Yahoo Noticias 25N: Da gobierno de AMLO más presupuesto para igualdad de género, pero se va a programas de bienestar
El sexenio de Andrés Manuel López Obrador, quien se dice el presidente más feminista que ha tenido México, terminará con un aumento de 532% entre 2019 y 2024 en los recursos destinados a políticas públicas para combate a la desigualdad entre mujeres y hombres, pero en su mayoría están destinados al pago de la pensión de adultos mayores y becas escolares, mientras que los programas para atender la violencia contra mujeres y salud materna, sexual y reproductiva tienen menos del 1% del monto total.
Para 2024, el Anexo 13 del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF), que concentra los recursos para la igualdad de género en México, tendrá 409 mil 108 millones de pesos, que representa 12% más que el año pasado y el monto más alto en términos reales desde que existe. Sin embargo, Fernanda García, coordinadora de Mujer en la Economía del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), explica que la asignación de los recursos no prioriza las políticas públicas orientadas a cerrar las brechas de género, sino los programas sociales insignia del presidente.
“Este anexo representa el 5% del gasto total del PEF y ha venido creciendo año con año, de hecho, tiene dentro de sus reglas de operación que nunca se puede dar un presupuesto menor del año anterior, con el objetivo de combatir la desigualdad que existe entre hombres y mujeres, pero vemos que la mayor parte de él se está destinando a la Pensión de Adultos Mayores y las becas Benito Juárez, lo que impacta en programas específicamente diseñados para erradicar la desigualdad de género“, detalla García.
Con recursos de programas sociales inflan partida de presupuesto de igualdad de género
El siguiente año, los programas del Anexo 13 que son operados por la Secretaría del Bienestar tendrán el 62% de los recursos para combatir la desigualdad de género, mientras que la prevención y atención de la violencia contra las mujeres tendrá solo el 0.08% del presupuesto, y la salud materna, sexual y reproductiva tendrá el 0.5% para 2024.
“Lo que pareciera es que el Anexo 13 es una gran bolsa para la igualdad, pero está inflada por los programas sociales, de los que además no hay transparencia sobre la asignación de recursos ni claridad sobre el componente de la perspectiva de género“, comenta la especialista del IMCO, quien reconoce que “si bien es una buena práctica el etiquetar recursos, en este caso no existe claridad sobre cómo se eligen las prioridades”.
Recortes a programas específicos para mujeres
Según el análisis “Tras la fachada del anexo 13, los programas para mujeres han perdido peso”, elaborado por la asociación México Evalúa, de los 87 programas considerados en este apartado del PEF, solo el 12% se enfoca exclusivamente en las mujeres y algunos de ellos han tenido recortes, como el de Salud materna, sexual y reproductiva, el Apoyo para el Bienestar de las Niñas y Niños hijos de Madres Trabajadoras –antes de Estancias Infantiles– y la Atención a Víctimas.
Los recursos destinados a la salud materna pasaron de 2 mil 217 millones 506 mil 690 pesos reales en 2023 a 2 mil 141 millones 477 mil 386 pesos en 2024, es decir, 3.42% menos.
El Programa de Apoyo para el Bienestar de Niñas y Niños, Hijos de Madres Trabajadoras tuvo 2 mil 821 millones 602 mil 546 pesos reales este año, mientras para el siguiente se le asignaron 2 mil 814 millones 265 mil 873 pesos, lo que representa una reducción del 0.26%.
En el caso de la Atención a Víctimas a cargo de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas, el presupuesto bajó 4.5%, al pasar de 8 millones 151 mil 552 pesos reales para operar en 2023, a 7 millones 778 mil 199 pesos para el 2024.
En contraste, la Pensión para Adultos Mayores tendrá en 2024 un presupuesto de 451 mil 764 millones de pesos, lo que representa 28% más de lo que se le asignó este año.
Para México Evalúa, “el truco del incremento” de más de 532% en el presupuesto para la igualdad entre mujeres y hombres está en la inclusión de la pensión de adultos mayores, las becas para estudiantes, Jóvenes Construyendo el Futuro y Sembrando Vida, programas que califica como “sin prioridad de género, lo que no ayuda a eliminar las brechas de desigualdad“.
Presupuesto limitado para quienes huyen de la violencia de género
Entre diciembre de 2018 y octubre de 2023 fueron asesinadas 18 mil 417 mujeres en México, aunque solo 4 mil 760 se reconocieron como víctimas de feminicidio, y 317 mil 176 fueron lesionadas de manera intencional, según cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).
Solo en los primeros meses de este año fueron asesinadas 2 mil 882 mujeres en México, y 58 mil 990 fueron lesionadas de manera intencional, de acuerdo con el reporte de víctimas de la Secretaría de Seguridad.
En el caso de los delitos sexuales, en lo que va de la administración de López Obrador se han registrado 71 mil 203 carpetas de investigación por violación simple, 27 mil 703 por violación equiparada, 139 mil 465 por abuso sexual, 40 mil 145 por acoso sexual, 11 mil 440 por hostigamiento sexual y 22 mil 639 por violencia de género.
En el mismo periodo de tiempo, estos delitos han tenido aumentos: el acoso sexual subió 186%; la violencia de género, 74%; las violaciones equiparadas, 67%; el hostigmiento sexual, 55%, y el abuso sexual 31%. La violación simple fue el único ilícito que registró una disminución, del 1.14%.
Pese a este contexto de violencia, el Programa de Apoyo para Refugios Especializados para Mujeres Víctimas de Violencia de Género, sus Hijas e Hijos –que forma parte del Anexo 13– ha tenido que trabajar con recursos limitados y que se entregan a destiempo por parte de las autoridades, lo que de acuerdo con Wendy Figueroa, directora de la Red Nacional de Refugios (RNR), ha generado dificultades operativas que afectan la atención que dan.
