América Latina siglo XXI: desde la herencia milenaria hasta el saqueo de los recursos naturales

MARCIANO, un hombre indígena huichol en México; Berto Chahuallo, un joven campesino asesinado a tiros por la policía junto con tres compañeros en Las Bombas, una mina en Perú; además del recuerdo de 7 millones de mineros indígenas que murieron en el Cerro Rico de Potosí, en Bolivia, durante el siglo XVII tras el saqueo del colonialismo español, forman parte de las 16 crónicas de América Latina que el periodista Andy Robinson narra en el libro Oro, plata y aguacates, recientemente publicado por la editorial Arpa.

El viaje que emprende Robinson muestra las nuevas venas abiertas que, en algún momento, el periodista uruguayo Eduardo Galeano describió desde el análisis de las economías latinoamericanas. En esta ocasión, Andy retoma la abertura de esas venas desde el periodismo narrativo para hablar de la destrucción de las selvas, los humedales, las tradiciones indígenas y las costumbres milenarias en su lenta extinción.

De acuerdo con el autor, el libro no pretende ser una tesis económica en la que se seleccionan materias primas que son las principales responsables de una especie de modelo extractivista.

“Mi libro solo es una serie de crónicas periodísticas que, en cierta medida, las materias primas de las que habla son formas de contar historias en torno a un lugar y un alimento, mineral o petróleo, y eso es un pretexto para referir mis impresiones y las adscripciones que he podido hacer al estar ahí”, señala Robinson en entrevista con Newsweek México desde Rio de Janeiro, Brasil.

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Robinson, quien además es periodista, sociólogo y especialista en ciencias económicas por la London School of Economics en Inglaterra, señala que el aprendizaje en la cosmovisión de las comunidades indígenas en América Latina ofrece formas de convivir con la naturaleza sin destruirla.

“Volviendo a mirar Las venas abiertas de América Latina, es notable que eso sigue existiendo, pero, quizá, ahora las venas abiertas son del propio medioambiente, cuando tienes incendios en el oeste del pantanal de Brasil que han destruido el 23 por ciento del humedal más importante del planeta, o cuando tienes una deforestación en la Amazonía que ha batido récords de dos años seguidos gracias a las políticas negligentes de Jair Bolsonaro”, señala.

En este recorrido por América Latina por la pluma de Andy Robinson, quien actualmente es corresponsal del diario La Vanguardia, los lectores podrán seguir la ruta de extracción, comercialización y en algunos casos el origen de ciertos alimentos que cuentan con una tradición milenaria que se ven amenazados por la crisis ambiental, como la papa.

ORO, PETRÓLEO Y AGUACATES

En el libro, Robinson también se enfoca en la extracción de minerales y elementos de la naturaleza que se encuentran en diversas minas de la región como el oro en Colombia, Centroamérica y Estados Unidos; hierro en Minas Gerais, Brasil; niobio en Roraima, Brasil; diamantes y esmeraldas en Diamantina, Brasil, entre otros.

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Esta ruta también incluye su paso por México en las entidades de San Luis Potosí con la extracción de plata, el petróleo con Pemex y la importación de aguacate desde el estado de Michoacán.

“Decidí cubrir América Latina porque siempre me ha fascinado. Es una región del mundo que, de acuerdo con Frederick Jackson, es el único lugar del mundo donde puedes ver todas las sociedades y modos de organizar la economía de la historia de la humanidad”, contextualiza.

Agrega que en este territorio las personas campesinas aun viven del autoconsumo con una cultura maravillosa que apenas ha sido destruida por la economía de mercado y la globalización, donde se tiene la oportunidad de hablar con los trabajadores informales que, aunque viven en condiciones complicadas, resultan ser una cultura popular interesante.

El autor también contextualiza las luchas de las comunidades indígenas en América Latina al recordar los gobiernos militares que tuvo este territorio, por ello, considera que la región está volviendo a ese tipo de golpismo ante la extracción de la riqueza de sus recursos naturales y su relación de subdesarrollo con una serie de teorías económicas de independencia.

Este libro pretende descubrir las causas de las crisis de América Latina. Foto: Especial

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En Oro, petróleo y aguacates, Andy Robinson también pone sobre la mesa la crisis climática que se acrecienta rápidamente en el mundo, como ejemplo señala a Brasil, que es el país en el que radica actualmente tras salir de España.

“En Brasil hay científicos de primer rango en el análisis del clima donde comienza a haber un consenso acerca de la situación del clima y lo grave que sería. Creo que periodísticamente esto ya es una noticia de primera página para cada día de la semana y cada semana del mes, pero los medios no estamos a la altura de ese reto, de empoderar lo suficiente a los ciudadanos ante la gravedad de este problema”, analiza.

Robinson propone hacer un periodismo ambiental que ponga en la agenda la crisis climática, la destrucción de la naturaleza y la biodiversidad más importante que existe con crónicas e historias.

“Sin querer estar a la altura del genio Eduardo Galeano, quisiera de alguna forma escribir sobre cuestiones medioambientales como si fuera una novela de amor y de terror, y que eso permita darse cuenta de la gravedad del problema, y al mismo tiempo, disfrutar de esas crónicas que tengan una narrativa fácil de leer”, explica.

EL CASO DE LA PAPA

Durante la videollamada, el autor ejemplifica con el caso de la papa, un tubérculo que es fundamental en la dieta andina, y habla de la globalización de los alimentos por parte de empresas como la refresquera Pepsico. De acuerdo con uno de los capítulos de libro, este es un caso de importación multinacional donde la fábrica de patatas fritas de la marca Lays las elabora a partir de sal y grasa provocando epidemias de enfermedades crónicas como obesidad y diabetes, como sucede en México, por su alto consumo.

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En contraposición, esta misma verdura resulta ser importante para los campesinos de la comunidad de Titicaca y Puno, en Perú, pues es un alimento de vital subsistencia que permitió el crecimiento de la civilización precolombina y con los incas, con la elaboración de 4,000 especies de patatas en el altiplano andino, cada uno con su composición de nutrientes.

“Es casi un alimento milagro que permitió el crecimiento de la sociedad en un entorno complicado de contexto medioambiental en el altiplano”, añade.

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Robinson mostró a este medio una especie de “chuño”, es decir, una patata que sufre un cambio de deshidratación milenaria en el que los habitantes de los Andes han adaptado su conservación naturalmente para que dure hasta 20 años en conserva.

Como si fuera una pequeña roca, el autor expuso un par de muestras de especies de papa en conserva que, a simple vista, se ven como un vegetal normal y pequeño, sin embargo, al dejarlo caer sobre la mesa es como si una roca pequeña se estrellara en la superficie.

“La clave para este proceso es cosechar después de las heladas para lograr el proceso de deshidratación”, pero, debido al cambio climático en el Altiplano, las temperaturas están subiendo mucho y no hay heladas, por eso esta innovación de los precolombinos está en peligro porque las heladas disminuyen en la zona, donde es clara una sequía permanente.

Historias como esta, en la que el autor muestra tanto la cosmovisión de las comunidades indígenas como la explotación y extracción de los recursos naturales a manos de las grandes empresas y la negligencia de los discursos políticos que ven la inversión financiera por encima de la naturaleza, abundan en la obra.

“Este es un libro que va un poco por las ramas, porque en cada capítulo descubres que hay una nueva historia, por eso creo que las historias van entrelazadas ante lo que podemos aprender de esas sociedades y el daño que está haciendo el modelo capitalista, consumista y globalizado que nos está invadiendo”, concluye. N