El BCE no puede limitarse a reflejar los movimientos de la Fed, dice Lagarde
FRÁNCFORT, 3 nov (Reuters) -El Banco Central Europeo debe estar atento a las decisiones monetarias de la Reserva Federal de Estados Unidos, que influyen en los mercados globales, pero no puede limitarse a reflejar sus movimientos, dijo el jueves la presidenta del BCE, Christine Lagarde, después de que la Fed apuntara más subidas de tipos.
La Reserva Federal subió su principal tipo de interés en otros 75 puntos básicos el miércoles y su presidente, Jerome Powell, dijo que la lucha contra la inflación requerirá que los costes de los préstamos suban "más de lo que se esperaba", lo que llevó a los inversores a valorar también más subidas del BCE.
Pero Lagarde dijo que el BCE, que subió los tipos de interés en 75 puntos básicos la semana pasada, no puede limitarse a imitar a la Reserva Federal porque las condiciones económicas son diferentes en los 19 países de la zona del euro, un punto que también subrayaron Fabio Panetta, miembro del consejo del BCE, e Ignazio Visco, gobernador del Banco de Italia.
"Tenemos que estar atentos a los posibles efectos de contagio", dijo Lagarde en una conferencia en Riga. "No somos iguales y no podemos progresar al mismo ritmo, (ni) con el mismo diagnóstico de nuestras economías".
Lagarde admitió que el BCE está "influenciado por las consecuencias" de la acción de la Fed a través de los mercados financieros y, especialmente, del tipo de cambio del euro, que caía el jueves frente al dólar.
"Está claro que el tipo de cambio importa y tiene que ser tenido en cuenta en nuestras proyecciones de inflación", dijo Lagarde, repitiendo su compromiso de reducir la inflación hasta el objetivo del 2% del BCE.
En su propio discurso, Panetta dijo que la zona del euro es más vulnerable que Estados Unidos a una desaceleración económica mundial y a la subida de los precios de la energía y que el propio endurecimiento de la Fed ya está pasando factura, por lo que el BCE debe ser prudente.
En concreto, argumentó que el BCE debería evitar subir los tipos de interés con demasiada rapidez, porque eso podría perjudicar excesivamente el crecimiento económico, los precios de la vivienda y los mercados financieros.
"Si estas subidas mayores de lo previsto se interpretan como una señal de un tipo terminal más alto, en lugar de simplemente adelantar la normalización, podríamos tener un impacto más fuerte de lo previsto en las condiciones de financiación y, en última instancia, en la actividad económica", dijo Panetta en un evento del BCE.
El gobernador del Banco de Italia, Ignazio Visco, también dijo el jueves que no hay que esperar que el BCE reaccione de la misma manera que la Fed, respaldando las expectativas del mercado de que los tipos sean más bajos en la zona euro que en Estados Unidos.
Su par portugués, Mario Centeno, fue aún más lejos al afirmar que el BCE ya ha completado gran parte de las subidas de tipos que considera necesarias, tras 200 puntos básicos de aumento desde julio, que han dejado el tipo de interés de depósito en el 1,5%.
Sin embargo, otros miembros del consejo de gobierno del BCE siguen adoptando una postura más agresiva.
Junto a Lagarde, el gobernador del banco central de Letonia, Martins Kazaks, dijo que los tipos deben subir "mucho más" y que no hay necesidad de pausar las subidas a finales de año.
El presidente del Bundesbank alemán, Joachim Nagel, también dijo que el BCE no debería abstenerse de seguir subiendo los tipos.
Los costes de endeudamiento de las empresas y los consumidores de la zona del euro han empezado a subir desde sus niveles mínimos.
El tipo de interés que los bancos exigen a las empresas subió 55 puntos básicos en septiembre, el mayor incremento mensual desde la creación del euro, hasta situarse en el 2,41%, mostraron el jueves los datos del BCE. Fue el más alto desde 2015.
(Información de Francesco Canepa y Balazs Koranyi; editado en español por Benjamín Mejías Valencia)