Agente enfrenta a sospechoso y ambos mueren en balacera absurda en la Florida

Un agente de policía que trabajaba un turno extra en su día libre murió al responder a una llamada rutinaria sobre alguien que estaba causando problemas en una tienda de descuento, según investigadores del Panhandle de Florida.

A pesar de recibir múltiples impactos de bala, el agente Will May respondió al ataque, dándole muerte al agresor, según declaró Michael Adkinson Jr., jefe de la policía del Condado Walton, en una conferencia de prensa.

El tiroteo ocurrió alrededor de las 2 p. m. del miércoles 2 de abril, frente a la tienda Dollar General en Mossy Oak, y todo lo relacionado con el incidente desafía la lógica, declaró Adkinson.

“Esta agencia está consternada e incrédula por lo que sucedió, y ciertamente por lo que sucedió de esta manera: a las 2 p. m. de un miércoles por algo que no iba a terminar en una detención”, declaró Adkinson.

“El sujeto al que se enfrentaban ni siquiera iba a ser arrestado. Simplemente le pedían que se fuera. Entre veinticinco y treinta segundos después de su llegada, May resultó mortalmente herido. No tiene sentido”, agregó el jefe de Policía.

Adkinson se negó a identificar al sospechoso durante la conferencia de prensa, pero informó que tenía licencia para portar armas y no tenía antecedentes penales en el Condado Walton. Llegó a la tienda en bicicleta.

No se han revelado detalles del disturbio inicial en el establecimiento, ubicado a unas 65 millas al noreste de Pensacola.

May estaba haciendo su última llamada del día cuando el personal de Dollar General reportó un problema y le preguntó si podía escoltar a un hombre fuera de la tienda, según las autoridades.

“Hubo una breve discusión, de entre 10 y 15 segundos, en la que el sospechoso salió de la tienda con el agente May caminando detrás de él”, dijo Adkinson.

A los 10 segundos de salir de la tienda, el sospechoso sacó un arma de fuego y disparó varias veces, hiriendo al agente May. El agente May, para su gran mérito y valentía, logró desenfundar su arma y devolver el fuego. En este breve pero violento tiroteo se hicieron al menos 18 disparos, con ambos individuos muertos.

May pidió ayuda e informó que tanto él como el sospechoso habían recibido disparos, informaron las autoridades.

El sospechoso falleció en el lugar de los hechos y May fue trasladado a un hospital para recibir tratamiento. Falleció poco después de las 7 p. m., tras cuatro horas en el quirófano, según Jefe de Policía.

May llevaba un chaleco protector, pero uno de los disparos se coló por debajo del chaleco, causándole lesiones graves, dijo Adkinson.

Otra bala impactó en su cámara corporal.

May llevaba trabajado en el departamento desde 2014 y había servido en patrullas durante los últimos seis años, además de ser agente de entrenamiento de campo, informaron las autoridades. Su padre es jefe de bomberos jubilado y su madre era operadora, dijo Adkinson.

“En nombre de esta organización, me esfuerzo por comprender esto, pero puedo decirles que no hay absolutamente nada tácticamente incorrecto en lo que hizo el agente May. Llevo 32 años en este negocio. No hay nada que hubiera hecho de forma diferente”, dijo Adkinson.

“No había ningún indicio de que esto hubiera terminado en ese tipo de violencia. Esta es una interacción que los agentes tienen a diario en este condado. Todos los días”.

Varias personas presenciaron el tiroteo, dijo Adkinson, y “también quedaron atónitas por la rapidez con la que esto se convirtió en un tiroteo”.

May estaba casado y era padre de dos hijos, dijo Adkinson.

“El agente May no debía trabajar ese día”, señaló. “Vino como voluntario para ayudar con las horas extras”.

Traducción de Jorge Posada