Una foto en Instagram ayuda a capturar a traficantes de armas en Nueva York

El Departamento de Policía de la ciudad de Nueva York está de celebrando la redada de armas más grande de su historia consistente en 254 armas de fuego y 19 acusaciones. Y aunque pueda parecer increíble todo comenzó con una foto publicada en Instagram.

Matthew Best es un rapero poco conocido de Brooklyn. Su nombre artístico es Neno Best y probablemente nunca has escuchado de él, pues solo ha lanzado un par de canciones. Como el negocio de la música no le iba muy bien, Matthew vendía armas ilegalmente en las afueras del estudio de grabación. Al parecer esto no era suficiente y tenía que jactarse en su cuenta de Instagram de la cantidad de dinero que estaba haciendo.

El joven delincuente publicó varias fotos y un video donde mostraba a sus seguidores montones de dinero y alardeaba acerca de su actividad criminal. Un tiempo después borró todo el material que lo incriminaba, pero su imprudencia ya había llamado la atención de las autoridades que comenzaron a investigar. Muy pronto un grupo de oficiales encubiertos descubrió un cartel de tráfico ilegal de armas interestatal.

El año pasado un detective solitario comenzó a investigar a Best y encontró que el rapero y un amigo, Omole Adedji, estaban vendiendo armas tres veces más caras de lo que pagaban a los proveedores principales Walter Walker de Sanford, Carolina del Norte, y Earl Campbell de Rock Hill, Carolina del Sur. Estos dos hombres ahora enfrentan acusaciones por dirigir un cartel que transportaba armas del sur de los Estados Unidos hasta Nueva York.

La policía de la Gran Manzana dice que confiscó 243 armas de fuego, nueve rifles y dos escopetas, 36 de estas armas habían sido reportas como robadas. Best, el rapero jactancioso, su amigo Adedji están entre los 19 acusados que cayeron en el operativo policial.

Esta no es la primera vez que un criminal es atrapado por publicar lo que no debía en una red social. En el 2012 Michele Grasso, un narco italiano, fue capturado después de estar dos años huyendo porque publicó unas fotos en su perfil de Facebook. En las fotos compartía sus "aventuras" en el museo de cera en Londres.