El angustiante sangrado nasal de una joven salva su vida y la de sus padres
Un sangrado en la nariz es por lo general molesto, irritante. Incluso puede llegar a ser signo de problemas mayores. Pero también puede ser una alerta que permite actuar a tiempo y salvar vidas.
De ello pueden testificar la joven Crystal Enns y su familia, que viven en la pequeña ciudad de Wylie, Texas, al noreste de Dallas.
De acuerdo al relato de la televisora local CBS 11, cuando Crystal tenía 14 años, ella comenzó a tener continuos sangrados nasales y sus padres decidieron llevarla ante un médico. Temían que la sangre fuera síntoma o aviso de algo mayor.
Y ciertamente lo fue, mucho más de lo que podrían haber imaginado entonces, aunque de modo diferente y por razones insospechadas.
Todo se desató en cadena. En 2013, los médicos le diagnosticaron a Crystal una rara enfermedad del riñón y le indicaron que era necesario hacerle un trasplante. En tanto, ella fue sometida a diálisis mientras se buscaba y definía a un posible donante, según relató la televisora ABC.
En realidad, indicaron los médicos de la joven, el sangrado nasal no tenía relación con el problema renal de Crystal, pero los exámenes que se le hicieron a la chica cuando acudió a revisarse detectaron el problema de su riñón.
Pero las cosas no terminaron allí. Los padres de la joven se ofrecieron de inmediato como posibles donantes para su hija. Chisty, la madre, fue la primera en hacerse los exámenes de compatibilidad y avanzó hasta las últimas fases del proceso para salvar a su hija. Pero al final, relata la CBS 11, se detectó un punto extraño en su riñón y la madre tuvo que ser descartada como candidata.
El papá de la chica, Mark, se sometió entonces a prueba. Lo extraordinario y estremecedor fue que, tras los exámenes, se determinó que ambos padres de la joven padecían cáncer en el riñón. Así, no solo no eran susceptibles de donar el órgano que necesitaba su hija, sino que enfrentaban ellos mismos una enfermedad potencialmente letal.
Hija, madre y padre, es de suponer, atravesaron entonces por momentos de angustia. El médico que diagnosticó a ambos indicó a ABC que no había visto en 25 años una coincidencia tan notoria: dos esposos con el mismo tipo de cáncer de modo simultáneo y, además, con una hija también sufriendo de otro padecimiento de riñón.
Pero, nuevamente, la suerte les sonrió. El sangrado nasal de Crystal no solo permitió detectar su necesidad de trasplante a tiempo sino que también hizo posible un diagnóstico temprano del cáncer de sus padres. Al estar ambos casos de cáncer en una fase temprana, los dos pudieron ser tratados eficazmente con cirugía y sin quimioterapia, de acuerdo a la CBS11 y ABC. Ambos están, ahora, sanos y libres de la enfermedad.
Al final, la tía materna de Crystal resultó también compatible y le donó un riñón en abril pasado. Así, tras muchos meses de padecimiento, angustias y tratamientos las rudas circunstancias de la familia Enn finalmente habrían concluido de modo feliz.
Hoy Crystal tiene 17 años y comenzará su último año de secundaria. Ella canta en un coro y tiene talento musical y la vida por delante. Para ella y su familia unas gotas de sangre fueron un mensaje providencial.