Bayer Leverkusen y la temporada de ensueño para olvidar los 120 años de pobreza deportiva del club

Pocos equipos tienen una historia tan larga, y con tan pocos títulos como el Bayer Leverkusen. Este año, el Leverkusen busca cambiarlo todo, y la escuadra dirigida por Xabi Alonso está a punto de conseguir un triplete que pocos, si acaso alguien, veían posible al inicio de esta temporada.

Pero no solo eso. El equipo de la farmacéutica amenaza también con convertirse en el primer campeón invicto en la historia de la Bundesliga. Si Die Werkself navega los últimos seis partidos de Liga sin sufrir un descalabro, conseguirán algo que ni el Bayern Munich ha conseguido en su laureada historia.

Una temporada venida de la oscuridad

El no tan cariñosamente apodado “Neverkusen” podría coronarse este fin de semana en la Bundesliga cuando reciban al Werder Bremen en la BayArena. Un triunfo en sus últimos seis partidos aseguraría la primera Bundesliga en los 120 años de historia del club que además estableció la marca de más juegos invicto en Alemania en febrero, racha que ahora ha alcanzado los 42 partidos, 28 de ellos en la presente campaña.

Además, el club tomó ventaja sobre el West Ham en la UEFA Europa League, certamen que han ganado en una ocasión y al que lucen como un serio candidato. En la Copa Alemana, la DFB Pokal, disputarán la Final ante el Kaiserslautern, de la Bundesliga 2.

Sin embargo, en agosto nada apuntaba al éxito del club en la presente campaña. El Bayer Leverkusen venía de terminar en el sexto puesto en la temporada 2022-2023 y aunque un año antes habían ocupado el tercer lugar, lo hicieron a 13 unidades del Bayern.

Xabi Alonso, figura clave para el Bayer Leverkusen

Dentro de los aspectos más curiosos en el surgimiento del Leverkusen está la presencia de Xabi Alonso en el banquillo. El español, un ganador probado como jugador con títulos del Mundial, la Champions League, La Liga y la Bundesliga, apenas está en su primera temporada completa como director técnico de un equipo de Primera División.

Alonso ha sorprendido a propios y extraños, al grado de ser mencionado como candidato para integrarse a clubes como el Liverpool, Bayern Munich y Barcelona, aunque ha confirmado que seguirá en Renania del Norte-Westfalia.

El español ha instaurado un sistema de posesión del balón y pases cortos que podría compararse vagamente con el PSG o Barcelona. Ese estilo ha ayudado al club rojinegro a ser el segundo más goleador de Alemania, con 69 tantos hasta el momento.

Pero el sello del Bayer Leverkusen es que además de mantener la posesión del balón, conservan el orden defensivo en todo momento. Esta evolución del estilo futbolístico es quizás el mayor acierto del producto de la Real Sociedad. Alonso y su cuerpo de entrenadores ajustan las asignaciones defensivas cada semana, dependiendo del rival.

Mezcla entre experiencia y juventud

Similar a otros clubes alemanes no llamados Bayern Munich, el equipo de la farmacéutica se mantiene a flote produciendo jugadores y buscando financiar futuras generaciones con la venta de sus mayores talentos. Por ejemplo, Moussa Diaby, goleador del año pasado, salió al Aston Villa, por ejemplo.

Pero hay algo del proyecto que ha llamado la atención también a veteranos. Futbolistas como Victor Okoh Boniface y Florian Wirtz son figuras jóvenes que han dado el salto en el Leverkusen. El argentino Exequiel Palacios llegó en 2020, a los 22 años de edad, procedente de River Plate, y sigue siendo parte de la base del equipo.

A diferencia de otros años, hay veteranos que se han integrado al proyecto del club. Granit Xhaka dejó al Arsenal para incorporarse al equipo de la farmacéutica. Nathan Tella llegó procedente del Southampton. Alejandro Grimaldo se integró procedente del Benfica. Todos se integraron el verano pasado.

Los fantasmas aún sobrevuelan la BayArena

Habrá que perdonar a los aficionados del Leverkusen si aún no se sienten con la confianza de cantar el título a los cuatro vientos. El club ha sido históricamente reconocido por la tragedia deportiva, con cinco subcampeonatos desde 1979 y el fantasma del 2002 aún fresco en la mente de los aficionados.

Una especie de maldición del Río Rin al estilo del Atlas en México o los Boston Red Sox o Chicago Cubs en el beisbol de las Grandes Ligas. Sin duda, el 2002 sigue siendo la memoria más dolorosa para Die Werkself.

En ese año, perdieron el título de la Bundesliga en la última jornada, cayeron en la Final de la DFB Pokal y también sucumbieron ante el Real Madrid en la Final de la UEFA Champions League. Las condiciones parecen más favorables en esta ocasión y con ello, quizás, el club pueda enterrar sus fantasmas para siempre.

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