Condenan a siete años de cárcel a la artista rusa que protestó contra la guerra en un supermercado

FOTO DE ARCHIVO: La artista Aleksandra (Sasha) Skochilenko siendo escoltada por agentes de policía antes de una vista judicial en San Petersburgo, Rusia

Por Andrew Osborn

16 nov (Reuters) - Una artista rusa que sustituyó las etiquetas de los precios de los supermercados por mensajes que pedían el fin de la guerra de Moscú en Ucrania fue condenada el jueves a siete años de cárcel, acusada de difundir a sabiendas información falsa sobre el ejército ruso.

Un tribunal de San Petersburgo emitió el veredicto horas después de que la artista, Aleksandra Skochilenko, de 33 años, hiciera una última declaración ante el tribunal, en la que pedía al presidente del tribunal que actuara con sabiduría y compasión y la dejara en libertad.

Además de la pena de siete años de prisión, a Skochilenko se le prohibió utilizar Internet durante los próximos tres años. Un fiscal había pedido para ella ocho años de cárcel.

Sus partidarios corearon repetidamente "¡Vergüenza, vergüenza!" tras el veredicto, mientras una sonriente Skochilenko hacía la forma de un corazón con las manos en la jaula del tribunal, rodeada de agentes de policía.

La artista, que ya ha pasado más de un año y medio en prisión, ha admitido haber sustituido etiquetas de precios en un supermercado el 31 de marzo de 2022 por trozos de papel en los que pedía el fin de la guerra y criticaba a las autoridades.

Pero ha negado la acusación formal de difundir a sabiendas información falsa sobre el ejército.

Los críticos afirman que el caso forma parte de la represión contra cualquiera que se manifieste en contra de la "operación militar especial" de Rusia en Ucrania, que ha dado lugar a casi 20.000 detenciones y más de 800 causas penales.

Tras el envío de tropas a Ucrania a principios del año pasado, Rusia endureció sus leyes sobre la disidencia para intentar silenciar a los críticos de lo que el presidente Vladimir Putin presenta como una lucha existencial con Occidente.

En su declaración final, Skochilenko había dicho al juez que era una pacifista que valoraba la vida humana por encima de todo.

"Sea cual sea la decisión que tome, pasará a la historia", dijo Skochilenko al juez, según una grabación de su discurso realizada por sus partidarios.

"Puede demostrar cómo resolver conflictos con la ayuda de la palabra y la compasión."

Los abogados de Skochilenko habían dicho al tribunal que su cliente no había cometido ningún delito y que no sobreviviría a la cárcel debido a su enfermedad celíaca, una grave intolerancia al gluten. Amnistía Internacional la ha declarado "presa de conciencia".

Durante su declaración final, Skochilenko también se dirigió al fiscal del Estado, que había pedido para ella una larga pena de cárcel.

"¿Qué les dirás a tus hijos? ¿Que un día encarcelasteis a una querida artista gravemente enferma por cinco trozos de papel?", le dijo.

"No tengo miedo, y quizá sea precisamente por eso por lo que mi Gobierno me tiene tanto miedo, y me mantiene enjaulada como al más peligroso de los animales."

(Información de Reuters; redactado por Andrew Osborn; editado por Barbara Lewis, Kevin Liffey, Alexandra Hudson; editado en español por Javi West Larrañaga)