Acusadoras de Epstein dicen que hacía alarde de su depravación, y los visitantes VIP tenían que saber

Al final, participaran o no en actos ilícitos, cualquiera que visitara las casas de Jeffrey Epstein, pasara el rato en su piscina o estuviera en su presencia tendría que estar ciego para no darse cuenta en qué estaba metido, según dos víctimas del difunto traficante sexual.

Virginia Giuffre y Sarah Ransome hicieron sus observaciones en un angustiado testimonio jurado en el curso de un litigio que giró en torno a Epstein en sus últimos años, antes de su suicidio en prisión. Años antes, se había declarado culpable en un tribunal de Palm Beach de mantener relaciones sexuales con una menor de edad. Tras salir de la cárcel, Epstein fue bienvenido de regreso por empresarios, políticos y famosos. Fue como si nunca hubiera ocurrido.

Las mujeres, en su testimonio revelado el martes, afirmaron que Epstein hacía alarde de su atracción por las mujeres jóvenes, algunas de ellas menores de edad.

La acusación es significativa porque muchos famosos —desde Donald Trump hasta Bill Clinton— se sintieron atraídos por la órbita de Epstein, volando en su avión, como en el caso de Clinton; o, como en el caso de Trump, estando de fiesta con él en Mar-a-Lago, una escena captada en video.

Clinton ha negado que ocurriera nada inapropiado mientras estuvo con Epstein y un portavoz de Trump dijo a Newsweek que cualquier acusación de irregularidad “es simplemente falsa y no tiene ningún mérito”.

Los documentos divulgados el martes proceden de un caso de difamación anteriormente sellado y litigado hace años. Como suele ser el caso con Epstein, incluían acusaciones salaces pero en gran medida no probadas de mujeres que han vivido vidas traumáticas, que se hicieron más difíciles por su relación con Epstein. Durante años han circulado acusaciones sobre personajes famosos que han mantenido relaciones sexuales con mujeres o chicas conseguidas por Epstein o su personal. Todas las acusaciones han sido desmentidas. Con excepción de una foto de Giuffre junto al príncipe Andrés, apenas se ha presentado evidencia reveladora.

Entre la documentación judicial más reciente:

▪ Giuffre, en una declaración jurada, insistió en que tanto Bill Clinton como Les Wexner, que se asociaron con el multimillonario, sabían que Jeffrey Epstein mantenía relaciones sexuales con chicas menores de edad. De Wexner, el multimillonario propietario de Victoria’s Secret, Giuffre dijo que “hizo cosas que estuvieron mal... participó en relaciones sexuales con menores”. Un portavoz de Wexner negó que él se haya reunido alguna vez con Giuffre y dijo que Wexner nunca estuvo involucrado en “ninguna de las conductas aborrecibles llevadas a cabo por Epstein”.

▪ En la misma declaración, Giuffre afirmó que fue obligada a mantener relaciones sexuales más de una vez con el ex senador George Mitchell y con Bill Richardson, ex gobernador de Nuevo México. Ambos lo negaron, y Richardson ya falleció.

▪ Giuffre juró que fue víctima de tráfico con un “conocido primer ministro” al que se negó a nombrar porque temía que eso pusiera su vida en peligro.

Giuffre también testificó sobre una serie de mujeres que participaron en mantener relaciones sexuales con ella y otras personas para el entretenimiento de Epstein.

Los documentos provienen de una demanda por difamación presentada en 2015 por Giuffre contra Ghislaine Maxwell, amante de Epstein durante mucho tiempo y reclutadora de niñas y jóvenes como Giuffre cuando conoció a la pareja cuando era adolescente. El caso se resolvió extrajudicialmente en 2017, y Maxwell pagó a Giuffre un acuerdo de conciliación multimillonario. La mayoría de los documentos, sin embargo, fueron sellados en ese momento. El Miami Herald, cuya serie Perversion of Justice llevó al nuevo arresto de Epstein en 2019, al que siguió su muerte tras las rejas, demandó con éxito que se retirara el sello al caso, y los documentos se han ido divulgando de forma escalonada en los últimos cinco días.

La declaración de Giuffre, nunca antes divulgada, fue en realidad parte de una pelea legal no relacionada entre el famoso abogado Alan Dershowitz, que representaba a Epstein y fue huésped en su mansión de Palm Beach, y dos abogados que representaron a víctimas de Epstein. Dershowitz y los abogados, Bradley Edwards y Paul Cassell, presentaron demandas contrarias en 2015 por las acusaciones de Giuffre contra Dershowitz.

Giuffre acusó a Dershowitz en una declaración jurada de haber mantenido relaciones sexuales con ella. Dershowitz negó todas las acusaciones de Giuffre, de las que más tarde se retractó parcialmente, y su declaración jurada fue eliminada del expediente judicial.

Las demandas se resolvieron posteriormente fuera de los tribunales, pero algunos de los documentos judiciales se incorporaron al caso de difamación Giuffre-Maxwell, que comenzó cuando Maxwell llamó mentiroso a Giuffre.

El martes también se hizo pública la declaración de Sarah Ransome.

