¿Qué acaba de aparecer en la arena de la Florida? ¿Pudiera ser un ojo gigante? ¿Un piano? ¿Una bañera?
¿Qué es eso más adelante en la arena?
¿Es un globo ocular gigante que ha aparecido en la playa? ¿Un piano quemado? ¿Una enorme rueda de hámster? ¿Una bomba? ¿Una gran cruz?
Y nosotros que pensábamos que lo único que aparecía en las playas de la Florida eran algas, conchas, peces muertos y bultos de droga.
Pero a lo largo de los años, hemos visto una serie de rarezas que han encontrado misteriosamente su camino del mar a la orilla a lo largo de las costas del estado. He aquí un vistazo a algunas de ellas a través de los archivos del Miami Herald:
El carguero y la socialité
El 23 de noviembre de 1984, un día después del Día de Acción de Gracias, un carguero venezolano llamado Mercedes I —tan largo como un edificio de 16 pisos— encalló en el malecón que pertenecía a la socialité de Palm Beach, “la insumergible Mollie Wilmot”, como la describió el Miami Herald.
La noche que ocurrió, Wilmot, hija de un hombre que ganó millones con grandes almacenes del Medio Oeste, “hizo lo que cualquier anfitrión amable haría. Envió café recién hecho a la tripulación salada y sin afeitar y sirvió cocteles a los amigos en el interior, con la televisión de pantalla ancha encendida por si alguien se cansaba de ver el enorme barco fuera de las grandes puertas de cristal”, informó Herald.
El Mercedes, de 197 pies, no tardó en quedarse cerca de la piscina de Wilmot. Al cabo de una semana, ya estaba harta. Wilmot pensó en ponerle luces de Navidad, abrir una discoteca en su cubierta, convertirlo en un restaurante frente a la playa y pintar un paisaje marino en él “para recuperar su vista al mar”, sugirió un periodista.
No hizo nada de eso.
El carguero permaneció allí hasta marzo de 1985. Un remolcador lo arrastró mar afuera, fue dinamitado y convertido en un arrecife artificial.
“Creo que convertirlo en un arrecife es maravilloso”, dijo Wilmot al Herald cuando el Mercedes encontró su destino final. “Pero la idea de que lo hagan explotar me molesta un poco. No sé si en el último momento podré siquiera mirarlo. Depende de lo tranquilo que pueda estar”.
Wilmot, que se convirtió en una celebridad nacional a raíz del varamiento del carguero en su mansión, murió a los 78 años en 2002. Se había hablado de convertir su saga de 105 días en el sur de la Florida en una película con Bette Midler o Melanie Griffith en su papel, pero la película nunca pasó de la fase de desarrollo.
Tal vez el director de “The Last Temptation of Christ”, Martin Scorsese, podría considerar la posibilidad de hacer una película sobre la cruz del Ocean Manor Beach Resort si se mantiene el tiempo suficiente.
El piano y el banco de arena
En enero de 2011, un piano de cola apareció en un pequeño banco de arena de la Bahía de Biscayne, a unos cientos de yardas al este de Miami Shores. En pocas semanas, las imágenes de ese piano se hicieron virales en todo el mundo e incluso apareció en National Geographic.
Misterio resuelto: no era un objeto desechado de un concierto de un enfadado Elton John o Billy Joel. Resulta que un adolescente, Nicholas Harrington, su padre Mark, su hermano y un vecino le habían prendido fuego al piano en el banco de arena el día de Año Nuevo. El piano era un accesorio para una película y acabó en el garaje de la madre de J. Mark Harrington. Mark era diseñador de producción en “Burn Notice”.
Baño en las rocas
En noviembre de 2012, una bañera blanca apareció en las rocas de Government Cut, frente a Miami Beach. Algunos especularon que podría haber sido la idea de algún artista de una instalación para Art Basel Miami Beach. A la Comisión de Peces y Vida Silvestre de la Florida no le hizo ninguna gracia. Pronto la retiraron.
Aquí está mirándolo a usted
Un globo ocular del tamaño de un balón de softball apareció en Pompano Beach en octubre de 2012.
El inquietante orbe no era de un personaje descrito en la novela de Peter Benchley de 1991, “Beast”.
