El acuerdo comercial UE-Mercosur será "justo", según el comisario designado
El polémico acuerdo de libre comercio entre la UE y Mercosur podría "cerrarse en un terreno muy, muy justo", dijo Maroš Šefčovic el lunes en su audiencia de confirmación como nuevo comisario europeo de Comercio y Seguridad Económica.
Maroš Šefčovic, comisario desde 2009, se ciñó al guión y respondió a más de tres horas de preguntas en el Parlamento Europeo. Interrogado principalmente por los eurodiputados franceses sobre el acuerdo con Mercosur, ya que Francia es el principal oponente al acuerdo, Šefčovič dijo que las negociaciones se encontraban en el nivel técnico y que aún no habían alcanzado un nivel político.
Eliminar barreras comerciales
El acuerdo comercial, que lleva más de dos décadas debatiéndose con los países del Mercosur -Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay-, pretende eliminar barreras comerciales como los aranceles para crear una zona de libre comercio que abarque a 780 millones de personas y unas exportaciones e importaciones anuales por valor de entre 40.000 y 45.000 millones de euros.
Para los opositores europeos al acuerdo, "terreno justo" significa tener en cuenta las demandas de los agricultores y los seguros medioambientales que los europeos quieren ver garantizados en el acuerdo.
Mientras los países del Mercosur se resisten en las negociaciones sobre normas medioambientales, Šefčovic dijo que los socios comerciales de la UE ven a veces el medio ambiente como una petición unilateral de la UE, percibida a veces como "imperialismo regulador" y que la UE tenía que hacer "más esfuerzos de acercamiento". Varios meses después de que Europa sufriera masivas protestas de agricultores, el eslovaco insistió en que la UE está "hipervigilante" para defender sus intereses.
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Y a quienes cuestionan la transparencia del proceso de negociación les prometió: "Cuando sepamos que las negociaciones están en la fase final o terminadas, entonces, como les prometí, vendré a verles con un PowerPoint, con una calculadora, con todos los datos necesarios".
Interrogado por última vez sobre el tema por la eurodiputada francesa Manon Aubry (La Izquierda), que arremetía contra el impacto del acuerdo de Mercosur sobre los agricultores y la salud, Šefčovič casi levantó la voz. "Durante décadas, hemos sido el socio comercial número uno con América Latina, ahora en cualquier lugar es China".
Una China "muy complicada"
Sobre China, Šefčovic se hizo eco sobre todo de la política de Ursula von der Leyen, que ha dirigido el bloque hacia una respuesta más asertiva contra las prácticas comerciales desleales de Pekín.
El comisario designado describió a China como un socio comercial "muy complicado y a menudo difícil" que plantea al bloque una formidable lista de retos, como el exceso de capacidad, el dumping, las fuertes subvenciones y las restricciones proteccionistas.
Šefčovic defendió con firmeza la investigación de la Comisión sobre los vehículos eléctricos fabricados en China, que según el Ejecutivo reciben subvenciones excesivas para venderse a precios artificialmente bajos en todo el mundo. Como consecuencia, la Comisión ha impuesto fuertes aranceles a las importaciones de vehículos eléctricos chinos, lo que ha provocado amenazas de represalia por parte de Pekín.
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"A la UE no le interesan las guerras comerciales", dijo el candidato a los eurodiputados. "No podemos tolerar que se utilicen subvenciones para preservar empleos chinos a expensas de (empleos) europeos".
Los funcionarios de la UE y China siguen intentando negociar una solución basada en precios mínimos, pero esta solución, dijo Šefčovic, tiene que ser tan "efectiva y aplicable" como los aranceles. "Esto es clave para nosotros", añadió.
China también fue uno de los países que Šefčovic mencionó cuando denunció la "totalmente inaceptable" elusión de las sanciones que la UE ha impuesto a Rusia como reacción a la invasión de Ucrania. Desde hace tiempo se acusa a China de apoyar la economía de guerra del Kremlin exportando productos de alta tecnología que Occidente ha bloqueado.
En un comentario destinado a irritar a Pekín, el eslovaco se comprometió a profundizar la cooperación comercial con Taiwán, la isla autogobernada que ha construido una industria de semiconductores de categoría mundial. Las recientes inversiones de empresas taiwanesas en Europa, como el plan de TSMC de 3.500 millones de euros para construir una planta de microchips en Dresde y el de Prologium de 5.200 millones para una fábrica de baterías en Dunkerque, demuestran el "potencial" de las relaciones UE-Taiwán, dijo.
Glenn Micallef: joven pero bien preparado
Paralelamente a la comparecencia de Šefčovic, seguida muy de cerca, se estaba llevando a cabo otro interrogatorio: el de Glenn Micallef, el comisario designado maltés de Cultura, Deporte y Equidad Intergeneracional, de 35 años.
Micallef, cuyo nombramiento había suscitado serias dudas por su falta de experiencia ejecutiva, se esforzó por disipar cualquier duda sobre su preparación para el cargo de alto nivel, centrando la atención en su propia generación.
"Los jóvenes están infrarrepresentados en la política y son menos propensos a votar. Esto puede llevar a políticas que no tengan en cuenta sus intereses y preocupaciones", dijo Micallef a los eurodiputados el lunes, prometiendo trabajar con este colectivo para garantizar que nadie se quede atrás.
El maltés fue interrogado por la comisión de Cultura del Parlamento sobre un amplio abanico de temas, como un futuro plan de acción de la UE contra el ciberacoso, la protección de los artistas y la cultura europeos en la era de la IA, y cómo garantizar que el presupuesto de la UE cubra los programas relacionados con la cultura, el deporte y la juventud.
La financiación de la UE debe tener "un impacto real sobre el terreno", dijo a los eurodiputados, afirmando que su atención se centraría en impulsar la competitividad del sector, preservar el patrimonio cultural y el multilingüismo, y promover la cultura en todos los ámbitos políticos.
"La cultura y el sector creativo también tienen un enorme potencial para nuestra economía. Sin embargo, gran parte de este potencial parece estar actualmente desaprovechado", declaró el comisario de 35 años.
A diferencia de otros comisarios designados, Micallef no ha trabajado antes para las instituciones de la UE, pero está familiarizado con Bruselas como antiguo jefe de la Unidad de Coordinación de la UE de Malta.