El acuerdo sobre el mar Negro pone a prueba a un puerto rumano clave para el grano ucraniano

La terminal de cereales con silo de grano en el puerto del mar Negro de Constanza

Por Luiza Ilie y Marek Strzelecki

BUCAREST, 6 jul (Reuters) - El bloqueo de los puertos ucranianos de grano del mar Negro ha convertido al puerto más cercano de Constanza, en la vecina Rumanía, en una alternativa clave que está preparada para duplicar sus volúmenes récord de años y para meses de retrasos ante la inminencia de una cosecha nacional, según afirmaron expertos del sector y operadores.

Ucrania, uno de los principales exportadores mundiales de cereales y oleaginosas, vio bloqueados sus puertos del mar Negro tras la invasión rusa de febrero de 2022.

Recuperó el acceso limitado a tres de sus puertos en virtud de un acuerdo negociado el pasado mes de julio por las Naciones Unidas y Turquía, que se ha prorrogado tres veces pero que expira este mes.

Dado que desde el 26 de junio no se han registrado nuevos buques en el marco del acuerdo, y que es incierta una nueva prórroga, las autoridades ucranianas han declarado que el tránsito a través del puerto rumano de Constanza, en el mar Negro, será de vital importancia.

Desde el comienzo de la guerra, Constanza ha gestionado un tercio del total de las exportaciones ucranianas de grano, algo menos de 49 millones de toneladas.

Los operadores portuarios rumanos enviaron 8,6 millones de toneladas el año pasado, y 6,3 millones de toneladas en los cinco primeros meses de 2023, según informó a Reuters la autoridad portuaria de Constanza. El puerto procesó 12,17 millones de toneladas de cereales en total en los cinco primeros meses, lo que supone un aumento del 21% respecto al año anterior.

"Se prevé que el puerto de Constanza alcance un nuevo récord de tráfico", declaró la autoridad.

DE VAGONES OXIDADOS A DESBORDAMIENTOS

Al principio de la guerra, unos 700 vagones oxidados bloqueaban las vías del puerto de Constanza, y las obras ferroviarias estaban paralizadas. Solo el año pasado, Rumanía reabrió o rehabilitó 47 enlaces ferroviarios de carga y pasajeros con Ucrania y la vecina Moldavia, y las obras continúan.

Las rutas de tránsito por ferrocarril y barcaza desde los puertos ucranianos del Danubio han evolucionado a lo largo de los 16 meses de guerra, según los operadores portuarios. Las mejoras logísticas han abaratado los costes, por lo que el Danubio es fundamental para las exportaciones agrícolas de Kiev.

Mientras tanto, la prima del seguro para los barcos que salen de Odesa y el coste de los tiempos de espera en Estambul para la inspección coordinada por Rusia, Turquía y la ONU, que se extiende hasta el millón de dólares para un barco de tamaño medio, hacen que el tramo de la ruta a Suez por la alternativa de Constanza sea cuatro veces más barato.

Esta combinación convierte a la ruta rumana en una alternativa sustancialmente más barata no solo para el grano de Ucrania occidental, sino que la mantiene competitiva incluso para los envíos procedentes de las zonas centrales del país, según una fuente comercial ucraniana.

Como resultado, el puerto podría verse desbordado, incluso si se amplía la iniciativa del grano del mar Negro, según Cezar Gheorghe, de la consultora rumana de mercados de grano AGRIColumn.

"Estamos fuera de la temporada de cosecha y Constanza sigue con agobios", declaró a Reuters Gheorghe, que cuenta con décadas de experiencia en el comercio y ha asesorado al Ministerio rumano de Agricultura.

Gheorghe estimó que hasta 27 millones de toneladas de cereales y oleaginosas ucranianas podrían enviarse a través de Constanza en la temporada 2023/2024, incluso si se amplía el corredor, compitiendo con 20-21 millones de toneladas de una prometedora cosecha rumana.

(Reporte de Luiza Ilie en Bucarest y Marek Strzelecki en Varsovia; información adicional de Pavel Polityuk; edición de David Evans; editado en español por Flora Gómez)