Alcalde Suárez bajo investigación ética estatal por entradas para el Mundial y la F1

La Comisión de Ética de la Florida abrió oficialmente una investigación sobre el alcalde de Miami, Francis Suárez, a raíz de una denuncia sobre su aceptación de costosas entradas para eventos deportivos como el Gran Premio de Fórmula 1 de Miami y el Mundial de Fútbol de 2022 en Catar.

La investigación se basa en una denuncia presentada por el activista local Thomas Kennedy, que plantea interrogantes sobre quién pagó las entradas valoradas en miles de dólares y si Suárez cumplió las leyes éticas de la Florida que obligan al alcalde a revelar la procedencia de todos los regalos, incluidos los accesos de cortesía, valorados en más de $100. Las leyes también prohíben a los funcionarios electos aceptar tales regalos de proveedores de la ciudad, cabilderos o sus empleadores.

La denuncia señala que Suárez no presentó una declaración de regalos por sus pases de acceso VIP a la Fórmula 1 el año pasado, como se exigiría si pagara alguien que no fuera la ciudad o un familiar directo. Tampoco informó de su viaje a Catar para la Copa del Mundo, donde fue fotografiado en un palco de lujo con la estrella del fútbol David Beckham, un cabildero registrado para abogar por la construcción de un estadio de la Major League Soccer en terrenos propiedad de la ciudad.

“El estado actual de la denuncia es ‘pendiente de investigación’”, escribió Millie Fulford, secretaria de la Comisión, en una actualización enviada a Kennedy el miércoles. Fulford dijo que la comisión está en proceso de nombrar a un investigador para el caso.

Kennedy presentó la misma denuncia ante la Comisión de Ética del condado, pero el caso fue desestimado el 15 de septiembre debido a una cláusula del código del condado que exige que el denunciante tenga un conocimiento personal sustancial de la presunta infracción. Las reglas éticas estatales no contienen tal requisito.

La asignación de un investigador en el caso estatal sugiere que se determinó que la denuncia era legalmente suficiente según las reglas estatales. Los investigadores de ética realizarán ahora entrevistas y solicitarán registros que muestren quién pagó cada evento para determinar si hubo una infracción.

“Es bueno ver que la Comisión de Ética de la Florida se toma en serio este asunto, ya que la gente merece respuestas claras y objetivas”, declaró Kennedy. “Ha quedado claro que no las obtendrán del alcalde ni de su administración”.

Francis Suárez y David Beckham en el Mundial de Catar.
Francis Suárez y David Beckham en el Mundial de Catar.

En el centro de la denuncia estuvo el fin de semana de cinco cifras que pasó Suárez en el Gran Premio, durante el cual vio las carreras desde el Paddock Club, la suite más exclusiva de la Fórmula 1. Su esposa lo acompañó durante al menos dos días y la pareja también asistió a una cena de $3,000 por persona llamada Carbone Beach.

A través de un portavoz, el multimillonario inversionista Ken Griffin declaró previamente al Herald que había invitado al alcalde y a su esposa a la cena y a la carrera del domingo, eventos por un valor total de $14,000. Después que el Herald planteara preguntas sobre la legalidad de tales regalos de Griffin, que está cabildeando ante la ciudad mientras traslada la sede de su empresa, Citadel, a Miami, el portavoz de Griffin dijo al Herald que Suárez había pagado las entradas.

Suárez no ha proporcionado recibos que documenten el reembolso. Se negó a responder a las preguntas del Herald sobre cuándo pagó a Griffin. Tampoco quiso decir quién le proporcionó las entradas para el Paddock Club el viernes y el domingo. Las publicaciones en las redes sociales le muestran presente y que su esposa también se unió el sábado. Los pases de tres días para el Paddock Club cuestan $14,000, según Bloomberg.

En una entrevista con Ivan Taylor de CBS4, Suárez dijo que también asistió a Carbone Beach el viernes por la noche para dar un discurso en la apertura del evento en Miami Beach. Dijo que no se quedó mucho tiempo y no llevó a su esposa. El alcalde también asistió a Once Upon a Kitchen, un evento emergente de $6,000 por persona en el circuito de fiestas del Grand Prix por invitación de Gr8 Experience, el grupo hotelero que organizó el evento. Suárez convivió con los coordinadores del evento y con el chef principal, Massimo Bottura, aunque no se quedó a cenar, según un portavoz de Gr8 Experience.

Pero la ley de regalos sigue siendo aplicable tanto si asistió a un evento durante cinco minutos como si lo hizo durante cinco horas, dijo Caroline Klancke, directora ejecutiva del Instituto de Ética de la Florida, una organización sin fines de lucro creada para “proteger y promover la causa de la ética en el gobierno”.

“Las leyes de ética reconocen que los regalos pueden incluir entradas a eventos, palcos y entradas, y no establece un marco de tiempo en el que el regalo se convierta en lo suficientemente sustancial”, dijo Klancke, que pasó más de una década trabajando en la Comisión de Ética de la Florida, donde fue asesor jurídico.

Suárez también declaró a CBS4 que había asistido a algunos de los eventos de Fórmula 1 en calidad oficial de alcalde. Pero los calendarios del alcalde obtenidos por el Herald a través de solicitudes de registros públicos muestran el fin de semana bloqueado como tiempo personal.

Suárez tiene hasta finales de septiembre para informar de los tickets de la cena y de cualquier otra fuente aún desconocida detrás de su fin de semana del Gran Premio que se celebró del 5 al 7 de mayo. Hasta el jueves por la mañana no se había presentado ninguna declaración. No está obligado a informar de las entradas que pagó él mismo, ni de las que reembolsó íntegramente en los 90 días siguientes a su asistencia.

La oficina del alcalde no respondió a las peticiones de comentarios del Herald. Griffin declinó hacer comentarios.

Suárez, alcalde a tiempo parcial que ha tenido 13 empleos paralelos desde principios de 2022, está bajo investigación federal por su trabajo de $10,000 al mes para un urbanizador local con negocios ante la ciudad. El Herald informó que el personal de Suárez intervino para ayudar al urbanizador con un problema de zonificación.

Suárez dijo al Herald que la Comisión de Bolsa y Valores (SEC) se había puesto en contacto con él, pero que a principios de septiembre no se había reunido con los investigadores. También dijo que el FBI no se había puesto en contacto con él.

La Fiscalía Estatal y la Comisión de Ética del condado también abrieron una investigación conjunta sobre el asunto.

En una reciente ronda de presentaciones ante los medios, Suárez insistió en que las investigaciones son noticias antiguas.

“Hemos hablado de esto varias veces, es la misma historia que se recicla una y otra vez y he sido muy claro y franco sobre esto en lo que no tuve ninguna influencia”, dijo Suárez al reportero de NBC6 Steve Litz, quien le preguntó sobre su empleo externo. Dijo que no estaba “incluido en ningún correo electrónico” y “de ninguna manera hablé con alguien de la administración” sobre el asunto de zonificación que implica al urbanizador que le pagó como consultor.

“Facilité toda la documentación a quien quisiera verla”, dijo.

La alcaldía aún no ha respondido a la petición del Herald de esos documentos.