Atentado con armas y explosivos en zona habitada del sur de Ecuador deja dos muertos y destrozos

QUITO (AP) — Un atentado con armas y explosivos en una zona habitada en la provincia fronteriza de El Oro, en el sur de Ecuador, dejó dos personas muertas, dos heridos y daños materiales, informó el sábado la policía. El hecho ocurre mientras en esa localidad rige un estado de excepción que refuerza la presencia de las fuerzas del orden.

En la tarde, un vehículo arribó al sector conocido como La Barraca, en la población de Puerto Bolívar, en el Pacífico ecuatoriano, desde donde sujetos armados dispararon contra una de las víctimas, un hombre de 67 años, declaró a la prensa el coronel Juan Carlos Mafla, comandante de la policía de El Oro. Tras el ataque se lanzó un artefacto explosivo “improvisado de alto poder”, cuya onda expansiva mató a otra persona y dejó dos heridos y daños en cinco vivienda, agregó el jefe policial.

El atentado estaría dirigido a un integrante de un grupo armado organizado, dijo Mafla, quien declinó proporcionar nombres por ser parte de la investigación. Añadió que un sospechoso ha sido identificado.

El área se encuentra cercada. Medios locales reprodujeron imágenes del sitio donde se observaban los escombros de las viviendas destrozadas y otras seriamente dañadas, a punto de desplomarse, además de viviendas con techos afectados, sin vidrios y hierros de ventanas y puertas torcidos.

El jueves, el presidente Daniel Noboa declaró el estado de excepción en El Oro y otras cinco provincias además de dos ciudades, incluida la capital Quito, en las que, según el decreto, “resalta el incremento de hostilidades, cometimiento de delitos e intensidad de la presencia prolongada de grupos armados organizados”.

Cerca de 4.000 muertes violentas se registraron en esas localidades entre enero y septiembre, agregó el documento.

Ecuador afronta una ola de inseguridad sin precedentes que comenzó en 2021 con más de una docena de masacres penitenciarias que dejaron medio millar de presos muertos. Las autoridades adjudican la ola de violencia dentro y fuera de las prisiones a la operación de grupos de delincuencia organizada relacionados con cárteles de drogas.

Un informe del Ministerio del Interior citado en el decreto admite que “los grupos criminales están actuando con un nivel de organización y letalidad alarmante, mostrando una tendencia a maximizar el número de víctimas en cada evento violento”.