Acusan a magnate de la música Sean "Diddy" Combs de extorsión y tráfico sexual

FOTO DE ARCHIVO: El rapero Sean "Diddy" Combs llega a la entrega de los MTV Video Music Awards de 2016 en Nueva York

Por Luc Cohen y Jonathan Stempel

NUEVA YORK, 17 sep (Reuters) -Sean "Diddy" Combs utilizó su fama como uno de los nombres más importantes del hip-hop para obligar a las mujeres a participar en actos sexuales degradantes como parte de una larga trama de tráfico sexual y crimen organizado, según una acusación federal de tres cargos presentada el martes.

Combs, de 54 años, usó el imperio empresarial que controlaba, incluido su sello discográfico Bad Boy Entertainment, para transportar a mujeres, así como a trabajadores del sexo, a través de las fronteras estatales para participar en espectáculos sexuales grabados llamados "Freak Offs" en los que el magnate de la música miraba y se masturbaba, dijeron los fiscales.

Vestido con una camiseta negra y pantalones deportivos grises, Combs se declaró inocente ante la juez de instrucción Robyn Tarnofsky en Manhattan. Se espera que la jueza decida si Combs, quien fue detenido el lunes, debe permanecer bajo custodia a la espera del juicio.

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El rapero y productor se enfrenta a una pena mínima obligatoria de 15 años de prisión y hasta cadena perpetua entre rejas si es declarado culpable de los tres delitos: asociación ilícita, tráfico sexual y transporte para ejercer la prostitución.

También conocido durante su carrera como P. Diddy y Puff Daddy, Combs fundó Bad Boy Records y se le atribuye haber ayudado a convertir en estrellas a raperos y cantantes de R&B como Mary J. Blige, Faith Evans, Notorious B.I.G. y Usher en las décadas de 1990 y 2000.

Los fiscales acusan a Combs de dirigir una empresa criminal para facilitar la explotación de mujeres, que se remonta a al menos 16 años, en un caso presentado por la oficina del fiscal federal de Manhattan Damian Williams.

Los abogados defensores solicitan la puesta en libertad de Combs bajo una fianza de 50 millones de dólares garantizada por su casa de Miami.

El abogado Marc Agnifilo reconoció que Combs tiene un historial de consumo de drogas y relaciones tóxicas, y dijo que estaba recibiendo tratamiento y terapia para "cosas para las que necesita tratamiento y terapia", sin entrar en detalles.

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La fiscal Emily Johnson, que abogaba por mantener la detención, dijo al juez que 12 testigos habían visto a Combs ejercer la violencia contra mujeres o habían visto lesiones de mujeres causadas por él.

"El acusado Sean Combs abusó física y sexualmente de las víctimas durante décadas", dijo Johnson al tratar de persuadir al juez para que lo mantuviera detenido. "Es extremadamente peligroso para la comunidad".

Johnson dijo que Combs suponía un riesgo de obstrucción a la justicia si era puesto en libertad, afirmando que había contactado con testigos que recibieron citaciones del gran jurado, incluida una víctima.

SEDUCÍA A LAS VÍCTIMAS

Según la acusación, Combs seducía a las mujeres dándoles drogas como ketamina y éxtasis, apoyo financiero o promesas de apoyo profesional o una relación romántica. A continuación, Combs utilizaba grabaciones subrepticias de los actos sexuales como "garantía" para asegurarse de que las mujeres guardaran silencio, y a veces exhibía armas para intimidar a las víctimas de abusos y a los testigos, según los fiscales.

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Williams dijo en rueda de prensa que su oficina "está decidida a investigar y procesar a cualquiera que se dedique al tráfico sexual, sin importar lo poderoso, rico o famoso que sea".

La acusación no especificaba cuántas mujeres eran presuntas víctimas. No contenía ninguna acusación de que el propio Combs hubiera mantenido directamente contactos sexuales no deseados con las mujeres, aunque se le acusaba de agredirlas con puñetazos, patadas, arrastrándolas y lanzándoles objetos.

Combs es la figura de la industria musical de más alto perfil acusada de conducta sexual inapropiada desde que el cantante de R&B R. Kelly fue condenado a un total de 31 años de prisión tras ser declarado culpable en Nueva York en 2021 y en Chicago en 2022 de tráfico sexual, asociación ilícita, delitos sexuales frente menores y otros cargos.

La próxima vista del caso está fijada para el 24 de septiembre.

(Reporte de Luc Cohen en Nueva York; Reporte adicional de Daniel Trotta; Editado en español por Lucila Sigal y Daniela Desantis)