Cargamento de condensado iraní llega a Venezuela: datos de monitoreo

FOTO ARCHIVO: Un petrolero atraca mientras bombea petróleo en la terminal de barcos del complejo industrial José Antonio Anzoátegui de PDVSA en el estado de Anzoátegui.

Por Marianna Parraga

16 feb (Reuters) - Un cargamento de 2,1 millones de barriles de condensado iraní, utilizado por la estatal petrolera venezolana PDVSA para diluir su petróleo extrapesado y producir crudo de exportación, llegó a aguas de la nación sudamericana esta semana, según mostraron datos de seguimiento y un documento de la empresa.

Venezuela e Irán, sancionados por Estados Unidos, acordaron el año pasado un contrato para intercambiar condensado iraní, una forma muy ligera de petróleo, por crudo pesado venezolano, un pacto que ha demostrado ser clave para sostener la producción y las exportaciones de PDVSA.

El cargamento más reciente del acuerdo de intercambio, a bordo del supertanquero (VLCC, por su sigla en inglés) de bandera iraní Dan, operado por la estatal National Iranian Tanker Company (NITC), ingresó el martes al fondeadero del terminal venezolano de Jose, según TankerTrackers.com.

El transmisor del barco permanece fuera de línea desde principios de enero, cuando el tanquero cruzaba el Golfo de Omán transportando un cargamento de petróleo, según los datos de seguimiento de barcos de Refinitiv Eikon.

Dan es el segundo barco iraní en descargar este año en Venezuela, luego de la llegada del VLCC Starla en enero, también propiedad y operado por NITC.

Está previsto que Dan comience a descargar el 22 de febrero en Jose después de que el Starla termine de descargar una segunda parcela de condensado, según un cronograma de PDVSA visto por Reuters.

PDVSA y la Compañía Nacional de Petróleo de Irán (NIOC), la empresa matriz de NITC, no respondieron de inmediato a solicitudes de comentarios.

La petrolera venezolana enfrenta demoras para descargar importaciones petroleras y despachar embarques de crudo de exportación debido a la falta de capacidad de almacenamiento, por lo que se ha visto obligada a recurrir al almacenaje flotante, además de tener problemas de calidad con algunos de sus principales variedades de exportación.

(Reporte de Marianna Párraga en Houston.)