Corea del Sur: la insólita pelea entre mandatarios por los perros que les regaló Kim Jong-un

Moon Jae-in y los perros obsequiados por Kim Jong-un
Moon Jae-in y los perros obsequiados por Kim Jong-un

SEUL.– Un par de perros obsequiados por el gobernante norcoreano Kim Jong-un han quedado envueltos en las disputas políticas en Corea del Sur, donde el expresidente acusa a su sucesor conservador de falta de apoyo económico para el cuidado de los animales por lo que decidió devolverlos.

Moon Jae-in, un liberal que dejó el cargo en mayo, recibió los dos perros de caza pungsan –una raza nativa de Corea del Norte– como regalo de Kim al cabo de su conferencia de paz en Pyongyang en septiembre de 2018.

Los perros son, oficialmente, de propiedad estatal, pero Moon se llevó la pareja y uno de sus siete cachorros a su casa después de dejar el cargo. En marzo se enmendó una ley para permitir que los regalos presidenciales quedaran fuera de los archivos presidenciales si eran animales o plantas.

Pero la oficina de Moon indicó el lunes que él ya no podía criar a los tres perros porque el gobierno del actual presidente Yoon Suk-yeol se negaba a cubrir los costos de los alimentos y de la atención veterinaria.

ARCHIVO - En esta foto provista en octubre de 2018 por la Casa Azul Presidencial de Corea del Sur, el presidente surcoreano Moon Jae-in acaricia un perro blanco de raza norcoreana pungsan llamado Gomi, en Seúl, Corea del sur. (Casa Azul Presidencial de Corea del Sur via AP, File)
ARCHIVO - En esta foto provista en octubre de 2018 por la Casa Azul Presidencial de Corea del Sur, el presidente surcoreano Moon Jae-in acaricia un perro blanco de raza norcoreana pungsan llamado Gomi, en Seúl, Corea del sur. (Casa Azul Presidencial de Corea del Sur via AP, File)

El Ministerio del Interior y la Seguridad informó que los perros fueron devueltos al gobierno este martes y que estaban siendo examinados por veterinarios en la ciudad de Daegu.

Subsidios

En su declaración en Facebook, la oficina de Moon acusó a la de Yoon de bloquear “inexplicablemente” la propuesta del ministerio de proveer fondos del gobierno para el cuidado de los animales.

El ministerio confirmó que había preparado un proyecto para otorgar subsidios por 2,5 millones de won (1810 dólares) mensuales para los alimentos y la atención veterinaria de los perros y para los trabajadores que los cuidan. Pero la cartera indicó que los planes quedaron en suspenso durante meses debido a “opiniones contrarias” internas.

“Parece que la oficina presidencial, a diferencia de los Archivos Presidenciales y el Ministerio del Interior y Seguridad, tiene una opinión negativa acerca de confiar el cuidado de los perros pungsan al expresidente Moon”, declaró la oficina de Moon.

Si ese es el caso, el gobierno de Yoon debería estar “tranquilo” para poner fin a esa encomienda, añadió. “Habría decepción y arrepentimiento, ya que eran animales de compañía a los que (Moon) les tomó cariño, pero no habría forma de rechazar el fin de la encomienda”.

Por su lado, la oficina de Yoon echó la culpa a Moon, diciendo que nunca le impidió quedarse con los animales y que las discusiones sobre el apoyo financiero seguían en curso. “Fue decisión del expresidente Moon Jae-in devolver los perros de Pungsan a los Archivos Presidenciales” en lugar de esperar una enmienda legislativa para asegurar los subsidios, argumentaron.

La disputa entre Moon y Yoon sobre los perros suscitó críticas en Internet, con usuarios que lamentaban que los animales fueran tratados sólo como propiedades.

Moon y Kim.
Moon y Kim.

Apostando su único mandato presidencial por el acercamiento intercoreano, Moon se reunió tres veces con Kim en 2018 y presionó mucho para ayudar a organizar las reuniones de Kim con el expresidente estadounidense Donald Trump. Pero la diplomacia nunca se recuperó del colapso de la segunda reunión entre Kim y Trump en 2019 en Vietnam, donde los estadounidenses rechazaron las demandas de Corea del Norte de un importante alivio de las sanciones a cambio del desmantelamiento de una antigua instalación nuclear, lo que habría supuesto una rendición parcial de sus capacidades nucleares.

Desde entonces, Kim ha prometido reforzar su disuasión nuclear para contrarrestar la presión “gansteril” de Estados Unidos y ha acelerado su desarrollo armamentístico a pesar de los limitados recursos y las dificultades relacionadas con la pandemia. Corea del Norte ha disparado docenas de misiles este año, aprovechando la distracción creada por la guerra de Rusia contra Ucrania para aumentar el desarrollo armamentístico e incrementar la presión sobre Estados Unidos y sus aliados regionales.

Agencia AP