Los planes que Al Qaeda encriptó en un video porno

Miembros de Ansar al-Sharia, uno de los grupos hermanados con Al Qaeda, durante una rueda de prensa el 29 de abril (REUTERS/Stringer)
Miembros de Ansar al-Sharia, uno de los grupos hermanados con Al Qaeda, durante una rueda de prensa el 29 de abril (REUTERS/Stringer)

El mayor hallazgo que realizó la inteligencia anti-terrorista mundial el año pasado fue una película porno. Se llamaba Kick ass (traducible como Dale duro, y parodia de una película de superhéroes adolescentes) y fue hallada en un dispositivo de memoria USB escondido bajo los calzoncillos de un austríaco llamado Maqsood Lodin que intentaba entrar en Alemania desde Pakistán (entre medias había pasado por Budapest y Hungría) en mayo de 2011. A simple vista, la película era lo que prometía: una cinta subida de tono con mucho desnudo y mucho gemido. Pero, tras semanas de laborioso escrutinio, las autoridades de Estados Unidos terminaron calificándola de "oro puro".

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El fichero contenía, encriptados, más de cien documentos detallando los planes terroristas de Al Qaeda, y la memoria USB, manuales de formación para futuros miembros, traducidos al alemán, inglés y al árabe. Era como una hoja de ruta de la organización, escrita en 2009, para el futuro cercano. Después de la muerte de Osama bin Laden, ha sido el golpe más exitoso a los planes de los terroristas árabes.

En particular, uno de los documentos detallaba la nueva estrategia del grupo: secuestrar cruceros y atacar ciudades europeas con una serie de explosiones y tiroteos coordinados, algo muy parecido a los que paralizaron Bombay en noviembre de 2008, cuando diez francotiradores mataron a 164 personas en un asedio de tres días.

Uno de los documentos se llamaba "Planes futuros" y, aunque su autoría no está clara, debía de provenir del núcleo duro de Al Qaeda. Según informó el periodista de investigación Yassin Musharbash, del periódico Die Zeit, en él se especulaba que "si secuestramos cruceros, podemos usarlos para presionar a la sociedad". Para ello, vestirían a los pasajeros de naranja, como los presos de la cárcel de Guantánamo, y luego filmarían sus ejecuciones.

En cuanto al otro documento, el departamento de Estado de Estados Unidos ya tenía pruebas de su veracidad. Contiene las intenciones de Al Qaeda de asediar capitales europeas al estilo de Bombay. En otoño de 2010, un año después de la redacción del escrito, ya habían alertado a los ciudadanos de que viajaran "con cautela" a Europa. No llegó a pasar nada. Seguramente porque, como asevera Musharbash: "El documento da a entender, muy claramente, que Al Qaeda está bajo muchísima presión. Sabe que está siendo observada muy de cerca. Incluso dice que las agencias Occidentales se han vuelto muy expertas en estropearles los atentados".

De ahí los manuales de formación de futuros terroristas. De ellos se desprende que Al Qaeda prefiere ahora entrenar a yihadistas europeos con rapidez y luego devolverlos a su país con instrucciones muy claras sobre cómo mantener el contacto con sus superiores en secreto. En realidad, los europeos serían un señuelo para proteger a las verdaderas mentes pensantes del grupo.

El otro cambio era principalmente tecnológico: el autor estimaba que sería más práctico usar tecnología menos puntera y más barata. Así podrían perpetrar atentados más pequeños con los que distraer a los servicios secretos mientras planeaban uno a gran escala, estilo 11-S. Es posible que el ataque que sufrió Francia hace poco más de un mes bajo la pistola de Mohammed Merah respondiera a esa estrategia.

Según Musharbash, "la idea general sigue viva y en cuanto Al Qaeda tenga la posibilidad de acometerla, lo harán inmediatamente".

Fuente: CNN