“Apoyar a quienes buscan rehacer su vida”: personas privadas de la libertad en CDMX elaboran Rosca de Reyes

Personas privadas de la libertad en los Centros Penitenciarios de la Ciudad de México, a través de la empresa de autogestión “Hazme Valer”, ofrecen Roscas de Reyes este fin de semana en las instalaciones de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC).

Estas Roscas de Reyes forman parte de los talleres que las personas privadas de su libertad toman en los Centros Penitenciarios para formarse en un oficio que les permita autoemplearse al reincorporarse a la sociedad.

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En entrevista con Animal Político, Gabriel Villanueva, coordinador de productos de “Hazme Valer”, detalló que la empresa comenzó en 2019 y desde entonces cada vez más personas privadas de su libertad se interesan por inscribirse a los talleres que les ayudan a autoemplearse.

“Personas liberadas han regresado a dar talleres y apoyar a quienes buscan rehacer su vida. Hemos recibido a personas que dan talleres de pintura y otros oficios con la intención de devolver algo de la reinserción que recibieron”, detalló.

Miniaturas de Metro y Metrobús: el éxito de “Hazme Valer”

Gabriel Villanueva detalló que en los Centros Penitenciarios hay varios talleres de oficios que les permiten tener productos a la venta todo el año y mantener así los ingresos de la marca, con los que apoyan también para la compra de materiales.

Por ejemplo, dijo, con los talleres de pintura y carpintería las personas privadas de su libertad han podido recrear escalas de diversos sistemas de transporte de la Ciudad de México, como el Metro y el Metrobús, que se han convertido en un éxito de venta en las dos tiendas físicas que tienen.

“Todo lo que son playeras, bolsas tipo tote y tazas se venden muy bien, pero algo que nos da mucho gusto que sea un éxito son las miniaturas de Metro, Metrobús, Trolebús, porque además son pintadas con mucho detalle por parte de los compañeros”.

Los puntos de venta fijos que tiene “Hazme Valer” están en el Museo de la Policía, cerca del Metro Juárez, en Victoria 82, colonia Centro. Otra tienda física se encuentra en las oficinas de la Subsecretaría del Sistema Penitenciario, en San Antonio Abad 130, en la colonia Tránsito.

¿Dónde comprar las Roscas de Reyes?

La venta de Roscas de Reyes estará todo el fin de semana, en un horario de 9 de la mañana a 3 de la tarde en las oficinas de la SSC, en Liverpool 136, colonia Juárez, alcaldía Cuauhtémoc.

Tienen un solo tamaño y precio: 150 pesos una rosca mediana, realizada por personas privadas de su libertad en el Reclusorio Preventivo Varonil Sur.

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En un comunicado, la SSC detalló que cerca de 50 personas privadas de la libertad de los Reclusorios Preventivos Varonil Sur y la Penitenciaría de la Ciudad de México, fueron capacitadas en panadería por la Secretaría de Trabajo y Fomento al Empleo y comenzaron con la elaboración artesanal de Roscas de Reyes.

Además de las roscas, los internos realizan otros panes todo el año bajo pedido y en noviembre el tradicional pan de muerto.

Sentirse productivos, un motor para la libertad

No solo acudiendo a las tiendas físicas o adquiriendo tu Rosca de Reyes puedes apoyar esta iniciativa de reinserción en los Centros Penitenciarios de la Ciudad de México, también tienen un catálogo de productos que producen solo bajo pedido especial.

“Las figuras de crochet también tienen buena recepción, tanto en tienda física como en catálogo. Se pueden pedir productos para eventos, como canapés o bocadillos, todo a muy buen precio”, detalló Gabriel Villanueva en entrevista.

Desde muebles, pinturas, bolsas y tazas personalizadas, pedidos de lunch para eventos, juguetes y decoraciones en madera, hasta las envolturas de regalos o para productos personalizadas con marcas, son algunas de las cosas que los internos realizan para trabajar en ellos mismos y obtener, un día, su libertad.

“He sido testigo de cómo los compañeros se emocionan cuando llega un pedido, porque representa para ellos un motor levantarse al siguiente día sabiendo que tienen un trabajo por entregar. En el caso de los centros femeniles, hasta se organizan para diseñar o poner detalles de lo que van a entregar. Es para ellos un motor”, concluyó Villanueva.