Alojamientos tradicionales de Europa para disfrutar de una hospitalidad clásica

El viajero se aleja cada vez más de Airbnb por temor a que los precios sean más altos que los locales. Al mismo tiempo, busca algo que le resulte más memorable que una clásica y anónima habitación de hotel. Por suerte, en toda Europa se pueden encontrar propiedades únicas y matices tradicionales que darán forma a su experiencia vacacional.

En Italia, podrá relajarse en granjas rurales donde los alimentos que componen el desayuno proceden directamente de la tierra circundante, mientras que en Alemania podrá saborear una cerveza local en una cervecería al aire libre, antes de pasar la noche en una 'gasthof'. He aquí seis tipos de alojamiento tradicional que el viajero debe buscar en Europa.

Los paradores ofrecen vistas privilegiadas de ciudades y naturaleza en España

Si le gustan los alojamientos con historia, busque un parador cuando esté en España. En la actualidad hay casi un centenar de estos establecimientos repartidos por todo el país, y más de la mitad se encuentran en edificios históricos. Otros se encuentran en espacios naturales, como parques nacionales con vistas panorámicas.

Son de titularidad pública, y el primer parador oficial se inauguró en 1928. Uno de los paradores más conocidos es el Hostal de los Reyes Católicos, de Santiago de Compostela, construido como albergue y hospital para peregrinos a principios del siglo XVI.

Los 'agriturismi' italianos son refugios rurales

Los 'agriturismi' italianos han ganado popularidad entre los viajeros internacionales en las últimas décadas, convirtiéndose en una de las opciones de alojamiento favoritas cuando se está en pequeñas ciudades o zonas rurales.

La mayoría de estos establecimientos son granjas de propiedad independiente que solamente dedican una pequeña parte a acoger a huéspedes.

Los viajeros se pueden encontrar con rústicos edificios de piedra y acogedores interiores rodeados de tierras de labranza y de ganado. Los desayunos, y las cenas informales, si se ofrecen, consisten en productos de la granja, como huevos, verduras y aceite de oliva.

Los 'agriturismi' son la opción de alojamiento ideal si el visitante pretende explorar la campiña italiana, desea un retiro tranquilo lejos de las ciudades o busca espacio para que los niños deambulen con seguridad.

Las posadas de Gran Bretaña ofrecen una acogedora estancia nocturna

Si ha conducido o paseado por la campiña británica, es probable que haya visto decenas de posadas de piedra encalada, al borde de la carretera. Se trata de una opción de alojamiento histórica, puede hospedarse en algunas que dicen datar del siglo XI, que originalmente ofrecían alojamiento y comida a los viajeros que se desplazaban a lomos de sus caballos o en carruaje.

Cientos de ellas siguen funcionando en todo el Reino Unido y ofrecen alojamiento básico y asequible.

Su verdadero encanto, sin embargo, es el pub que se encuentra situado en la planta baja. Suelen servir cervezas locales de barril y suculentos platos británicos, como pasteles de carne y el famoso pescado rebozado y frito con patatas fritas.

Las posadas no suelen tener muchas más instalaciones, a diferencia de los hoteles, que pueden ofrecer espacios con tratamientos de balneario, o gimnasios, pero son una excelente opción para pasar una noche mientras se viaja por el país.

Viva la fantasía de la campiña francesa en una gîte

Las gîtes (casas rurales) son propiedades de alquiler vacacional en la campiña francesa que suelen tener una buena relación calidad-precio. A menudo, se trata de una casa rural reformada, una granja o un granero reconvertido con instalaciones en las que se puede cocinar: piedra de color miel, contraventanas de color azul claro y una mesa bajo un toldo cubierto de parras para disfrutar de las relajadas comidas de verano.

Este tipo de alojamiento está hecho a medida para todo, desde optar por un retiro en solitario en busca de una desintoxicación digital hasta una escapada romántica en pareja o una semana de diversión en familia. En muchos de estos sitios aceptan la presencia de mascotas y algunos, incluso, tienen piscina privada.

Descansar en un 'rifugio' mientras se practica senderismo en los Alpes italianos

Las montañas de Italia, incluidos los Alpes y los Apeninos, están salpicadas de estructuras conocidas como rifugio. Desde pequeñas cabañas de piedra con dormitorios sencillos hasta chalés con bares y restaurantes.

El viajero puede encontrar numerosos 'rifugi' a lo largo de decenas de rutas de senderismo populares. A algunos de ellos, también se accede en teleférico. Los 'rifugi' son la opción ideal para los viajeros que buscan unas vistas impresionantes, platos de montaña como jarrete de cerdo asado o canederli, una especie de albóndigas de pan, y un alojamiento barato, pero alegre, para pasar la noche.

Disfrutar de la cervecería al aire libre en una 'gasthof' alemana

En los pueblos, pequeñas ciudades y barrios más tranquilos de Alemania, los viajeros pueden pasar la noche en una 'gasthof' o 'gasthaus'. Estos establecimientos ofrecen alojamiento sencillo, interiores de madera y un ambiente familiar.

Lo mejor de pasar una noche en una 'gasthof' es, sin duda, comer en sus restaurantes o cervecerías al aire libre, donde el visitante encontrará platos clásicos y especialidades regionales como schnitzel y bratwurst.