La polémica monja catalana que escandaliza con sus ideas
Televisiones finlandesas, periódicos alemanes, webs británicas o radios sudamericanas. Todo el mundo quiere conocer mejor a la hermana Teresa Forcades. Una monja que defiende la revolución bolivariana en Cataluña. Su severo hábito oscuro, propio de la orden de las benedictinas a la que pertenece, no delata su personalidad. Forcades se dio a conocer vía Youtube cuando, hace ya cinco años, grabó un vídeo en el que ella misma criticaba a la Organización Mundial de la Salud y las compañías farmacéuticas por promover una vacuna -contra la gripe A- que calificó de riesgo para la salud pública. Sus declaraciones, como recoge la BBC, desataron airadas críticas por parte de miembros de la comunidad médica, como también lo hicieron sus incendiarias opiniones contra la penalización del aborto, declaraciones públicas a las que el Vaticano respondió con una carta pidiendo explicaciones.
Pero lejos de moderarse, Forcades viene ahora a defender a ultranza una reforma política radical en Cataluña inspirada en el Socialismo del siglo XXI de Hugo Chávez. El cambio incluiría "aspectos esenciales" como nacionalizar la banca, las compañías energéticas, frenar las privatizaciones o defender el derecho de las personas a decidir sobre su propio cuerpo.
La hermana Forcades ha recibido multitud de críticas por su "separatismo", y más aún desde que apoyara fervientemente los actos reivindicativos que reclaman una consulta electoral sobre la independencia catalana. Sin embargo ella solo atiende a la opinión de sus compañeras benedictinas, quienes le dieron la bendición para exponer su "credibilidad transversal" y ponerla al servicio de un proceso pacífico, democrático, pero contundente.
Fuera de su congregación, la cosa pinta peor. Su postura favorable al aborto, al feminismo radical, al matrimonio y a la adopción gay han levantado ampollas siendo prohibida su intervención en unas charlas organizadas por la Conferencia de Superiores y Superioras Mayores del Perú. El arzobispo de Lima solicitó la prohibición amparándose en la potestad del obispo diocesano para velar por la recta doctrina en su jurisdicción.
La aventura de Forcades va más allá de la simple anécdota. En total ha reunido 40.000 firmas para respaldar a un movimiento que pretende crear una candidatura unitaria para las próximas elecciones parlamentarias de Cataluña, en 2016.
En declaraciones a ‘Público’, Forcades augura un recorrido creciente al proceso constituyente: "Sigo pensando que llegaremos a las 100.000 adhesiones antes de que termine el año. Y Catalunya tiene 924 pueblos, así que imagina los muchos que quedan por visitar".
Fuente: Yahoo! España
Independentista, feminista, pro-gay y monja benedictina