Gobierno de Panamá suspende venta de tierras, pero huelga sigue
Panamá suspendió este martes temporalmente una ley para vender tierras públicas en la ciudad de Colón, tras dos días de huelga general y violentos enfrentamientos que han dejado dos muertos, pero los líderes del movimiento advirtieron que continuarán las protestas. El gobierno anunció que enviará al Ejecutivo una modificación a la ley recientemente aprobada por el Congreso, que autoriza la venta de tierras en la Zona Libre de Colón, para que el producto de esa venta se destine en un 100% al desarrollo social de la provincia, una de las más pobres del país, en lugar del 35% establecido inicialmente. "Mientras se discute esta propuesta, el gobierno no va a adelantar los procesos de venta de tierras, es decir, las ventas están suspendidas", dijo a la AFP el portavoz oficial, Luis Eduardo Camacho. "Exigimos la derogación de la ley, nosotros no queremos un 100 por ciento sino que no vendan nuestras tierras", dijo a RPC Radio Felipe Cabezas, dirigente del Frente Amplio Colonense, que encabeza las protestas contra el gobierno. Este martes, una persona murió en medio de los enfrentamientos entre manifestantes y policías, lo que eleva a dos el número de víctimas mortales desde que estallaron los disturbios el pasado viernes. "Efectivamente, se ha registrado otra muerte, sin embargo no podemos asegurar que haya sido la policía (la responsable)", dijo a la AFP la portavoz de la policía, Mara Rivera. Según Cabezas, la nueva víctima es un indígena de la etnia Kuna de 29 años, que murió por el impacto de una bala disparada por la Policía. El pasado viernes un menor de 10 años murió en medio de las protestas. La controvertida ley establece que el Estado podrá vender tierras de la zona y el 35% de lo recaudado iría a un fideicomiso a cargo de autoridades de Colón para inversión social, mientras que el 65% restante ingresaría al tesoro nacional. Pero el gobierno panameño anunció el martes que va a presentar al Congreso una modificación para que el 100% de los ingresos vaya a ese fideicomiso, aunque no logró calmar a los opositores. Funcionarios del gobierno se desplazaron este martes a Colón, 80 km al norte de la capital, para intentar un diálogo con los huelguistas, pero estos rechazaron cualquier negociación mientras la ley esté vigente. "No es ningún fracaso, yo sigo optimista de que vamos a poder sentarnos. El gobierno ha dado muestra de su buena fe de querer conversar", dijo el ministro de Economía, Frank De Lima. Sin embargo, tanto grupos empresariales como sindicales han ampliado un día más la huelga general de 48 horas que comenzó el lunes en la provincia de Colón. Desde primeras horas del martes, cientos de personas se manifestaron en diversos puntos de Panamá, pero las principales movilizaciones se dieron en Colón, donde las protestas terminaron en una batalla campal. "La situación en las calles de Colón es muy delicada y muy peligrosa", dijo el diputado opositor Miguel Salas, presente en las protestas. El alcalde de Colón, Dámaso García, aseguró que "las pérdidas económicas son muy grandes, en este momento incalculables", ya que "la mayoría de los almacenes, supermercados y empresas no han podido abrir". En algunas tiendas de la ciudad se podían ver filas de personas que buscaban abastecerse, temerosas de que la crisis se agudice y empiecen a escasear los alimentos. Con más de 3.000 empresas en operaciones, la zona franca panameña movió en 2011 mercancías por más de 29.000 millones de dólares y aportó 1.700 millones de dólares a los 23.200 millones del Producto Interno Bruto de Panamá. Protesta en Colón (norte de Panamá) contra una ley de venta de tierras estatales en la zona franca local, el 19 de octubre de 2012. La huelga general en la ciudad panameña de Colón, en contra de una ley que autoriza la venta de tierras estatales, entró el martes 23 de octubre de 2012 en su segundo día acompañada de disturbios callejeros y sin visos de diálogo entre los opositores y el gobierno.