Colombia descarta servir de observador en elecciones presidenciales de Venezuela

BOGOTÁ (AP) — El gobierno colombiano descartó el jueves enviar observadores a la elección presidencial que se avecina en Venezuela, en la que Nicolás Maduro busca un tercer mandato y que ha sido cuestionada por los sectores opositores por obstáculos a su participación.

El canciller colombiano, Luis Gilberto Murillo, dijo a la prensa en Bogotá que aunque tenían la intención de enviar observadores al proceso electoral, no fue posible estructurar una misión con las características técnicas que exigía la Misión de Observación Electoral (MOE), una organización colombiana no gubernamental dedicada a este tipo de veeduría desde hace 18 años.

Murillo señaló que en vez de los observadores técnicos irán “algunas personalidades colombianas”, sin especificar quiénes y en qué etapa del proceso electoral.

Colombia había sido convocada en abril por el canciller venezolano, Yvan Gil, para unirse a la observación electoral, sin que fueran públicos los detalles de un acuerdo para participar con una misión.

La negativa de Colombia se presenta pocos días después de que las autoridades electorales de Venezuela revocaran la invitación a la Unión Europea para enviar observadores como protesta a que el bloque europeo decidiera retirar sanciones al presidente del Consejo Nacional Electoral y otros exdirectivos de ese ente pero mantenerlas a venezolanos señalados por actos de represión o por socavar la democracia en este país sudamericano.

Venezuela también había invitado a hacer veeduría a la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), el Centro Carter y la Comunidad del Caribe (CARICOM). Sin embargo, aún no está en firme la presencia de la totalidad de los organismos en las elecciones presidenciales del 28 de julio.

El presidente del Consejo Nacional Electoral venezolano, Elvis Amoroso, ratificó en la víspera la convocatoria de veeduría para las elecciones presidenciales a las instituciones electorales y gobiernos del mundo, resaltando que todos son bienvenidos “siempre que quienes participen den cumplimiento a la legislación venezolana que regula la materia”.

Ronal Rodríguez, investigador del Observatorio de Venezuela de la Universidad del Rosario de Bogotá, dijo a The Associated Press que, desde el punto de vista político, la invitación a Colombia podría haber sido una forma de sumar un país aliado para legitimar un proceso electoral cuestionado que representaba riesgos para el gobierno colombiano.

Para Rodríguez, el organismo idóneo para hacer el acompañamiento era la Unión Europea, dado que tenían el personal y el conocimiento previo sobre el funcionamiento del sistema electoral venezolano. En cambio, el gobierno colombiano tenía que recurrir a un tercero que pudiera servir de observador.

“En Colombia, quizá la MOE era la única que podría haber apoyado al Estado en un tipo de acompañamiento al caso venezolano. Se barajó la posibilidad de acompañar y recurrieron a los que más experiencia tienen, pero la MOE finalmente determinó que las condiciones no están dadas, porque no lo están”, señaló Rodríguez.

Gustavo Petro, el primer presidente de izquierda en Colombia, restableció relaciones con Maduro y lo reconoció como el legítimo mandatario y se ha denominado como un mediador entre las partes. También ha abogado porque cesen las sanciones en contra de Venezuela y alentado a que ese país vuelva al sistema interamericano de Derechos Humanos.