Comienza en Camboya el proceso de apelación del exlíder opositor condenado por traición
Bangkok, 30 ene (EFE).- Un tribunal de justicia de Camboya comenzó este martes a escuchar el recurso de apelación presentado por el líder de la ilegalizada oposición de Camboya, Kem Sokha, contra su condena a 27 años de cárcel tras ser hallado culpable en marzo de 2023 por un delito de traición.
Sokha compareció desde primeras horas de la mañana frente al Tribunal de Apelaciones de Nom Pen, entre fuertes medidas de seguridad, para presentar sus alegatos sobre el delito, calificado de persecución política por grupos garantes de los derechos humanos.
Tras varias horas de vista, el tribunal decidió programar otras ocho jornadas para escuchar las alegaciones del político condenado y que se celebrarán de manera espaciada hasta septiembre, recoge el portal de noticias CamboJa News.
"No hay camino futuro para Camboya hasta que Kem Sokha sea liberado y se le devuelvan sus derechos políticos", denunció la víspera en X su otrora aliado y político opositor en el autoexilio, Sam Rainsy.
Por su parte, la oenegé Amnistía Internacional reclamó el lunes en un comunicado que las autoridades camboyanas revoquen la condena contra Sokha y pongan "fin a la actual represión contra los grupos de oposición".
"La condena y sentencia de 27 años de prisión impuesta a Sokha muestra el desprecio de las autoridades camboyanas por los derechos humanos y el Estado de derecho", pide la directora regional adjunta de Investigación de AI, Montse Ferrer, que denuncia que el proceso judicial tiene por objetivo "silenciar" al opositor.
"Cualquiera que se atreva a hablar contra el Gobierno está en riesgo. Las autoridades camboyanas deben respetar, proteger, promover y hacer realidad los derechos humanos de todas las personas, incluidos los derechos a la libertad de expresión, reunión pacífica y asociación, y poner fin a la creciente restricción del espacio cívico", remarca Ferrer.
Sokha, quien además fue inhabilitado de por vida para ejercer cargos políticos, cumple condena en su domicilio en Nom Pen, donde ya se encontraba bajo régimen de arresto domiciliario antes del juicio -iniciado en 2020- y donde tiene prohibido cualquier tipo de comunicación con el exterior.
El opositor, de 70 años y líder del ilegalizado Partido para el Rescate Nacional de Camboya (PRNC), fue detenido en 2017 acusado de conspirar con extranjeros para derrocar al Gobierno del por entonces primer ministro, Hun Sen.
El arresto de Sokha fue realizado a instancias de Hun Sen -quien llegó al poder en 1985 y cedió el mando del país el año pasado a su hijo, Hun Manet- en medio de una vasta ofensiva contra la oposición, oenegés y medios de comunicación independientes meses antes de la celebración de las elecciones generales en 2018.
Sokha fue detenido tras la difusión de un vídeo en el que aparecía alardeando ante sus seguidores de contar con asesoramiento de Estados Unidos para propiciar un cambio de régimen político en el país.
Su arresto fue seguido de la ilegalización del PRNC y la huida de Camboya de un centenar de sus dirigentes, el cierre de varios medios de comunicación independientes y la expulsión de algunas oenegés.
El partido de Hun Sen logró todos los 125 escaños del Parlamento en las citadas elecciones de 2018, mientras que en julio de 2023 también venció con amplia mayoría en los comicios, celebrados con la ausencia de una oposición representativa, antes de pasar el testigo a su hijo primogénito un mes después de la cita con las urnas.
(c) Agencia EFE