La causa por el atentado a la embajada de Israel no tiene condenados ni detenidos
Se cumplen 31 años del atentado a la embajada de Israel y la causa judicial que investiga el ataque no tiene condenados ni detenidos y prácticamente no tiene movimiento.
En diciembre de 1999, la Corte Suprema dictaminó que el atentado, que provocó la muerte de 29 personas, “fue organizado y llevado adelante por el grupo terrorista denominado Jihad Islámica, brazo armado del Hezbollah”. El caso estuvo siempre en la Corte porque está involucrado un estado extranjero. El máximo tribunal lo mantiene abierto con el objetivo de encontrar y enjuiciar a los culpables del ataque, algo que más de veinte años parece cada vez más difícil.
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En 2015, en uno de los últimos movimientos de peso que tuvo la causa, se ordenaron dos órdenes de captura internacional -se pidió la detención del agente de Hezbollah Hussein Mohamad Ibrahim Suleiman y se reiteró el pedido de captura de José Salman El Reda, también ligado a la organización terrorista-. Ese mismo año Cristina Kirchner le preguntó públicamente a la Corte en qué estaba la investigación. El juez Ricardo Lorenzetti afirmó en ese momento: “La sentencia por la causa de la embajada de Israel [la de 1999] fue consentida por las partes, de manera que nosotros no podemos como tribunal modificar lo que ya ha sido aceptado y es cosa juzgada”.
Eso generó una duda: ¿estaba diciendo que la causa estaba cerrada? La Corte aclaró que no, que no estaba cerrada pero que ya no se volverá atrás sobre lo que el tribunal consideró acreditado: que fue Jihad Islámica la que cometió el atentado.
“Está probada la materialidad de los hechos -cómo ocurrió el atentado- y también señalada la responsabilidad penal de sus autores. [...] Ambas circunstancias (pilares de la investigación) han sido consentidas por las partes, y sobre esa base firme se continúa con la pertinente investigación, para lo cual se ha solicitado la necesaria colaboración internacional”, sostenía el documento que dio a conocer entonces la Corte.
En su fallo de 1999, el máximo tribunal responsabilizó a la Jihad Islámica por el atentado y afirmó que ese ataque se produjo como consecuencia de la detonación de una cantidad importante de explosivos ubicados en la parte posterior de una camioneta Ford F-100, que ocurrió fuera del edificio de la delegación diplomática.
El tribunal concluyó en aquel fallo que los elementos reunidos en el expediente “proporcionan un grado de certidumbre que permitiría afirmar en el marco de esta resolución que el atentado cometido contra la embajada de Israel en la Argentina fue organizado y llevado a cabo por el grupo terrorista Jihad Islámica, brazo armado del Hezbollah”.
En un documento firmado en 2015 por el entonces secretario de la Corte Esteban Canevari, que estaba a cargo de la causa, se indicó que el tribunal “tuvo por probado que el hecho fue causado por la explosión de una carga de pentrita y trinitrotolueno que había sido acondicionada en la parte posterior derecha del interior de una camioneta Ford F- 100″.
El documento de la Corte atribuyó responsabilidades a Abbas Musawi, secretario del Hezbollah, e Imad Mughniyah, quien dirigía el aparato de seguridad central y exterior del Hezbollah y era el responsable de la Jihad Islámica. “Mughniyah habría fallecido el 12 de febrero de 2008 en un atentado en Damasco, por el estallido de un coche bomba”, consignó el documento.
El tribunal también detectó “vínculos entre el Hezbollah y personas sospechosas que desarrollaban actividades supuestamente comerciales en la zona conocida como Triple Frontera, entre otros Samuel Salman El Reda”. La Corte “libró una orden de captura contra José Salman El Reda”, que no se concretó. “En junio de 2001 se detuvo en el Reino de Jordania a Hussein Mohamad Ibrahim Suleiman, agente operativo del Hezbollah, quien habría relatado que en 1991 viajó a San Pablo y que a principios de 1992, en Foz de Iguazú, recibió explosivos que transportó a la Argentina en ómnibus -disimulados en cajas de alimentos-, que más tarde fueron utilizados para el atentado contra la embajada de Israel”, abundó. La Corte recordó que el 20 de diciembre de 2006 se reiteraron las órdenes de captura internacional de Imad Mughniyah y José Salman El Reda.