Ataque con armas químicas en Siria reabre viejas heridas entre los kurdos

Por Isabel Coles HALABJA, Irak (Reuters) - Un olor dulce, como de manzanas, recorrió el aire. En un campo, los ojos de una vaca comenzaron a llorar. Un pájaro cayó desde el cielo, con las plumas chamuscadas, y las bocas de la gente comenzaron a llenarse de úlceras. Al menos 5.000 personas fueron atacadas con gas letal ese día de primavera de 1988 cuando la fuerza aérea de Irak lanzó armas químicas contra el pueblo de Halabja, en el norte de mayoría kurda del país, un momento decisivo en una larga historia de opresión. Los sobrevivientes a esa ofensiva están reviviendo el horror luego de un ataque con gas sarín en un suburbio bajo control rebelde de Damasco durante agosto, que también ha alarmado a los kurdos en Siria. Expertos internacionales llegaron a Damasco esta semana para comenzar el proceso de destruir el arsenal químico del presidente Bashar al-Assad una tarea problemática en medio de una guerra. Los kurdos en Siria e Irak temen que Assad, quien no ha sido castigado por el ataque con gas letal, se haya librado de la culpa, y que si cambia el curso de la guerra en Siria, sus armas químicas puedan caer en las manos de los insurgentes islamistas. "La herida de nuestro pueblo ha sido reabierta en Siria", dijo Hamida Hassan Mohammed, visiblemente agitada mientras recordaba lo que ocurrió en su poblado natal hace 25 años. "Nosotros nos sentimos como si Halabja hubiese sido atacado nuevamente", agregó. Los residentes de Halabja salieron a las calles a protestar contra el ataque del 21 de agosto con armas químicas en Damasco, que Estados Unidos dice dejó a más de 1.400 personas muertas y lo atribuyó a Assad, a quien amenazó con ataques aéreos para castigarlo. Siria niega su responsabilidad. Esa amenaza se desvaneció con un acuerdo para erradicar las armas químicas de Siria, que el Consejo de Seguridad de la ONU adoptó como una resolución que no incluye medidas militares automáticas contra el Gobierno de Assad si no cumple con la orden. Los kurdos en Irak y Siria recibieron con beneplácito la iniciativa, pero algunos lamentaron que se hayan evitado los ataques aéreos contra Assad. "PRECEDENTE PELIGROSO" "Halabja debió ser una lección. Si el régimen sirio no es hecho responsable, fija un precedente peligroso", dijo Abdelhakim Bashar, jefe del Partido Democrático del Kurdistán en Siria. "Lo que nosotros tememos es que la agenda vaya a cambiar desde remover al régimen a remover sus armas químicas. Eso es un proyecto a largo plazo", agregó. Naciones Unidas describió el ataque en Siria como el más significativo de su tipo desde Halabja -que fue el clímax de una campaña mayor conocida como Anfal durante la que miles de aldeas kurdas fueron arrasadas, al menos un millón de personas se vieron obligadas a abandonar sus casas y cerca de 200.000 murieron. En Halabja, que se encuentra en un valle entre montañas en la frontera con Irán, un gran monumento con la forma de manos se eleva hacia el cielo en agonía o súplica. "Ustedes aún pueden ver el impacto en el pueblo y nuestro cuerpos", dijo Loqman Mohammed, jefe de una asociación de sobrevivientes de Halabja, parado en el centro de los escombros de un edificio destruido por el bombardeo iraquí. "Cuando mi familia y yo vimos las imágenes (del ataque químico en Siria) en la televisión, nosotros lloramos porque nosotros sentimos su dolor. Los efectos se revelarán por sí mismos en los próximos años", agregó. Las víctimas de Halabja aún sufren los efectos del ataque químico, incluidas dificultades respiratorias, ceguera y quemaduras residuales. La residente del pueblo Hamida Hassan Mohammed vació una bolsa de llena de medicinas en la alfombra como evidencia de sus continuos problemas de salud. Quienes viven en Halabja, cuyo drama fue ignorado en gran parte por la comunidad internacional, dicen que Assad merece el mismo destino que Saddam Hussein, quien estuvo detrás del ataque químico contra su pueblo y eventualmente fue sometido a juicio y ahorcado en el 2006, aunque por otros crímenes. (Editado en Español por Ricardo Figueroa)