Accidente aéreo: las primeras hipótesis de los expertos sobre la caída del avión en Brasil
RÍO DE JANEIRO.- Las imágenes que muestran la trayectoria de la caída del avión bimotor de VoePass que se estrelló en Vinhedo, en el estado de San Pablo, indicarían que perdió apoyo en el aire, mientras que fue remarcado el “alto riesgo de congelación” en el aire debido a las condiciones climáticas en la zona, según las primeras hipótesis de distintos expertos en aviación.
En una entrevista con GloboNews, el ingeniero Gerardo Portela, doctorado en Gestión de Riesgos y Seguridad de la Universidad Federal de Río de Janeiro (UFRJ) afirmó que las versiones iniciales indican que hubo problemas con la integridad de la aeronave que provocaron una pérdida de control. “Por las imágenes, el avión estaba teniendo algunos problemas de control porque no podía sostenerse. Perdió apoyo”, dijo Portela, que destacó que las investigaciones sobre la caída aún deben aclarar qué provocó la caída del aparato, que tenía a bordo a 61 personas. No hubo sobrevivientes, según informaron las autoridades.
Portela recordó que, para mantenerse en el aire, el avión necesita tener una velocidad y un posicionamiento mínimos en relación con la línea del horizonte. “Cuando una maniobra se hace de forma incorrecta, los equipos fallan o la potencia de los motores no es suficiente para mantener la velocidad y la agilidad, se puede tener una pérdida de calidad y sufrir una entrada en pérdida [nombre con el que también se conoce el fenómeno del tornillo, cuando el avión gira en el aire]”, explicó Portela. El experto señaló que el avión era una aeronave comercial de tamaño medio, por lo que está sujeta a normas de seguridad más estrictas.
Aunque las primeras imágenes muestran que se han conservado partes del avión, como la cabina, la repentina pérdida de velocidad es un factor que posiblemente indique la “alta letalidad” del accidente, remarcó.
El avión perdió 3300 metros de altitud en menos de un minuto, a partir de las 12.21 (hora local), según el sitio web Flight Aware, que monitorea los vuelos en tiempo real en todo el mundo. Los registros muestran que el bimotor turbohélice comercial de VoePass despegó a las 11.59 de Cascavel y comenzó a perder altitud a las 13.20, cuando se encontraba a unos 5100 metros de altitud. Aproximadamente un minuto después, alcanzó los 1798 metros, según la última información disponible. Debía aterrizar en el aeropuerto internacional de Guarulhos a las 13.54.
Por su parte, el ingeniero aeronáutico Celos Faria de Souza, experto en accidentes de aviación y director de la Asociación Brasileña de Seguridad de Vuelo (Abravoo), basándose en las imágenes del accidente del avión de VoePass maneja dos hipótesis, una de las cuales tiene un “95% de posibilidades” de ser la causa principal, según él.
“Se preveía la formación de hielo en la zona del accidente. El hielo puede haberse formado en el ala del avión y el sistema de deshielo, por alguna razón, no funcionó. Como resultado, el avión perdió sustentación y cayó, como vemos en los videos”, dijo el experto.
Un piloto de un A320 que voló el viernes a Guarulhos llegó a informar al control aéreo de la formación de hielo en la ventanilla lateral de la cabina, algo poco frecuente. “Me siento mal, incluso lloré en casa, recordando que informé al control. Hice mi trabajo, le dije a control: ‘Formación severa de hielo. Aquí está la información, pásela a sus colegas’”, relató.
Según el piloto, es la primera vez en 16 años de vuelo que le ocurre algo parecido a un avión que pilota. “Ahora habrá una investigación, yo lo avisé. Nunca lo había visto, se formó hielo en mi ventanilla lateral”, subrayó.
La otra hipótesis, menos probable según Faria de Souza, es que el avión sufriera un desequilibrio durante el vuelo. Esto significa que una posible carga en el interior de la aeronave se desplazó hacia la parte trasera del avión, haciendo que perdiera sustentación y se estrellara.
En la región entre los estados de San Pablo y Paraná, donde se estrelló el avión, estaba activa una alerta meteorológica debido al “alto riesgo de congelación” en altura. Según información de Flightradar24, un servicio sueco que monitorea los vuelos en tiempo real, dos minutos antes del impacto en tierra, el avión volaba a una altitud de 17.000 pies. Según las autoridades de aviación internacional, el riesgo “grave” de formación de hielo se extendía entre los 12.000 y los 21.000 pies.
El sur de Brasil vive una ola de frío polar que alcanzará su punto máximo entre el sábado y el domingo. El modelo ATR 72, como el que se estrelló en San Pablo, ha tenido accidentes en distintas partes del mundo a raíz de congelamientos en su fuselaje, según expertos.
El ATR-72 que partió de Cascavel, en el estado de Paraná, con destino a Guarulhos, estaba a punto de iniciar los procedimientos de descenso cuando se estrelló cerca de Vinhedo. Según pilotos, las condiciones meteorológicas, con formación de hielo en la región donde el avión perdió el control, pudieron haber sido un factor que contribuyó al accidente.
Los pilotos están entrenados para recuperar el avión cuando se produce una pérdida de sustentación. En el caso del avión VoePass, el avión tenía altitud suficiente para recuperar teóricamente la sustentación, lo que podría ser un indicio de que el hielo pudo haber congelado el ala y el sistema de deshielo no funcionó, señalaron expertos.
Según el Cuerpo de Bomberos de San Pablo, el accidente ocurrió a las 13.25 (hora local) en la calle Edueta, a la altura del número 2500. Siete equipos participan en el rescate.
Según un experto en aviación consultado por LA NACION, el tipo de caída del ATR-72 que se ve en los videos se denomina “barrena plana”, que implica una pérdida en la que las alas dejan de sustentar a la aeronave y “cae plano, como un piano”.
“Es muy difícil, casi imposible, sacar al avión de esa condición, que de todas maneras no es algo habitual que pase”, añadió el especialista.
“Cuando el avión está en vuelo, las partículas de aire recorren la superficie de las alas, por arriba y por debajo, con baja y alta presión, y al final del ala se vuelven a encontrar, lo que le da sustento al aparato. Cuando el avión entra en pérdida, que deja de sustentar por algún motivo -por ejemplo un ‘ángulo de ataque’ muy alto-, la manera de salir de esa condición es bajar la nariz del avión y reducir el ángulo de ataque, pero eso hay que hacerlo a tiempo”, señaló.
“Pero si la pérdida de sustento continúa, hay una manera de que se agrave la condición que es que el avión entre en barrena plana. Y de esa condición es muy difícil salir, porque se pierde el control del avión en su totalidad. Los controles de vuelo no tienen efectividad: los alerones, el timón de dirección, el timón de profundidad, o sea la cola, no responden porque la aeronave está cayendo plano, como un piano. No hay partículas de aire que recorran la superficie del avión. Y volver a tener controlabilidad es muy, muy difícil”, indicó.
Según la Agencia Nacional de Aviación Civil (Anac) de Brasil, la aeronave de VoePassestaba en buen estado, con la renovación de su certificado de aeronavegabilidad prevista para junio de 2026.