Abbe Lowell estableció vínculos con el mundo Trump y ahora es uno de los abogados de Hunter Biden

Hunter Biden, hijo del presidente Joe Biden, llega a la base de la Guardia Nacional Aérea de Hancock Field en Siracusa, Nueva York, el 4 de febrero de 2023. (Al Drago/The New York Times)
Hunter Biden, hijo del presidente Joe Biden, llega a la base de la Guardia Nacional Aérea de Hancock Field en Siracusa, Nueva York, el 4 de febrero de 2023. (Al Drago/The New York Times)

WASHINGTON — Incluso para los estándares flexibles de los abogados a sueldo de Washington, la movida más reciente de Abbe Lowell fue sorprendente. Después de representar a Jared Kushner e Ivanka Trump y crear estrechos vínculos con el gobierno de Trump, Lowell, uno de los abogados de escándalos más conocidos de la capital, ahora representa a un objetivo favorito del expresidente Donald Trump: Hunter Biden.

El nuevo papel de Lowell para ayudar a Biden a superar las investigaciones del Congreso republicano ha despertado malestar y desacuerdo en el círculo de Biden, donde algunos cuestionaban su reciente trabajo para la familia Trump y temían que sus tácticas agresivas pudieran resultar contraproducentes.

Este acto también ha vuelto a centrar la atención en las cuestiones legales y éticas planteadas por el Departamento de Justicia y un cliente en relación con Lowell en los últimos años. Su reaparición en los círculos demócratas después de un giro en la órbita de Trump también pone de relieve cómo el complejo industrial del escándalo de Washington puede difuminar las líneas entre la representación legal, el acceso al poder y la autopromoción.

No es inusual que abogados de primer nivel de Washington representen a clientes de ambos partidos en investigaciones de alto perfil del Departamento de Justicia y del Congreso y Lowell ha representado a una larga lista de demócratas y republicanos conocidos. Pero destaca la proximidad de Lowell al Despacho Oval de dos Casas Blancas sucesivas, e irreconciliablemente hostiles, de partidos distintos.

Durante la época en que representaba a Kushner e Ivanka Trump —ya no lo hace— Lowell, quien tenía antiguos vínculos con los demócratas, presumía de sus conexiones con la Casa Blanca de Trump, según tres personas familiarizadas con sus afirmaciones.

Su relación con Trump no ha molestado a algunos demócratas, quienes han celebrado las tácticas a puño limpio de Lowell para defender al hijo del presidente Biden. La postura agresiva se produce en medio de un creciente escrutinio de los republicanos del Congreso y una larga investigación del Departamento de Justicia sobre los impuestos de Hunter Biden y su compra de un arma de fuego.

El mes pasado, Lowell rechazó una petición republicana de información sobre Biden. En su respuesta, calificó la petición de “más que irónica, quizá hipócrita” porque los republicanos se habían opuesto a las solicitudes demócratas de registros “del presidente Trump y su familia, algunos de los cuales ocupaban cargos oficiales en el gobierno federal”, una aparente referencia a los antiguos clientes de Lowell, Kushner e Ivanka Trump (quienes han sido citados a declarar ante un gran jurado federal en la investigación sobre los esfuerzos de Donald Trump para aferrarse al poder).

Lowell también pidió que las autoridades estatales y federales y el Servicio de Impuestos Internos investigaran a los aliados de Trump que ayudaron a difundir información de una serie de archivos pertenecientes a Hunter Biden. Además, envió cartas a esos aliados de Trump y a otros, pidiéndoles que preservaran los registros en preparación para posibles litigios.

Cuando se le preguntó al vocero de la Casa Blanca Ian Sams sobre la contratación y las tácticas de Lowel, contestó en una declaración que las investigaciones de los republicanos a la familia de Biden eran “ataques partidistas con motivaciones políticas” que “merecen ser condenados”.

Lowell se unió al equipo de abogados de Biden después de haber sido objeto de escrutinio vinculado a su representación de otros clientes durante el mandato de Trump. El Departamento de Justicia examinó su participación en un posible “esquema de soborno a cambio de un indulto”, así como posibles violaciones de grupos de presión extranjeros, según documentos y entrevistas.

Lowell no fue acusado de ningún delito y el Departamento de Justicia indicó en declaraciones de los tribunales que había abandonado sus investigaciones sobre ambos asuntos.

Cuando se le pidió que hiciera comentarios sobre la información de este artículo, Lowell dijo: “Además de las declaraciones en los expedientes judiciales y las conclusiones de dos jueces, las normas éticas me impiden responder a preguntas sobre clientes anteriores o actuales”.

En cuanto a si había presumido de sus conexiones con la Casa Blanca de Trump, dijo: “Dada mi práctica arraigada de nunca pedir a un cliente algo para otro cliente, cualquiera que diga que mencioné alguna conexión que tuviera con la Casa Blanca de Trump lo está inventando”.

Lowell no ha sido bien recibido por todos en el equipo de Biden.

Chris Clark, el principal abogado de defensa penal que representa a Hunter Biden en la investigación del Departamento de Justicia, ha mantenido a Lowell a distancia al tratar ese asunto.

Y la incorporación de Lowell provocó la salida de otro abogado, Joshua A. Levy, especializado en ayudar a clientes que se enfrentan a investigaciones del Congreso.

El abogado personal del presidente Joe Biden, Bob Bauer, había recomendado a Levy para el puesto. Pero Levy había tenido desencuentros con Kevin Morris, un abogado y asesor cercano de Hunter Biden que le ha prestado dinero para pagar sus impuestos atrasados y algunas otras facturas, según una persona familiarizada con la estrategia. Morris y Hunter Biden contrataron a Lowell a finales del año pasado, lo que provocó la salida de Levy.

Clark, Levy y un vocero de Bauer declinaron hacer comentarios.

Lowell, de 70 años, creció en Nueva York, y poco después de graduarse en la Facultad de Derecho de la Universidad de Columbia fue a trabajar al Departamento de Justicia en Washington, durante la presidencia de Jimmy Carter.

Se hizo famoso cuando fue el principal abogado investigador de los demócratas en la Cámara de Representantes en la defensa contra la destitución de Bill Clinton. En los años siguientes, se especializó en representar con éxito a políticos en apuros, incluidos destacados demócratas como el senador de Nueva Jersey Robert Menéndez y John Edwards, quien fue senador y candidato a la vicepresidencia por Carolina del Norte.

Aunque también ha representado a algunos republicanos a lo largo de los años, conmocionó a los informados de Washington cuando aceptó representar a Kushner y a su esposa, Ivanka Trump, en la investigación sobre Rusia meses después de la llegada de Trump a la presidencia.

“Fue todo un escándalo dentro de la Casa Blanca cuando Jared e Ivanka contrataron a Abbe Lowell, pero fue inteligente, porque no habrían podido conseguir a otra persona más conocedora de esa puerta giratoria entre Washington y el Departamento de Justicia y de la clase gobernante demócrata”, afirmó Steve Bannon, exasesor de Donald Trump.

Bannon describió a Lowell como parte de un grupo de abogados bien conectados que “están en todos los lados de todo”.

c.2023 The New York Times Company