Bardella trata de movilizar invocando el peligro de una victoria de la extrema izquierda

París, 14 jun (EFE).- El candidato a primer ministro por la extrema derecha en las legislativa en Francia, Jordan Bardella, desplegó este viernes su estrategia para intentar ampliar su base electoral insistiendo en la posibilidad de que la "extrema izquierda" se haga con el poder.

"Soy el único capaz de parar a Jean-Luc Mélenchon y a la extrema izquierda. De forma que todas las fuerzas republicanas del país se tienen que unir para evitar el peligro de que la extrema izquierda gane estas elecciones legislativas", declaró Bardella en una entrevista al canal BFMTV.

Se refería al acuerdo alcanzado por La Francia Insumisa (LFI) de Jean-Luc Mélenchon, el Partido Socialista (PS), los Ecologistas y el Partido Comunista (PCF), que han constituido un denominado Frente Popular que presentará listas conjuntas en las 577 circunscripciones del país en los comicios del 30 de junio y el 7 de julio.

Bardella (28 años) insistió en que si ese Frente Popular gana, el Gobierno que formaría estaría dominado por Mélenchon y por LFI a los que reprocha no respetar los principios del laicismo, defender reivindicaciones de fundamentalistas islámicos, negarse a calificar Hamás de organización terrorista, insultar a la policía o "pisotear" a las empresas y a los agricultores.

En esa misma línea, avisó de que si llegan al poder, Francia estaría "en 48 horas bajo la tutela del Fondo Monetario Internacional", teniendo en cuenta su programa económico.

A ese respecto, el candidato a primer ministro y presidente de la Agrupación Nacional (RN, el partido de Marine Le Pen), aseguró que si él llega al Gobierno, en el terreno económico será "realista", entre otras cosas porque dice que el Ejecutivo saliente del presidente Emmanuel Macron, le va a dejar una herencia peor que la que presentan las cifras oficiales de la deuda y del déficit.

Por eso no se ha querido comprometer con la que fue en el pasado una de sus promesas de campaña, la anulación de la reforma de pensiones de Macron, que va a retrasar la edad mínima de jubilación de 62 a 64 años.

En cualquier caso, dijo que sí que haría correcciones para que las personas que han empezado a trabajar antes de los 20 años y han cotizado al menos 40 años puedan jubilarse a los 60.

Sobre su polémico acuerdo con el presidente de Los Republicanos (LR), Éric Ciotti, que el grueso de los dirigentes de este partido de la derecha clásica han considerado una traición, avanzó que se va a concretar en la investidura de "un candidato común" en 70 circunscripciones.

"Quiero constituir la mayoría más amplia posible para la recuperación del país" y evitar el "peligro" de la "coalición de extrema izquierda" que es una opción "creíble" a la vista de los sondeos, subrayó.

Bardella reiteró que si llega al Gobierno hará "una prioridad de la inmigración y del control de (las) fronteras" con un proyecto de ley que presentará en unas semanas para facilitar las expulsiones de inmigrantes ilegales y poner fin al derecho del suelo.

Es decir, que un niño nacido en Francia de padres extranjeros no se convertirá automáticamente en francés a la mayoría de edad.

Otra de sus prioridades será la seguridad, y sobre eso también tiene intención de preparar en unas semanas un proyecto de ley para restablecer las penas mínimas para los reincidentes, suprimir las ayudas familiares a los padres de menores delincuentes reincidentes o impedir que los delincuentes con muchos antecedentes puedan beneficiarse de viviendas sociales.

Las primeras encuestas realizadas tras la convocatoria anticipada de elecciones legislativas presentan un panorama en el que el bloque de la RN acabaría en primera posición en la primera vuelta con al menos el 31 % de los votos, seguido de cerca por el Frente Popular (algo menos del 30 %) y muy detrás la actual mayoría de Macron con menos del 20 %.

(c) Agencia EFE