Astrónomos detectan el "despertar" de un agujero negro en el corazón de una galaxia

Una reproducción artística de un agujero negro en pleno despertar en el centro de una galaxia (ESO/M. Kornmesser)
Una reproducción artística de un agujero negro en pleno despertar en el centro de una galaxia (ESO/M. Kornmesser)

Los astrónomos han podido observar por primera vez un agujero negro supermasivo despertarse e incendiar el corazón de la galaxia que lo alberga, informó el Observatorio Europeo Austral el martes.

La galaxia, situada a 300 millones de años luz de la Tierra en la constelación de Virgo, había estado tranquila durante décadas hasta finales de 2019, cuando de repente comenzó a brillar más que nunca.

Desde entonces, el centro de la galaxia --donde se cree que se encuentra un agujero negro supermasivo-- ha estado emitiendo una gran variedad de radiaciones.

"Este comportamiento no tiene precedentes", declaró en un comunicado Paula Sánchez Saez, astrónoma chilena del Observatorio Europeo Austral y principal autora de un nuevo estudio publicado en la revista Astronomy&Astrophysics.

La "opción más tangible" para explicar este brillo es que los astrónomos detectaron "la activación de un agujero negro masivo en tiempo real", dijo Lorena Hernández García, coautora del estudio.

Se cree que la mayoría de las galaxias --incluida la Vía Láctea en la que se encuentra la Tierra-- tienen un agujero negro supermasivo en su centro.

Estos colosos cósmicos son, por definición, invisibles --ni siquiera la luz puede escapar de su increíble fuerza de gravedad.

La única forma de observar los agujeros negros es cuando destruyen algo enorme que emite luz en sus estertores de muerte: como una estrella que se acercó demasiado y fue engullida.

"Estos monstruos gigantes usualmente están durmiendo", explicó Claudio Ricci, coautor del estudio.

Pero en el caso de la galaxia SDSS1335+0728, "pudimos observar el despertar del agujero negro masivo, (que) de repente comenzó a alimentarse del gas disponible en sus alrededores, volviéndose muy brillante", añadió el astrofísico.

Las observaciones iniciales indican que el agujero negro tiene 1,5 millones de veces más masa que el Sol, lo que es suficiente para ser clasificado como un agujero negro supermasivo.

A pesar de ello, es un peso pluma: los verdaderos pesos pesados fácilmente superan 1.000 millones de veces la masa del Sol.

El equipo internacional de astrónomos está analizando datos de varios telescopios con la esperanza de determinar si la actividad del agujero negro es temporal --tal vez causada por una estrella siendo destrozada-- o si continuará activa por mucho tiempo.

"Esto es algo que también podría pasarle a nuestro propio Sgr A*", que es como se conoce el agujero negro supermasivo de la Vía Láctea, dijo Hernández García.

Pero afortunadamente para la raza humana Sgr A* permanece profundamente dormido.

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