Al menos 2 militares heridos al caer en un campo minado en el suroeste de Colombia

Bogotá, 14 oct (EFE).- Al menos dos militares resultaron heridos este lunes al caer en un campo minado en El Plateado, el pueblo del suroeste de Colombia donde el Ejército realiza una operación desde el sábado para recuperar el control que tiene una facción del Estado Mayor Central (EMC), la mayor disidencia de las FARC.

La Tercera División del Ejército detalló que un suboficial y un soldado "resultaron heridos por la activación de minas antipersonal instaladas por las disidencias Carlos Patiño", que hacen parte de la facción liderada por alias 'Iván Mordisco', en esa zona del convulso departamento del Cauca.

"Uno de los artefactos había sido instalado en cercanías a una vivienda y a una escuela, lo que demuestra una vez más el inminente riesgo en el que se encuentran los pobladores por la presencia de estos elementos explosivos", agregó la institución.

Los militares, que sufrieron heridas leves "que no comprometieron sus extremidades", fueron sacados de la zona en un helicóptero y ya reciben atención médica.

Para la 'Operación Perseo' los militares están utilizando "unidades especiales, aeronaves y capacidades de artillería" como tanques en El Plateado, que hace parte del municipio de Argelia.

Igualmente, las autoridades publicaron carteles de búsqueda de siete jefes del grupo Carlos Patiño, incluido su máximo jefe, Anderson Andrey Vargas Suns, alias 'Kevin'.

En ese sentido, han logrado detener a dos supuestos miembros del Carlos Patiño, así como incautado "fusiles, municiones y artefactos explosivos". Según el Ejército, varios disidentes también han muerto en esta operación.

En total son más de 1.400 militares los que han llegado a la zona desde el sábado con el objetivo de garantizar la seguridad de las más de 8.000 personas que viven en El Plateado, que desde hace varios años es uno de los bastiones de la facción del EMC que lidera alias 'Iván Mordisco' y que no está en negociaciones de paz con el Gobierno.

El Plateado está en la zona del Cañón del Micay, clave para el narcotráfico porque es un paso de la ruta de la droga que sale de Colombia por el Pacífico.

Por esa razón, sus habitantes viven en constante zozobra por los ataques que comete este grupo armado y por los enfrentamientos con el Ejército.

Como respuesta a la 'Operación Perseo', las disidencias lanzaron drones con explosivos contra el caserío, ataque que dejó más de una decena de heridos entre la tropa y los civiles.

(c) Agencia EFE