Colombia: Congreso actúa tras denuncias de violencia sexual

BOGOTÁ (AP) — El Congreso colombiano anunció el lunes un nuevo protocolo para prevenir y actuar frente a conductas de violencia sexual dentro de la institución tras las denuncias de un exsenador que apuntan a una presunta red de trata que han causado preocupación en el país.

El protocolo de atención a las víctimas incluye la creación de un grupo especializado que atienda sus denuncias, una capacitación obligatoria para los trabajadores del Congreso y una cláusula en sus contratos en la que se comprometan a no ejercer actos de violencia sexual.

“El objetivo final es la denuncia penal y que haya consecuencias, es decir, la condena contra aquellos que hayan incurrido en el delito”, aseguró en una rueda de prensa la senadora María José Pizarro, presidenta de la Comisión Legal para la Equidad de la Mujer del Congreso.

La denuncia pública la hizo el exsenador Gustavo Bolívar el 8 de enero en una entrevista con la Revista Semana. En ella aseguró que antes de renunciar al Senado el 31 de diciembre de 2022 recibió en su despacho varias denuncias de mujeres, algunas de las cuales trabajarían con congresistas.

“Para poderlas esclavizar sexualmente les hacían contratos de dos o tres meses. Es más fácil para que vuelvan a estar con ellos que si los contratos se los hacen por un año. Las mantienen así, con contraticos chiquitos”, aseguró Bolívar sin revelar los nombres de las víctimas ni de los presuntos victimarios.

Luego, en sus redes sociales, aseguró que las víctimas no hacían la denuncia por “miedo al escarnio y a perder sus parejas” y que los presuntos agresores “no cesan su asqueante práctica de someter sexualmente a mujeres por un contrato, tarde o temprano esta verdad verá la luz”.

La Fiscalía abrió una investigación a raíz de las denuncias de Bolívar y lo citó para ampliar sus señalamientos y entregar información sobre los presuntos delitos.

El presidente del Congreso, Roy Barreras, dijo el lunes que hasta el momento no ha llegado al Congreso una denuncia formal de trata o acoso e indicó que cuando suceda alertará a la Fiscalía.

“Nunca hemos recibido una denuncia de trata de personas, que es un delito gravísimo, que significa secuestrar a una persona, quitarle el pasaporte y vendérselo a una mafia... pero hay otros delitos igualmente indignantes como el acoso y el abuso”, aseguró Barreras.

La senadora Pizarro explicó que el nuevo protocolo pretende crear un “espacio seguro”, dado que el Congreso es un “entorno de poder”, para que las víctimas puedan tramitar sus denuncias ante las autoridades.