“Este año, al igual que el pasado, tuvimos retrasos en la transferencia de recursos para operar los refugios, y cuando comenzaron a llegar nos los dieron a cuentagotas, lo que evidencia que no hay un compromiso por parte de las autoridades, que además no han incrementado en términos reales el presupuesto desde 2020, hemos venido operando prácticamente con la misma cantidad, lo que limita la capacidad de brindar servicios”, afirma Figueroa.
Para 2024, el Programa de Apoyo para Refugios Especializados para Mujeres Víctimas de Violencia, a cargo de la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres (Conavim), tendrá 485 millones 673 mil 998 pesos, monto 0.2% mayor en pesos reales al que tuvieron este año, lo que a consideración de la directora de la RNR es insuficiente para el alojamiento, seguridad y atención especializada de las usuarias.
“Los refugios han mantenido su operación ininterrumpida, aunque hemos tenido que limitar el mantenimiento de los espacios, postergar algunas atenciones y hacer lo que podemos, incluso con recursos propios, para la compra de pañales, toallas femeninas y medicamentos, pero no hemos dejado de dar la atención a ninguna persona”, agrega la directora de la Red.
Aun con los retrasos en la transferencia de recursos y el presupuesto limitado, hasta septiembre de 2023 la RNR tuvo un aumento de al menos 3% en el número de atenciones otorgadas a mujeres víctimas de violencia, en comparación con 2022, cuando estos apoyos subieron 12% en relación con el año anterior.
La deuda del Sistema Nacional de Cuidados
Desde 2020, la Cámara de Diputados aprobó la creación del Sistema Nacional de Cuidados (SNC), pero a la fecha la iniciativa sigue congelada para su discusión y aprobación en el Senado de la República, lo que ha detenido su conformación.
Aunque entidades como Jalisco, Nuevo León, el Estado de México y Yucatán han avanzado en el reconocimiento del derecho al cuidado en sus constituciones, Tania Beltrán, investigadora del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), considera que “un SNC es necesario para romper con los ciclos de pobreza y desigualdad derivados de que algunas personas deben quedarse a cuidar sin paga, mientras otros pueden salir a emplearse en actividades remuneradas”, situación que afecta principalmente a las mujeres.
De acuerdo con un análisis realizado por el CIEP, para 2024 habrá una inversión de 44.8 millones en programas relacionados con los cuidados, lo que es 8% mayor a lo que recibieron en 2023, pero 27% menor comparado con lo que se les otorgó en 2016.
Entre los programas considerados por el CIEP está el Apoyo para Niños, Niñas, Hijos de Madres Trabajadoras; el Apoyo para Refugios Especializados para Mujeres Víctimas de Violencia; la Educación Inicial; la Atención a Personas con Discapacidad; estancias de Bienestar, así como los servicios de asistencia social integral. Sin embargo, el Centro reconoce que aun con estas acciones aisladas que brindan algún nivel de cuidado, México “enfrenta el desafío de desarrollar e implementar una estrategia integral para un SNC”.
Fernanda García, del IMCO, destaca que un SNC costaría a México entre 1.2% y 1.4% del PIB, “y no hay recursos asignados para su creación, lo que resulta preocupante en un contexto donde se han eliminado programas como las estancias infantiles y escuelas de tiempo completo”.
Las deficiencias en el fortalecimiento de la igualdad
Desde 2015, el Instituto de las Mujeres (Inmujeres) tuvo una baja de presupuesto, al pasar de mil 485 millones de pesos reales a 974 millones previstos para su operación en 2024. En 2022, el organismo tuvo su menor asignación presupuestaria, con 961 millones.
Fernanda García explica que a partir de 2022, cuando el Inmujeres tuvo su presupuesto más bajo (961 millones de pesos reales), este ha tenido un ligero incremento, “pero este sigue siendo 34% menor que el que se tuvo en 2015, lo que sin duda puede impactar en los programas que están bajo su responsabilidad”.
En el caso del “Fortalecimiento de la Igualdad Sustantiva entre Mujeres y Hombres”, operado por el Inmujeres, la Auditoría Superior de la Federación (ASF) encontró que en el ejercicio de 2022 el Instituto no estableció actividades que permitieran evaluar sus aportes en la política nacional, por lo que no se pudo acreditar su contribución en materia de igualdad en las dependencias y entidades del Estado mexicano.
Aunque se ejercieron 355 millones 810 mil pesos en este programa, destinado al desarrollo de actividades que aporten a la planeación, diseño y formulación de políticas públicas para la igualdad de mujeres y hombres, capacitación y asistencias técnicas, la auditoría de desempeño 2022-1-47HHG-07-0188-2023 señala que “las áreas de mejora identificadas, así como la carencia de actividades de control y sistemas de información sobre su contribución podría afectar la atención del problema público que se pretende erradicar”.
Por ello, la ASF recomendó modificar y reorientar el diseño de los indicadores de resultados del programa, y delimitar las acciones encaminadas a la planeación, coordinación de las políticas de igualdad y desarrollar mecanismos de control interno que le permitan contar con evidencia que sustente sus actividades, así como su contribución a la atención de la desigualdad de género.
Tal como reconoce el Inmujeres en su Programa Institucional 2020-2024, “en la actualidad, persiste una desigualdad estructural que afecta a mujeres, por su identidad y condición, que demanda la implementación de políticas y la protección de sus derechos. Asimismo, las dependencias e instituciones, en especial del ámbito federal, no cuentan con capacidades institucionales, instrumentos y mecanismos para atender la desigualdad, y no hacen uso de sus recursos humanos y materiales para implementar medidas de carácter temporal que aceleren su avance”.
