Colectiva feminista en Chiapas se solidariza con poeta zoque

TUXTLA GUTIÉRREZ, Chis., noviembre 9 (ELUNIVERSAL).- La organización feminista Colectiva 50+1 en Chiapas se solidarizó con la poeta y activista zoque Mikeas Sánchez, quien en las recientes horas denunció amenazas de muerte en su municipio natal Chapultenango.

La escritora de pueblos originarios interpuso por esos hechos una denuncia ministerial y pidió la intervención de las autoridades.

La agrupación 50+1 afirmó en un comunicado que Mikeas es reconocida por su trabajo en la defensa de los recursos naturales y los derechos de las comunidades indígenas.

Expresó preocupación e indignación por la intimidación y amenazas que la artista ha recibido en su tierra natal.

Las personas defensoras de derechos humanos, destacó, realizan un trabajo de la mayor relevancia para el respeto de la dignidad humana, la preservación del estado de derecho y el fortalecimiento de la convivencia pacífica.

El gobierno, afirmó, está obligado a darles las garantías necesarias para que desempeñen su labor en condiciones de seguridad.

Por ello, exhortó a las autoridades competentes a que investiguen de manera exhaustiva para que esos hechos no queden impunes y se apliquen las medidas de protección necesarias a Mikeas Sánchez, y se le accione el mecanismo de protección para personas defensoras de derechos humanos correspondiente.

La poeta zoque relata cómo fue amenazada

Mikeas denunció que el jueves fue amenazada de muerte por un sujeto que ingresó a su local de fotografía en Chapultenango y le dijo que la iba a "quebrar"; "que le pasaría lo que al padrecito" Marcelo Pérez Pérez, asesinado a balazos el 20 de octubre en San Cristóbal.

Ese día, el hombre en aparente estado de ebriedad "y con rasgos de estar drogado" acudió para "amenazarme de muerte; te voy a quebrar, cabrona, eres cabrona, no me tienes miedo, cabrona", le espetó.

La poeta tuvo una relación cercana con el padre Marcelo, de origen tzotzil, en el marco de sus luchas por la defensa del medio ambiente y los derechos humanos.

Mikeas contó que el agresor le advirtió que "no me creyera tanto; hablaba en zoque también y repitió que me miraba fuerte, "pero que él también es fuerte y que no me tiene miedo".

"Que miraba a donde iba y que ve que salgo, que ni creyera que yéndome de aquí (Chapultenango, donde reside) ya estoy libre, que me mira a donde quiera que vaya", detalló.

Mikeas se ha involucrado en movimientos de resistencia y protestas contra la explotación minera y los megaproyectos en municipios de la región norte de Chiapas, donde reside y se ha pronunciado con grupos de mujeres en contra de la violencia que prevalece en varias regiones del estado.