Entre otras cosas, el testimonio jurado de Ransome del 17 de febrero de 2017 ofrece una descripción gráfica de un encuentro sexual que ella dijo que tuvo con Dershowitz y otra víctima de Epstein, Nadia Marcinko, en la mansión de Nueva York de Epstein, así como lo que ella dijo que era una descripción detallada de las características físicas de Dershowitz.

Dershowitz dijo que nunca había conocido a Ransome.

“No hay que creer nada de lo que dice”, dijo Dershowitz al Herald.

Dershowitz había pedido en repetidas ocasiones que se desclasificaran todos los documentos del caso, afirmando que le reivindicarían. Dijo que está “muy contento con la totalidad de estas revelaciones”.

Dershowitz y Epstein fueron amigos durante años. El profesor emérito de derecho de Harvard dijo que ahora se arrepiente de haber conocido a Epstein y que su amistad terminó cuando lo tomó como cliente.

Giuffre y Dershowitz se demandaron mutuamente y llegaron a un acuerdo de conciliación en 2022. En ese momento, Giuffre admitió que pudo haberse equivocado al citar a Dershowitz como alguien que abusó sexualmente de ella.

Tom Davies, un portavoz de Wexner, señaló un documento judicial de 2020 en el que su cliente emitió una declaración negando las acusaciones de Giuffre: “El Sr. Wexner no estaba al tanto y nunca fue partícipe de ninguna de las conductas abominables llevadas a cabo por Epstein contra las víctimas de Epstein, que el Sr. Wexner nunca había conocido a la Sra. Giuffre y que cualquier afirmación contraria no era cierta”.

Giuffre también describió las cenas a las que asistieron académicos y personalidades, como Bill Clinton y Al y Tipper Gore. Dijo que se sintió especialmente conmovida al ver cómo Gore se deshacía en atenciones hacia su esposa durante la cena, señalando: “Me pareció un tipo maravilloso que amaba a su esposa.... Es alguien que quiere mucho a su esposa”.

Posteriormente se divorciaron.

Un portavoz de Gore dijo que el ex vicepresidente “no recuerda” haber conocido a Epstein.

Clinton ha negado que supiera que Epstein abusaba sexualmente de alguien y también dice que nunca estuvo en la isla de Epstein.

Las respuestas más detalladas de ella fueron a preguntas sobre Dershowitz, de quien afirmó que fue obligada a mantener relaciones sexuales con él en seis ocasiones. Después de que se le pidiera que describiera en detalle uno de los encuentros, se excusó y vomitó fuera de la sala, según la declaración.

Subrayó que casi cualquiera que visitara las casas de Epstein debería haber sabido lo que hacía.

“Yo diría que la primera vez que llegaron a esa propiedad había fotos de desnudos por todas partes”, dijo Giuffre. “Son actos salaces de chicas, chicas jóvenes haciéndose cosas unas a otras que se considerarían pornografía infantil. Si alguien entraba en la casa de Jeffrey Epstein y seguía siendo conocido suyo, entonces tendría que saber lo que estaba pasando ahí.

“Pueden llamarlo suposición, pero como he dicho una persona tendría que estar ciega para no saber lo que está pasando”.

A pesar de todo lo que revelan los documentos divulgados en la última semana, persisten muchos secretos.

Los documentos incluyen la transcripción completa de la declaración de Epstein del 9 de septiembre de 2016, en la que invocó su derecho a la Quinta Enmienda 1,000 veces, negándose a responder.

Tres nombres están tachados de una serie de preguntas en las que se le pregunta a Epstein si envió a Giuffre a tener relaciones sexuales con sus poderosos amigos.

Al menos el nombre de un hombre permanece tachado en los correos electrónicos divulgados el lunes.

Ransome se refirió a “un correo electrónico que se intercambió entre [NOMBRE TACHADO] usando su nombre en clave [TACHADO] a través de Sugar Daddie.com. Tengo otra correspondencia que mantuve con él en mi caja de almacenamiento en Inglaterra”.

En el mismo lote de correos electrónicos, el nombre de alguien que Ransome dijo que intentó violarla “con su amigo cuando estábamos anclados en su barco en Miami” permaneció tachado.

En los documentos divulgados el 3 de enero, se revelaron los nombres de dos de las tres personas citadas a declarar, eran agentes de policía,, pero un tercer nombre permaneció tachado.

En una lista de testigos divulgada el 4 de enero, las tachaduras también cubrían nueve nombres de personas que “podrían tener” o tienen “información sobre la conducta de tráfico sexual de Ghislaine Maxwell y Jeffrey Epstein”.

Una persona que estuvo “presente en vuelos con Jeffrey Epstein, Ghislaine Maxwell y Virginia Giuffre” y que podría tener conocimiento del tráfico también se mantuvo en secreto en la publicación del 4 de enero.

Y en un fragmento de otra declaración de Giuffre divulgada la semana pasada, se le pregunta “cuándo le indicó Ghislaine Maxwell que fuera a tener relaciones sexuales con”... seguido de un nombre que fue [tachado].