Más bien, la Comisión de Conservación de Peces y Vida Silvestre de la Florida dijo que el espeluznante descubrimiento probablemente se desprendió de un pez espada, ya que los atractivos peces son capturas deseadas por los pescadores deportivos y comerciales a lo largo de la costa del sur de la Florida.
Bombas a distancia
Una bomba de estruendo de la época de la Segunda Guerra Mundial llegó a la costa de St. Pete Beach en julio de 2015. La llegada de la reliquia cilíndrica de los años 40, de cuatro pies de altura e incrustada de crustáceos, provocó la evacuación de la playa y de las viviendas cercanas.
Las autoridades no tardaron en detonar la bomba tras construir bermas de arena a su alrededor y proteger a las tortugas marinas cercanas que estaban incubando.
La historia de un juguete
Un hombre de Lego de ocho pies de altura llegó a la orilla de una playa de Siesta Key en octubre de 2011. El hombre de Sarasota que encontró el colorido mega-juguete, con las desconcertantes palabras “NO REAL THAN YOU ARE” en letras blancas en su “playera” verde, supuso que su aparición en la orilla debía ser algún tipo de truco publicitario.
Pero según Herald-Tribune, que reportó de la historia, Legoland no quiso ser parte del descubrimiento y dijo que era una falsificación.
Una rueda de hamster roja gigante
Publicado el 26 de julio de 2021
Por Madeleine Marr
Conchas marinas, botellas de agua de plástico y alguna chancla. Son cosas típicas que se pueden encontrar en una playa. ¿Pero una rueda de hamster gigante? No es tan probable. El sábado por la mañana, un hombre de la Florida fue descubierto dentro de un gigantesco artilugio flotante, según la Policía del Condado Flagler, que publicó fotos de la máquina roja arrastrada hasta la orilla.
La agencia dice que el “conductor” Reza Baluchi estaba adentro, ileso. El hombre de 49 años le dijo a las autoridades que intentaba recaudar dinero para obras de caridad “corriendo” en el agua desde San Agustín t. hasta la ciudad de Nueva York pasando por las Bermudas, pero se encontró con algunos problemas.
Baluchi y su hidróptero, como él lo llama, llegaron a la orilla cerca de Hammock, en el Condado Flagler, a unas 30 millas de donde comenzó el esfuerzo en el Condado St. Johns.
Los agentes del Condado Flagler dijeron que llegaron a la playa después que varias personas alarmadas reportaron que habían visto el OFI, objeto flotante no identificado. El hidrópodo es básicamente un cilindro de metal con ruedas de paletas. El corredor de fondo le dijo a las autoridades que “se encontró con algunas complicaciones que le hicieron volver a la orilla”.
El dinero que Baluchi intentaba recaudar era para destinarlo a los primeros auxilios, los que lo sacaron de su última situación. Al parecer, la embarcación está equipada con GPS y suficiente comida y agua para varios días. Este no es el primer roce del aventurero con el desastre: Baluchi hizo su primer intento fallido en 2014, tratando de viajar al norte, antes de tener que ser rescatado en medio del Océano Atlántico con un costo de $144,000 para los contribuyentes. Su segundo intento, dos años después, también fracasó al ser detenido por la Guardia Costera por razones de seguridad. En su sitio web, RunwithReza.org, afirma que sus planes futuros incluyen reunirse con líderes mundiales para fomentar la “conectividad”, plantar un árbol como “símbolo de la creciente autonomía personal” y crear un reality show.
Una cruz gigante
Publicado el 16 de febrero de 2019
Por Howard Cohen
Un visitante celestial descendió en las arenas de Ocean Manor Beach Resort de Fort Lauderdale, con un poco de ayuda del hombre.
Una cruz de madera de 20 pies, con incrustaciones de crustáceos y otros signos de vida marina, llegó a la orilla en las aguas que rodean el complejo. La cruz fue llevada a las arenas de la propiedad por los turistas, incluidos Gary y Christine Gay, una pareja de Michigan que la encontró, la filmó y ahora lanza una interesante teoría sobre su posible origen.
Una semana después, la gente seguía especulando sobre el origen del símbolo religioso.
Lea sobre la cruz en la playa.