Citando el caso de Parkland, DeSantis quiere poner fin al requisito de votación unánime de los jurados para la pena de muerte

El gobernador Ron DeSantis planteó esta semana la idea de cambiar la ley estatal para permitir que los jurados impongan la pena de muerte sin necesidad de un acuerdo unánime, sugiriendo que tal vez solo sea necesario que ocho de 12 jurados voten a favor.

DeSantis, en su discurso del lunes ante la Asociación de Jefes de Policía de la Florida, expresó su decepción por la cadena perpetua impuesta al asesino de la escuela de Parkland. Tres de los 12 jurados votaron contra de la pena de muerte en ese caso. DeSantis dijo que los veredictos de pena de muerte no deberían ser “vetados” por un jurado y en su lugar sugirió una votación por supermayoría.

“Tal vez ocho de 12 tienen que estar de acuerdo o algo así, pero no podemos estar en una situación en la que una persona puede simplemente descarrilar esto”, dijo DeSantis.

Sus comentarios fueron parte de un debate sobre lo que los legisladores podrían analizar en el próximo período de sesiones legislativas que comienza el 7 de marzo.

Actualmente, Alabama es el único estado que permite veredictos del jurado no unánimes para una sentencia de muerte. Se requiere que al menos 10 de los 12 jurados voten a favor de la pena de muerte, dijo Robert Dunham, director ejecutivo del Death Penalty Information Center.

El requisito de la Florida para el acuerdo unánime sobre la pena de muerte es relativamente reciente. Una sentencia de la Corte Suprema de Estados Unidos de 2016, y una posterior sentencia de la Corte Suprema de la Florida, llevaron al estado a un sistema de jurado unánime. Antes, la Florida solo requería una mayoría, y los jueces tenían la potestad de anular la decisión de un jurado.

La Corte Suprema federal dijo que la sentencia de pena capital de la Florida daba demasiado poder a los jueces sobre los jurados. Tras esa sentencia, los legisladores aprobaron en 2016 un proyecto de ley que exigía una mayoría de 10 a 2 en el jurado para imponer la pena capital. Pero la Corte Suprema del estado dijo que infringía la Constitución estatal porque no era unánime. Al año siguiente, los legisladores aprobaron un proyecto de ley que exigía recomendaciones unánimes de los jurados.

Eso aparentemente puso fin al asunto hasta 2020, cuando la Corte Suprema de la Florida revocó su propia sentencia de cuatro años antes y dijo que la unanimidad no era necesaria. Los jueces escribieron que habían malinterpretado la sentencia anterior de la Corte Suprema federal. El tribunal dijo que un jurado solo tenía que estar de acuerdo unánimemente en que alguien era elegible para la pena de muerte, no en que debía ser condenado a muerte.

Esto dejó la puerta abierta para que los legisladores presenten cambios de nuevo. De momento, no se ha presentado ningún proyecto de ley antes del período de sesiones legislativas de este año.

Líderes legislativos, abiertos al cambio

En un comunicado, la presidenta del Senado, Kathleen Passidomo, dijo que estaba decepcionada con el veredicto de Parkland y que cree que el caso ha sensibilizado a la opinión pública sobre las leyes de pena de muerte.

“Estoy abierta a revisar el requisito del veredicto unánime y espero con interés escuchar las opiniones de mis colegas y electores para entender sus puntos de vista sobre el cambio de las leyes de pena de muerte”, dijo Passidomo.

El presidente de la Cámara de Representantes, Paul Renner, no devolvió el martes las solicitudes de declaraciones. En un podcast de noviembre con City & State Florida, discutiendo el veredicto del tiroteo de Parkland, Renner dijo que la Cámara vería si un enfoque “más matizado” para los casos de pena de muerte es apropiado.

“Creo que sin duda debería ser una votación abrumadora, pero no sé si tiene que ser una votación unánime”, dijo.

Alrededor de 300 personas están en el corredor de la muerte de la Florida. El lunes, DeSantis firmó la orden de ejecución de un hombre de 59 años acusado de un homicidio en 1990. La ejecución, prevista para el 23 de febrero y en la que se usará la inyección letal, será la primera en la Florida desde 2019.

La Florida tiene el mayor número de exoneraciones del corredor de la muerte de todos los estados, con 30 personas que iban a ser ejecutadas y que más tarde se descubrió que habían sido condenadas injustamente, según el Innocence Project, una organización dedicada a luchar contra las condenas erróneas.

De los 24 casos de exoneración de condenados a muerte que examinó el Death Penalty Information Center, en 22 de ellos uno o más jurados votaron a favor de la cadena perpetua.

“En la Florida hemos visto a demasiadas personas enviadas a la pena de muerte que eran inocentes”, dijo el ex senador estatal demócrata Randolph Bracy, quien patrocinó el proyecto de ley del Senado de 2017 para hacer que la pena de muerte fuera unánime. “No debería ser fácil matar a alguien”.

DeSantis: No hay que favorecer a los delincuentes

DeSantis ha hablado antes sobre la idea de hacer cambios en las leyes de pena de muerte de la Florida. En una conferencia de prensa en octubre en los días posteriores a que un jurado recomendara la cadena perpetua para el agresor en la masacre en la secundaria Marjory Stoneman Douglas, DeSantis dijo que el sistema necesita reformas para servir mejor a las víctimas y “no siempre doblegarse para tratar de hacer todo lo que necesitamos a favor de los delincuentes”.

El ex presidente de la Cámara Chris Sprowls, quien patrocinó la versión de la Cámara de Representantes del proyecto de ley de 2017 para hacer que la pena de muerte fuera unánime, dijo que impulsó el proyecto de ley debido a los fallos de la Corte Suprema, diciendo que temía que si la Legislatura no actuaba, algunos acusados con casos pendientes pedirían cadena perpetua alegando que no había pena de muerte válida en el estado.

“Creo que lo que hicimos fue evitar un problema que iba a hacerse mayor”, dijo.

Sprowls, ex fiscal, dijo que el umbral para la pena de muerte lo decidiría el Legislativo. Dijo que la decisión no unánime de un jurado crea un “margen de error” para las personas que logran integrar un jurado pero se niegan a aplicar la pena de muerte, y señaló que la determinación de la pena capital solo ocurre después que los 12 jurados consideren a la persona culpable más allá de toda duda razonable.

Dunham, del Death Penalty Information Center, dijo que los jurados en los casos de pena de muerte en todo el país son en mayor proporción blancos y hombres que la comunidad en general. Dijo que la composición de los jurados en los casos de pena de muerte está sesgada para excluir a las personas que no están de acuerdo con la pena capital por principio, lo que a menudo incluye a las mujeres y a los negros.

Y Dunham dijo que “hay claros problemas en la forma en que la Florida administra su pena de muerte”.

Dijo que la Florida ha erosionado otras protecciones para las personas que enfrentan la pena capital, como la sentencia de la Corte Suprema del estado contra la revisión independiente de los casos de pena de muerte para garantizar que no sean desproporcionadamente duras.

Si la Florida redujera el umbral de la manera sugerida por DeSantis, “se estaría garantizando la ejecución de personas inocentes”, dijo Dunham.