Aumento del nivel del agua y floraciones de algas en el Lago Okeechobee crean preocupación

Es verano en la Florida y eso significa días más largos y calurosos, inundaciones casi diarias y floraciones de algas.

Ocurren todos los años en muchas de las vías fluviales del estado, pero las recientes condiciones en el Lago Okeechobee, el mayor y más importante de la Florida, tienen preocupados a algunos activistas de que esta temporada pueda traer más floraciones perjudiciales.

“Cada vez que tenemos un lago elevado en la estación húmeda y tenemos la presencia de algas verdeazul es motivo de preocupación”, dijo Chris Wittman, cofundador de Captains for Clean Water. “Pero hay tantas variables que es difícil pronosticar lo que vamos a ver”.

El Lago Okeechobee tiene una capacidad limitada. Parte del agua se escurre hacia el sur, donde es absorbida por agricultores sedientos y ayuda a nutrir los Everglades, pero la principal forma de drenar el lago es a través de las descargas hacia el este y el oeste a través de los ríos St. Lucie y Caloosahatchee.

En la actualidad, el Lago Okeechobee tiene una elevación de 14.09 pies, unos dos pies más de lo que el Cuerpo de Ingenieros del Ejército, encargado de su mantenimiento, prefiere que esté en junio. Las lluvias torrenciales de los últimos días, sumadas a lo que dejaron los huracanes Ian y Nicole del año pasado, han elevado el nivel del lago más de lo habitual. El año pasado por estas fechas, el lago estaba unas 15 pulgadas más bajo.

También está bastante sucio. El lago está repleto de nutrientes procedentes de granjas, fosas sépticas y alcantarillas con fugas y otros nutrientes que forman el alimento perfecto para las algas. Y las lluvias frescas arrastran aún más fertilizantes y desechos humanos, lo que hace que las floraciones sean aún más probables.

Por desgracia para la Florida, las épocas más lluviosas del año, cuando los niveles de los lagos son más altos y los vertidos son más frecuentes, son también las épocas en que se forman las floraciones de algas. Y las algas del lago no siempre son inofensivas. En altas concentraciones, pueden ser tóxicas para el ser humano.

Si el agua cubierta de algas del lago se envía al oeste y al este en volúmenes lo suficientemente altos, puede multiplicarse, obstruyendo puertos deportivos y ríos con materia orgánica espesa y verde. En 2016, y de nuevo en 2018, esas floraciones de algas fueron devastadoras para la economía de la costa de la Florida.

Una floración de algas verde azuladas ensució el agua en el Pahokee Marine en el lago Okeechobee, el 2 de junio de 2023.
Una floración de algas verde azuladas ensució el agua en el Pahokee Marine en el lago Okeechobee, el 2 de junio de 2023.

Floración en la mitad del lago

Hasta el miércoles, los satélites de la NOAA midieron alrededor de 380 millas cuadradas de floración de algas, un poco menos de la mitad de la superficie total del lago.

Las pruebas más recientes del Departamento de Protección Medioambiental de la Florida detectaron un potencial de floración de moderado a alto en cerca de 70% del lago, y las autoridades estatales encontraron un número de muestras de algas ligeramente superior al habitual para principios de junio.

De los 55 puntos muestreados la semana pasada, 38 contenían floraciones de algas. Algunas de ellas también contenían floraciones de algas nocivas y un puñado contenía cianobacterias tóxicas a niveles peligrosos para la salud humana.

Una imagen del lago Okeechobee captada por un satélite de la NOAA el 14 de junio muestra que la proliferación de algas cubre aproximadamente la mitad del lago, unas 380 millas cuadradas.
Una imagen del lago Okeechobee captada por un satélite de la NOAA el 14 de junio muestra que la proliferación de algas cubre aproximadamente la mitad del lago, unas 380 millas cuadradas.

La EPA considera que la microcystis aeruginosa, la cianobacteria tóxica también conocida como alga verdeazul es nociva para el ser humano a partir de una concentración de 8 partes por mil millones. Aunque la mayoría de los puntos analizados en el Lago Okeechobee mostraban niveles muy inferiores—como 0.43 partes por mil millones—, varios tenían niveles superiores a 11 partes por mil millones.

“Ahora mismo, ¿hay riesgo de que eso ocurra? Sí”, dijo Wittman. “La preocupación existe”.

Pero a diferencia de 2016 o 2018, dijo Wittman, el Cuerpo de Ingenieros es mucho más sensible al potencial de consecuencias económicas y ecológicas a grandes descargas de agua.

“Todos son mucho más conscientes de lo que puede suceder que hace unos años”, dijo.

Por ahora no se prevén liberaciones de agua

Eso quedó claro en una conferencia de prensa celebrada el viernes, en la que el coronel James Booth, jefe del distrito de Jacksonville del Cuerpo de Ingenieros, reconoció la preocupación por las algas y dijo que el estado estaba trabajando en la eliminación de las floraciones.

Por ahora el Cuerpo no está liberando agua del lago a ninguna de las costas. Eso pudiera cambiar si el nivel de agua del lago aumenta.

Booth dijo que a 16.5 pies de agua, su preocupación comienza a cambiar de la posibilidad de enviar floraciones a la costa a la seguridad estructural de las presas y diques de retención en el lago.

“Por encima de ese nivel, pensamos en eso, lo hablamos. Pero que superemos el 16.5 no significa que haya riesgo”, dijo. “Todo depende de cuál sea el momento. No hay un número concreto que desencadene la decisión de un desembalse”.

Mirando al futuro

Varios dias seguidos de lluvia, o incluso una tormenta tropical o un huracán especialmente lluviosos, pudieran acercar al Cuerpo de Ingenieros a la decisión de desembalsar agua. Pero con la reciente renovación del dique Herbert Hoover, un enorme muro que retiene el agua en el interior del lago, Booth dijo que confía más en retener más agua.

A largo plazo, activistas de los Everglades y funcionarios del gobierno están trabajando en planes para enviar más agua al sur, tanto a través del nuevo plan de gestión del lago que se estrenará a finales de este año como de la construcción de nuevos proyectos diseñados para almacenar, tratar y enviar el agua limpia al sur.

El mayor y más controversial es el embalse de la Zona Agrícola de los Everglades, que empezó a construirse a principios de este año y ha dividido a la comunidad activista de los Everglades, normalmente muy unida, ante la preocupación de que no funcione o incluso pueda empeorar el problema.

Wittman, cuyo grupo apoya incondicionalmente el proyecto, cree que, una vez construido, ayudará a la Florida a evitar situaciones como esta.

“Cuantos más proyectos se pongan en marcha, más capacidad tendremos para aumentar los caudales hacia el sur, donde solían fluir de forma natural”, dijo Wittman. “Necesitamos que estos proyectos se hagan lo antes posible”.