La ciudad china de Shenzhen suaviza el confinamiento por COVID, aunque continúan algunas restricciones

FOTO DE ARCHIVO: Trabajadores médicos con trajes de protección recogen hisopos de los residentes en un complejo residencial en el distrito de Nanshan, tras un brote de coronavirus en Shenzhen

PEKÍN, 5 sep (Reuters) - La ciudad china de Shenzhen abandonó el lunes las restricciones por COVID-19 que afectaron a la mayor parte de la ciudad durante el fin de semana, ya que los nuevos contagios mostraron signos de estabilización en su último brote, mientras que los lugares de ocio y los grandes eventos siguieron prohibidos.

El brote registrado desde finales de agosto hizo que Shenzhen ordenara temporalmente a la mayoría de sus 17,7 millones de habitantes que permanecieran en sus casas durante el fin de semana y los sometiera a dos rondas de pruebas masivas.

El lunes se suavizaron las restricciones para los restaurantes y las visitas a determinados parques, y muchas estaciones de metro reanudaron su funcionamiento, en un esfuerzo por minimizar las interrupciones sin dejar de adherirse a la política de Pekín de 'cero COVID' que pretende contener todos y cada uno de los brotes.

Los ajustes se produjeron después de que el centro tecnológico del sur descubriera un menor número de infecciones entre quienes no habían sido puestos ya en cuarentena. Los últimos datos mostraron 71 nuevos casos locales para el domingo, por debajo de los 89 del día anterior, mientras que la cifra acumulada de alrededor de 500 infecciones desde finales de agosto sigue siendo inferior al total del último gran brote de mediados de marzo.

Sin embargo, Shenzhen sigue en alerta máxima contra las subvariantes de ómicron.

La mayoría de los residentes siguieron sometiéndose a normas más estrictas al entrar en los complejos residenciales, como registros de entrada y controles de las credenciales sanitarias digitales. También continuaron los confinamientos selectivos en algunas zonas consideradas de mayor riesgo.

China se ha aferrado a sus estrictas políticas sobre el COVID incluso cuando la mayoría de los demás países han suavizado las restricciones y han aprendido a convivir con el virus. Este enfoque enturbia cada vez más las perspectivas de la segunda economía del mundo a medida que la variante ómicron, altamente transmisible, se extiende por China, provocando restricciones y cuarentenas.

(Reporte de Roxanne Liu, Sophie Yu y Ryan Woo; edición de Raju Gopalakrishnan, traducido por José Muñoz en la redacción de Gdańsk)