21 Estados miembros advierten a la Comisión Europea de que no se puede ignorar la capacidad de recuperación del agua

21 Estados miembros advierten a la Comisión Europea de que no se puede ignorar la capacidad de recuperación del agua

En una carta conjunta enviada este 17 de julio, la mayoría de los Estados miembros de la UE han pedido a la Comisión Europea que impulse la seguridad y la resistencia hídricas en todo el bloque, afirmando que este recurso natural estratégico y vital debe tratarse como una "prioridad absoluta" en la próxima agenda de la UE.

Liderada por Portugal, la advertencia conjunta da la voz de alarma sobre el alto nivel de sequías, escasez de agua e inundaciones en todo el bloque, que los firmantes afirman que "ya no es una anomalía en Europa".

Alemania, Austria, Bélgica, Bulgaria, Chipre, Croacia, Dinamarca, Eslovaquia, Eslovenia, España, Estonia, Francia, Grecia, Italia, Lituania, Luxemburgo, Malta, Países Bajos, Polonia, Portugal y Rumanía expresaron su preocupación durante la reunión informal de ministros de Medio Ambiente celebrada esta semana bajo Presidencia húngara, y pidieron al Ejecutivo comunitario medidas concretas para desarrollar un "enfoque global" en línea con la Agenda Estratégica, el documento de orientación política del Consejo aprobado el 27 de junio.

Alrededor del 20% del territorio europeo y el 30% de los europeos sufren estrés hídrico cada año, según la Agencia Europea de Medio Ambiente, que estima el coste económico en unos 9000 millones de euros anuales, cifra que excluye los daños a los ecosistemas y podría alcanzar los 65.000 millones de euros anuales a finales de siglo.

En la carta dirigida al vicepresidente ejecutivo de la Comisión, Maroš Šefčovič, los 21 Estados miembros piden un enfoque holístico con un "mayor nivel de articulación" a escala de la UE que abarque los recursos de agua dulce y salada, la protección de los ecosistemas, el consumo humano, la agricultura y los sistemas alimentarios, la energía y las industrias.

"Es necesario un enfoque sistémico para garantizar la sinergia y la coherencia en todos los procesos legislativos y de planificación, a fin de integrar mejor las consideraciones relativas al agua y los objetivos de conservación para garantizar la disponibilidad y la seguridad del suministro de agua", reza la carta conjunta.