicios de ejecución fiscal y la traba de medidas cautelares” para un grupo de contribuyentes, entre los cuales figuran los prestadores de salud.

Según señaló Cherro, un relevamiento de la AFIP indica que “5000 centros asistenciales, de un total de más de 25.000 que hay en el país” podrían ser ejecutados por sus deudas tributarias a partir de agosto, una fecha que, evalúa el directivo, “está a la vuelta de la esquina”.