Más de 30 vuelos de Aerolíneas Argentinas están demorados por un conflicto gremial
Después de que más de 70 vuelos de Aerolíneas Argentinas se demoraran ayer a raíz de la asamblea de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA), delegados del gremio volvieron a reunirse esta mañana con autoridades de la compañía que dirige Pablo Ceriani por negociaciones salariales. El diálogo entre las partes no llegó todavía a buen puerto y el conflicto derivó en que ahora otros más de 30 vuelos estén retrasados.
La asamblea de este miércoles comenzó cerca de las 9, en el marco de una negociación salarial que ayer concluyó sin éxito y hoy también, según pudo confirmar LA NACION. Mientras que el debate se trasladó para el viernes próximo, en este momento hay 31 vuelos de Aerolíneas Argentinas afectados. 16 de ellos deberían salir de Aeroparque.
Desde la compañía estatal señalaron que ayer ofrecieron una recomposición salarial del 8% para agosto y que se comprometieron a reabrir las conversaciones cuando se conozca el número de inflación del mes, pero informaron que la propuesta fue rechazada por el sindicato de pilotos comandados por Pablo Biró, que presiona por obtener 12% de aumento.
“La empresa cumplió con los acuerdos anteriores, ya que ajustó los salarios de acuerdo a la inflación acumulada durante el último año, con los salarios actualizados y equiparados hasta julio inclusive”, aseguraron desde Aerolíneas Argentinas, donde recrudecieron su postura contra el gremio al entender que es “inaceptable” que esta “medida de fuerza encubierta en medio de una negociación abierta” altere el normal desarrollo de las operaciones en los aeropuertos, sobre todo porque “afecta a los pasajeros que eligen y confían en el servicio” de la línea aérea de bandera.
Fuerte réplica de APLA
En tanto, desde APLA también dijeron lo suyo en un fuerte comunicado que enviaron tras las charlas infructuosas de hoy. En primer término les bajaron el tono a los encuentros al alegar que fueron solo “informativos” y también aseveraron que la empresa inició una “campaña mediática” para “amedrentar” a los pilotos y responsabilizarlos por los retrasos en los vuelos. “La decisión de los directivos parece seguir siendo la de escalar el conflicto”, indicaron en el sindicato.
Asimismo enfatizaron en que no van a aceptar que “pretendan licuarles los salarios” y desconocer el contexto inflacionario que hay en el país. “Hasta el momento se manejaron en la negociación paritaria con la misma intransigencia que tuvieron cada vez que reclamamos la necesidad de contar con una programación estable, que deje de lado el abuso constante en las reprogramaciones y que nos permita una vida organizada”, se quejaron.
Dijeron incluso que la empresa reaccionó de la misma manera cuando se negaron a tratar el problema que tienen con el impuesto a las ganancias. “Son los mismos estratos gerenciales que en años electorales anteriores también incitaron conflictos y después permanecieron trabajando bajo un nuevo gobierno”, deslizaron.
Convencidos de que esto ya pasó otras veces, los pilotos señalaron que la “única manera” de salir de esto es manteniéndose “firmes” en los reclamos, en caso de que no haya un “cambio rotundo” en el accionar de la aerolínea.