América recibe colorida y caótica serenata previo a la Gran Final

CIUDAD DE MÉXICO, diciembre 14 (EL UNIVERSAL).- Las Águilas del América ya están en suelo regiomontano y en su arribo al hotel de concentración no estuvieron solos. Centenas de seguidores azulcrema los esperaban para darles una cálida y colorida bienvenida.

El autobús que los transportó desde el aeropuerto llegó cerca de las 18:30 horas y desató la locura con los fanáticos que ya esperaban por ellos. Uno a uno fueron bajando; Kevin Álvarez, Israel Reyes, Luis Ángel Malagón atendieron a un sector de aficionados.

André Jardine, Henry Martín y Álvaro Fidalgo, de los más vitoreados, saludaron a su afición e ingresaron al hotel. Más tarde bajó todo el plantel para agradecer y estar cerca, algunos minutos con ellos.

Los jugadores bajaron cerca de las 21:00 horas y aplaudieron el aliento de sus aficionados. Entre gritos y cánticos, fueron apareciendo cada uno; Alejandro Zendejas y Jonathan dos Santos, de los más animados.

André Jardine se mostró emocionado y al ritmo de "El profe de Jardine, el profe Jardine", aplaudió a sus fanáticos y saltó cuando gritaban los nombres de sus futbolistas.

Alejandro Zendejas, Luis Ángel Malagón, Henry Martín y Rodrigo Aguirre, fueron de los jugadores más buscados. Elementos que comienzan a adoptar la etiqueta de ídolos e históricos en el América.

Caos en la serenata americanista

Minutos antes de que salieran los jugadores con su afición, la policía trató de retirar a los aficionados que seguían afuera del hotel del América, pero éstos se resistieron.

Policías comenzaron a empujar a reporteros, seguidores y con varias patrullas comenzaron el "barrido" de los aficionados; sin embargo, se pudo llegar a un acuerdo.

Gente operativa del América y los elementos acordaron que los jugadores saldrían lo antes posible para que la afición pudiera retirarse sin más contratiempos.

Algunos ya no pudieron ver a sus ídolos porque se fueron cuando las cosas se salieron de control con las autoridades, pero por fortuna no pasó a mayores el caos que desató la presencia del América.