Bosnia declara el estado de emergencia tras unas inundaciones que dejan al menos 21 muertos
Una catástrofe natural ha golpeado Bosnia y Herzegovina, dejando un rastro de destrucción y pérdidas humanas. Las fuertes lluvias han desencadenado inundaciones y deslizamientos de tierra que han cobrado al menos 21 vidas confirmadas a las 11:20 del sábado 5 de octubre, provocando que el Gobierno bosnio declare el estado de emergencia. Esta crisis ha afectado principalmente a las regiones central y sur del país, sumiendo a la nación en una situación de emergencia sin precedentes.
La tragedia se desarrolló con rapidez cuando una tormenta severa azotó la región durante la noche. Los residentes se despertaron con el agua inundando sus hogares, encontrándose atrapados y en grave peligro. Ante esta situación crítica, el Gobierno bosnio ha actuado con celeridad y determinación.
El viceprimer ministro Vojin Mijatović ha tomado la iniciativa, anunciando la formación de un equipo de crisis dedicado a coordinar los esfuerzos de rescate y ayuda. En un movimiento decisivo, se han asignado 10 millones de euros para el alivio inmediato de los efectos del desastre. Esta suma se destinará a proporcionar asistencia urgente a las zonas más afectadas y a las familias que lo han perdido todo.
Además, el Gobierno ha movilizado al Ejército para asistir en las cruciales tareas de rescate. Mijatović ha enfatizado que todas las empresas públicas y federales están siendo movilizadas para ayudar en las áreas afectadas, demostrando un esfuerzo coordinado a nivel nacional para hacer frente a esta crisis.
Testimonios desgarradores tras las inundaciones y corrimientos de tierra
El rostro humano de esta tragedia se refleja en testimonios como el de Josip Kalem, residente de Fojnica, una de las ciudades más afectadas por las inundaciones. Kalem compartió su experiencia aterradora:
"El ladrido desesperado de mi perro me despertó alrededor de las 4 de la mañana. Cuando bajé las escaleras, ya era demasiado tarde para escapar; no podíamos salir de la casa. Ante nuestros ojos, el agua inundó rápidamente el garaje, el sótano y arrastró mi coche. En cuestión de minutos, la corriente se llevó todas nuestras pertenencias e incluso a nuestro querido perro, arrastrándolo corriente abajo".
Este relato conmovedor ilustra la velocidad y la brutalidad con la que las inundaciones atacaron, dejando a los residentes sin tiempo para reaccionar o salvaguardar sus vidas y propiedades.
Búsqueda y rescate continuo
Las autoridades locales y los servicios de rescate están trabajando incansablemente en condiciones extremadamente difíciles. La situación se complica por el hecho de que varias personas siguen desaparecidas, lo que ha llevado a un llamado urgente a voluntarios para asistir en las labores de rescate.
La infraestructura de la región se ha visto gravemente afectada, con numerosas carreteras cerradas y extensas áreas sin electricidad. Esto ha dificultado enormemente los esfuerzos de rescate y la distribución de ayuda a las zonas más necesitadas.
El ministro de Defensa, Zukan Helez, ha declarado que la prioridad absoluta es salvar a las personas que aún están vivas y atrapadas en casas afectadas por deslizamientos de tierra. En una entrevista con N1, una televisión regional, Helez expresó su preocupación: "Hora tras hora recibimos noticias sobre nuevas víctimas. Nuestra primera prioridad es salvar a las personas que están vivas y enterradas en casas donde se han producido deslizamientos de tierra."
Impacto en las elecciones municipales
Las devastadoras inundaciones han puesto en duda la celebración de las elecciones municipales programadas para el domingo en todo el país. Esta situación sin precedentes ha obligado a las autoridades electorales a reconsiderar la viabilidad de llevar a cabo los comicios en medio de una crisis humanitaria.
Irena Hadžiabdić, presidenta de la Comisión Electoral Central, ha anunciado que se está considerando seriamente posponer las elecciones. La comisión está en discusiones intensas con las comisiones electorales locales en las áreas más afectadas para evaluar la situación y tomar una decisión informada. Hadžiabdić ha indicado que se espera una decisión final para el sábado, dejando en suspenso un proceso democrático crucial para el país.
Afectaciones en países vecinos
La tormenta que ha devastado Bosnia no ha respetado fronteras. Países vecinos como Croacia, Eslovenia y Montenegro también están lidiando con los efectos de las fuertes lluvias y vientos.
En Croacia, la capital Zagreb se prepara para posibles desbordamientos del río Sava, mientras que varias carreteras importantes han sido cerradas por precaución. Las autoridades están en alerta máxima, monitoreando de cerca los niveles de los ríos y preparándose para posibles evacuaciones.
Eslovenia reporta inundaciones en varias casas, especialmente en la aldea central de Kot. La agencia meteorológica nacional ARSAO ha emitido advertencias sobre el peligro inminente de deslizamientos de tierra, instando a la población a mantenerse alerta y seguir las instrucciones de las autoridades.
En Montenegro, la situación es igualmente preocupante, con pueblos aislados debido a las inundaciones y numerosas carreteras y hogares sumergidos bajo las aguas. Las autoridades montenegrinas están trabajando arduamente para restablecer las comunicaciones y proporcionar ayuda a las comunidades afectadas.