Caos en reapertura de la Plaza de Toros México

CIUDAD DE MÉXICO, enero 29 (EL UNIVERSAL).- Lo que pintaba para ser un domingo de fiesta en la Monumental Plaza de Toros México, se convirtió en una tarde llena de caos, en la que brillaron el desconcierto y la violencia entre grupos antitaurinos y aficionados a la Fiesta Brava.

Durante más de dos horas, familias completas fueron testigos de la falta de empatía entre los grupos participantes, lo que provocó enfrentamientos en varios momentos de la jornada y en diversos sitios cercanos al coso.

El llamado a realizar una protesta pacífica por parte de organizaciones que trabajan en contra del maltrato animal quedó en el olvido minutos después de arribar al sitio que volvió a abrir sus puertas.

Bajo el lema de "¡Esa plaza se va a caer!", cerca de 500 personas -que desde el mediodía recorrieron la avenida Insurgentes Sur- mostraron su descontento por la apertura del coso más grande del mundo, tras 623 días cerrado.

El momento de tensión máxima se presentó cuando un grupo de personas encapuchadas empezó a protagonizar enfrentamientos con la policía y algunos fanáticos.

Con piedras, botellas y barretas, el grupo más radical de los manifestantes destrozó parte de la fachada y el acceso principal, generando la reacción de los efectivos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, que resistieron y bloquearon la posibilidad de un portazo.

Con el paso de los minutos -y el aumento de la policía- los ánimos fueron controlados, retirando a los manifestantes, quienes confrontaron y agredieron a más personas.

Tras varios minutos y ya con mayor control policial, el grupo terminó por dispersarse, mientras la corrida de reapertura se llevó a cabo en La México.