Dos colegios tradicionales de Olivos se fusionarán para afrontar la crisis económica

El colegio queda sobre la calle Ricardo Gutiérrez 1269, en Olivos
El colegio queda sobre la calle Ricardo Gutiérrez 1269, en Olivos

Es parte de una crisis más grande que se vive a nivel de los colegios privados, donde la inflación, los aumentos, la pérdida del poder adquisitivo de las familias y la falta de subsidios para las escuelas que no reciben aportes del Estado ponen en jaque la viabilidad de los proyectos educativos. Esta vez, los colegios afectados son instituciones que a pesar de recibir aportes del Estado, con los aumentos que se les permite trasladar por ley a las cuotas, no logran cubrir el volumen de dinero que requieren para pagar los salarios.

Hace dos semanas, las familias del colegio parroquial Niño Jesús de Praga, de Olivos, recibieron una carta del colegio, en la que se explicaba que la institución no continuaría más como tal sino que se fusionaría con otro colegio del mismo grupo educativo, porque resultaba imposible continuar ante la baja matriculación que tenían para el año siguiente. La imposibilidad de aumentar la cuota por recibir subvención parcial del Estado, es la otra cara de la crisis de las escuelas. Así como muchas de las que no reciben aportes están a punto de cerrar, y otras escuelas del segmento ABC1, sin aportes, todavía no pudieron cerrar el acuerdo escolar con las familias, por los aumentos excesivos en las cuotas del año siguiente, escuelas cómo las de Olivos y muchas otras, se enfrentan a la dificultad de sostener una propuesta sin la posibilidad legal de aumentar tanto la cuota.

Aunque desde la institución se apuntó que no se trata de un cierre como tal, los padres están convencidos de que sí, ya que uno y otro colegio tienen distintos perfiles, mientras que uno es doble jornada y bilingüe, el otro es jornada simple y con taller de inglés y eso significa una gran diferencia en los valores de las cuotas. Por esa razón, el martes, las familias realizaron un abrazo simbólico a la institución, que se encuentra en Ricardo Gutiérrez 1269. Cientos de personas se congregaron en la puerta y el reclamo se hizo oír en el barrio.

Según cuentan los padres, el 5 de octubre último, las autoridades de este tradicional colegio de la zona, que el año que viene cumpliría 90 años, les comunicaron la decisión de cerrar las puertas de los niveles inicial y del primario de cara al ciclo lectivo 2024 y no descartaron la decisión de avanzar con un cierre gradual del secundario.

El colegio es integrante del Grupo Educativo Jesús en el Huerto de los Olivos, dependiente del Obispado de San Isidro y fue fundado en 1934. Si bien la noticia fue transmitida a la comunidad educativa como un “proceso de integración” con el Instituto Jesús en el Huerto de los Olivos, las familias aseguran que, en los hechos, se trata de “un cierre” dado que las características de uno y otro colegio, aunque integran un mismo grupo, son muy disímiles tanto en su perfil educativo, como en carga horaria y valor de la cuota.

“Desde la Asociación de Colegios Privados de la Provincia de Buenos Aires (Aiepba) y la Junta Nacional de Educación Privada (Junep) venimos advirtiendo esto desde principios de año. Es una realidad que está ocurriendo cada vez en más escuelas. Hay muchas instituciones que cierran cursos o los unifican, intentando seguir adelante. En total, son unas 200 instituciones que estás atravesando problemas económicos muy importantes y no cuentan con subvenciones, y unas 25 que están al borde del cierre, en estado crítico”, explica Martín Zurita, secretario general de Aiepba.

LA NACION intentó ponerse en contacto con los directivos de la institución, que informaron que su comunicación era solo a través de comunicados oficiales enviados a los padres.

Sorpresivo mail

A principios de octubre, las familias del colegio recibieron con sorpresa un correo electrónico: “Queremos comunicarles que, a partir del ciclo lectivo de 2024, el Nivel Inicial y la Escuela Primaria de nuestra Institución Niño Jesús de Praga van a integrarse con el Instituto Jesús en el Huerto de los Olivos para desarrollar un proyecto educativo único, pensando en potenciar lo mejor de los proyectos y crecer juntos, algo que ya forma parte del camino que venimos recorriendo en comunidad”.

La carta –que lleva la firma del director general y representante legal, Alberto Scheinig– señala que el colegio “viene afrontando momentos difíciles desde hace algunos años”, y plantea que “la realidad y las dificultades económicas, tanto institucionales como del país, exigen tomar decisiones en pos de la educación de nuestros alumnos y la sustentabilidad del colegio”.

“En un principio habían informado que la escuela secundaria seguiría pero en una reunión de padres que tuvo lugar el lunes último, el representante legal dijo que no llegaban a cubrir el cupo mínimo de alumnos y alumnas ingresantes a primer año como para poder asegurar la continuidad del nivel medio”, contó una madre a la agencia Telam, durante el abrazo al colegio.

Los padres enfatizan que, a diferencia del colegio Jesús en el Huerto de los Olivos, donde se les propone trasladar a los alumnos, el instituto Niño Jesús de Praga funciona con jornada simple e idioma inglés optativo. Y por tal razón cuestionan la viabilidad de la fusión.

“El cierre del nivel inicial y del nivel primario es ya una decisión tomada, según nos transmitieron, mientras que lo que ponen en duda es la apertura del primer año de secundaria para el ciclo lectivo 2024, con lo cual estarían apuntando a un cierre gradual del nivel secundario”, contó a Telam Mariana Loubet, mamá de un alumno que termina este año la escuela primaria en el Niño Jesús de Praga y que, como tantos otros, tenía previsto continuar la secundaria en el mismo establecimiento.