Bill Belichick y fin de una era en los New England Patriots y en toda la NFL

La salida de Bill Belichick como entrenador en jefe de los New England Patriots no sólo significó el fin de la etapa más dominante de un equipo, sino también el fin de una era en la NFL.

Durante prácticamente dos décadas, Belichick fue el arquitecto de una dinastía que consiguió seis títulos en 19 años, y todo lo hizo a su manera, o al menos a lo que se instauró como la manera de los Patriotas, el “Patriot Way”.

Una dinastía sin igual

Cuando Belichick llegó a New England, los Patriots sumaban dos viajes al Super Bowl, ambos descalabros, y no figuraban entre las franquicias más destacadas de la NFL. Estos cinco aspectos son la razón por la que el éxito del equipo de Foxborough no se repetirá.

1.El ‘Patriot Way’ tiene caducidad

Belichick siempre manejó al equipo con un estilo despiadado y sin pedir disculpas a nadie, pero eso sí, con la mira puesta en lo que sería mejor para el equipo. Los mantras de”haz tu trabajo” y “es lo que es” se convirtieron en algo común en New England, y sin duda sirvieron para que cada jugador alcanzara su potencial, y aunque era un estilo duro, sus jugadores lo defendieron.

Ya sea con regaños públicos a Tom Brady, uno de los mejores quarterbacks de todos los tiempos, o movimientos de personal que vieron a los Patriots decirle adiós a jugadores emblemáticos como Lawyer Milloy, Ty Law, Wes Welker y Richard Seymour, entre otros, la atmósfera en New England siempre era de exigencia y responsabilidad total, donde un hombre dirigía el show.

Cada vez más equipos adoptan una visión más amigable para los jugadores, por lo que el atractivo de ir a un entorno como de los Patriots se fue perdiendo. Los jugadores tienen cada vez más peso en la toma de decisiones de personal, basta con ver a Aaron Rodgers y Nathaniel Hackett.

2. Longevidad como ninguna otra dinastía

Sin importar la era, ganar en la NFL es difícil. Y sostener un índice de victorias como lo hicieron los Patriots, entre el 2001 y 2019 es algo que no se vio antes y difícilmente sucederá nuevamente.

Los Green Bay Packers de Vince Lombardi ganaron cinco títulos, pero todos entre 1961 y 1967, año en que el entrenador dejó al equipo de Wisconsin. Los Pittsburgh Steelers ganaron 4 títulos en 6 años, pero luego esperaron más de 20 para el siguiente. Los San Francisco 49ers se coronaron cinco veces entre 1981 y 1994, pero el para el último título coach, quarterback y prácticamente toda la estructura de la franquicia había sido reorganizada.

Belichick, cuarto head coach más longevo en la historia de la NFL, y los Pats lo hicieron todo con un mismo quarterback (Tom Brady), y una misma estructura. Para ponerlo en perspectiva, los Kansas City Chiefs tendrían que mantenerse en la cima de la conferencia y conseguir cuatro títulos de Super Bowl más en los próximos 14 años para alcanzar un dominio similar.

3. La era del tope salarial es cada vez más competitiva

El tope salarial y la agencia libre fueron instaurados para dar un mayor balance a la NFL… y en general lo consiguieron. New England logró imponerse por tanto tiempo a estas restricciones en parte por el estilo de operación de la organización, el coacheo de Belichick y su staff, y también a que Tom Brady nunca firmó contratos que maniataron al equipo para rodearlo de talento.

Los quarterbacks ahora suelen firmar contratos que reducen la capacidad de una franquicia para rodearlos con el talento necesario. Eso y que con la agencia libre los mejores jugadores tienen la opción de conseguir contratos lucrativos donde sea disminuye la posibilidad de una fórmula ganadora estable.

4. Relaciones coach-quarterback

Irónicamente, la relación Brady-Belichick ha llevado a muchos equipos a “casar” el destino de su quarterback y head coach y llevarlos de la mano. En realidad, la relación duradera en New England pareció deberse más al espíritu competitivo de ambos que a una especie de relación forzada.

Mientras que ahora se puede ver a quarterbacks quejarse de coordinadores o entrenadores, ese ruido nunca se escuchó en New England, a pesar del constante cambio de coordinadores ofensivos. Brady dirigía dentro del campo, pero la autoridad de Belichick no se discutía, aún cuando era en contra del propio quarterback.

5. ¿Antipatía o enfoque calculado?

A pesar de los buenos resultados, la relación entre Belichick y los medios de comunicación nunca fue armoniosa. Las respuestas monosilábicas y recurrentes del coach de New England difícilmente serían toleradas en otro entorno.

En el vestidor, los nuevos entrenadores suelen tener relaciones más cercanas con sus jugadores, algo que Belichick no dejaría reflejar en las cámaras. No es que no tenga relaciones cercanas, pero si se trata del deporte, siempre lo hizo parecer una relación profesional, poco emotiva y basada en lo mejor para el equipo.

¿Qué viene para Patriots y Belichick?

Los Patriots actuaron rápidamente y promovieron a Jerod Mayo al puesto de head coach. Mayo fue linebacker con los Pats y estuvo bajo el mando de Belichick, así que la organización apuesta por un sistema similar.

Por su parte, Belichick al parecer querría seguir entrenando. Está a 14 triunfos del récord histórico de Don Shula, pero a sus 71 años sería el coach más longevo en llegar a un equipo nuevo (Bruce Arians tiene esa distinción, con 66 años de edad).

Quizás un equipo que tenga un plantel competitivo y considere que solo necesita dirección estaría interesado. Los Atlanta Falcons y Los Angeles Chargers han sido mencionados como opciones extraoficialmente, mientras que su cercanía con la capital estadounidense lo convierte también en una opción interesante para los Washington Commanders.

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